Pocas son las sorpresas, por no decir ninguna, las vividas en las últimas ediciones del Tour de Francia. Los favoritos, más que en cualquier otra prueba, cumplen su papel vaticinado de antemano en una cita donde pueden darse imprevistos en las primeras posiciones pero nunca en el ganador. Para vestir de amarillo en París es necesario haber estado disputando la victoria en las pruebas de la primera mitad de temporada. Una condición que se cumple desde 2007 con la salvedad del triunfo de Carlos Sastre en 2008, una excepción con muchos matices.

El resto de ganadores demostraron anteriormente su condición. Paris-Nice, Tirreno-Adriatico, Vuelta al País Vasco, Tour de Romandie y Critérium du Dauphiné vieron la mejor cara de los favoritos al amarillo. Cinco pruebas World Tour que cuentan con un denominador común, el olvido del Tour de Suisse. Y es que la prueba helvética no es un icono para preparar el Tour de Francia, o eso al menos pensaron los últimos ganadores.

Un simple análisis nos da este resultado. Para ello tomaremos en consideración los últimos vencedores del Tour que no han sido desposeídos de sus títulos con posterioridad.

@cobblesandhills

@cobblesandhills

No es flor de un día

Desde Armstrong todos los vencedores ganan el Tour después de temporadas con más victorias, muchas de ellas de prestigio. Así Alberto Contador en 2007, su primera victoria, logró alzarse anteriormente con la Paris-Nice -más dos etapas- y Vuelta a Castilla y León. En 2009 venció en el Algarve y País Vasco además de ser cuarto en la Paris-Nice, segundo en Castilla y León y tercero en el Dauphiné; llegó al inicio del Tour con siete triunfos. En 2011 Cadel Evans alcanzó la ronda gala con los triunfos en Tirreno-Adriatico y Tour de Romandie sumando, además, el segundo puesto en Dauphiné.

Dos caminos hacia el Tour han demostrado ser los mejores ejemplos que su victoria no fue flor de un día. Bradley Wiggins venció en 2012 Paris-Nice, Tour de Romandia y Dauphiné siendo tercero en Algarve y abandonando en Catalunya. Un año después Chris Froome no fue menos. Venció en Omán, Critérium International, Tour de Romandie y Dauphiné siendo segundo en Tirreno-Adriatico.

Carlos Sastre, una excepción con muchos matices

Un Tour de Francia extraordinariamente abierto en el que dos ciclistas de un perfil marcadamente clasicómano como Davide Rebellin y Fabian Cancellara ganaron Paris – Nice y Tirreno – Adriatico. Por su parte, el por entonces campeón Alberto Contador vio como su equipo Astana no fue invitado. Además Tour de Suisse y Critérium du Dauphiné las ganaron Roman Kreuziger y Alejandro Valverde, corredores que nunca han subido al podio del Tour de Francia, mientras que por su parte la Itzulia se la llevó Andreas Klöden, quien aquel año, como Contador, no estuvo presente habiendo subido dos veces al podio pero nunca como ganador.

Tour de Suisse y Tour de France, doblete utópico

Nos faltarían dedos en las manos para contar las veces que durante el pasado mes de junio hemos escuchado aquello de que “El Tour de Suisse es la cuarta grande”, pero lo cierto es que históricamente los ganadores de la ronda helvética han sucumbido semanas más tarde en el Tour de Francia. Y es que el doblete más reciente es el de Lance Armstrong en 2001, quien fue capaz de conseguirlo 27 años más tarde de que Eddy Merckx lo consiguiese por última vez en 1974.

Tour de Romandie, tres años decidiendo el amarillo en París

Si resulta curiosa la histórica dificultad para reeditar el triunfo del Tour de Suisse en París, este dato se torna en sorprendente cuando comparamos la hermana menor postprimaveral. Desde su estreno en 1947 tardó 40 en ver como uno de sus vencedores conseguía la victoria en el Tour de Francia. Fue a manos de Stephen Roche en 1987, y este hecho volvió a repetirse cuando Cadel Evans se hizo con ambas victorias en 2011. Sin embargo esta tendencia ha saltado por los aires durante las dos últimas temporadas, ya que también Bradley Wiggins y Chris Froome han acabado consiguiendo este hito.

¿Quién podría ganar el Tour de Francia?

Teniendo en cuenta los resultados de la temporada los candidatos la nómina de aspirantes se reduce. Con Carlos Betancur apartado de Ag2r – La Mondiale, los hombres que han conseguido triunfar en carreras World Tour durante esta temporada son Alberto Contador (Tirreno – Adriatico e Itzulia), Joaquim Rodríguez (Volta a Catalunya), Chris Froome (Tour de Romandie), Andrew Talansky (Critérium du Dauphiné) y Rui Costa (Tour de Suisse).

Quedan fuera, por tanto, hombres como Vincenzo Nibali, Alejandro Valverde o Bauke Mollema. Además teniendo en cuenta que Purito sigue renqueante de sus caídas en el Tríptico de Cotas y el Giro de Italia y ha declarado que su intención es la lucha por etapas el cupo se reduce. Entre los cuatro restantes Andrew Talansky parece todavía lejos de poder aspirar al amarillo y Rui Costa no parece el más indicado para romper la maldición francosuiza. Por tanto, todo se reduciría a Chris Froome y Alberto Contador. Si seguimos con el patrón de las últimas ediciones y el Tour de Romandie dicta sentencia, la apuesta resulta clara: Chris Froome.