Con muchos más problemas que el sábado, pero nuevamente Marcel Kittel (Giant – Shimano) ha vuelto a demostrar que en esta edición de la Corsa Rosa es el gran rival a batir en las llegadas al sprint. En esta ocasión no ha contado con el apoyo de sus compañeros para que le situasen en buena posición en el sprint, pero unos brutales últimos 100 metros del alemán le han valido para imponerse a un Ben Swift (Sky) que parecía tener la victoria asegurada unos instantes atrás. Michael Matthews (Orica GreenEdge) continúa conservando el maillot de lider.
Como viene siendo habitual en estas primeras etapas de las grandes vueltas con un final tan predecible, poco se peleó por formar la fuga de la jornada. Prácticamente desde el banderazo de salida, Yonder Godoy (Androni Giocattoli – Venezuela), Maarten Tjallingi (Belkin), Miguel Ángel Rubiano (Colombia), Gert Dockx (Lotto – Belisol) y Giorgio Cecchinel (Neri Sottoli), que se uniría pocos kilómetros después, se marcharon por delante con el consentimiento de un pelotón que lo tenía todo controlado, con los hombres de Orica en cabeza.
En la tónica de los días anteriores, la lluvia tampoco se ha querido perder el último día del Giro en tierras irlandesas. De nuevo, intermitentemente, pero el agua no ha dejado de estar presente en este inicio de carrera. Con el asfalto mojado, los nervios han vuelto a estar a flor de piel en el pelotón, y esto ha ocasionado caídas que han afectado a hombres como Wilco Kelderman (Belkin), Michele Scarponi (Astana), o el mismo líder, Michael Matthews, aunque ninguno de ellos ha tenido mayores problemas para continuar.
La fuga, que sirvió para que Tjallingi confirmara su liderato en la clasificación de la montaña, tuvo su fin a siete kilómetros de meta, mientras los equipos de los favoritos a la general copaban los primeros puestos para evitar sustos con un viento que apenas apareció, y estar bien posicionados a la entrada de Dublín.
Ya en las calles de la capital irlandesa, los hombres de Cannondale y Giant – Shimano formaban sus trenes para tener lo mejor situado posible a sus bazas para la llegada. Finalmente los Cannondale ganaban esta primera batalla y colocaban a Viviani en una inmejorable posición para el sprint, dejando entre él y Kittel a varios corredores. Dos de ellos eran la pareja de Sky formada por Boasson Hagen y Swift. El noruego hizo un extraordinario trabajo como lanzador y todo parecía indicar que Swift se llevaría la victoria, pero desde atrás llegó un misil rosso, que prácticamente sobre la línea de llegada sobrepasaba al británico, y de esta forma se apunta una victoria de tremendo mérito.
OTRA ETAPA DE TRÁMITE; Y MIENTRAS A ESPERAR. VITTEL SIGUE SIENDO EL REY DE LA VELOCIDAD.
No ha acontecido apenas nada en esta etapa, la tercera, que llevó a los ciclistas del norte de Irlanda a la parte sur de la isla, en la ciudad de Dublín. Los hombres rápidos han hecho valer su ley. Se dudaba de otra victoria por parte del germano Marcel Kittel, como así ha sido, a pesar del ahínco desplegado por el británico Ben Swift y el italiano Elia Viviani en la misma meta. Ha aparecido la lluvia al principio y al final ha lucido un tiempo más estable, presenciada por multitud de aficionados. El ciclismo tiene adeptos en aquellos confines un tanto bucólicos que enaltecen aquel territorio con cariz turístico. El australiano Michael Matthews no tuvo problemas para defender su cetro como líder.