El ciclismo es un deporte en el que los hermanos acostumbran a ir de la mano. Es el caso de los Schleck, los Sagan, los Quintana, los Herrada, los Izagirre, los Iglinskiy, los Van Poppel o los Vanendert, siete parejas de hermanos a las que durante la temporada 2014 se les unirán los gemelos Simon y Adam Yates (Bury, 1992) tras tomar la decisión de empezar su carrera profesional en Orica – GreenEdge.

Pero por más que pueda parecer, los Yates no siempre han ido de la mano. Su historia es la de tantos otros jóvenes británicos que se inician en la pista y a los que British Cycling intentó reclutar para su programa de formación de jóvenes talentos. Fue el camino que tomó Simon pero no Adam, quien puso rumbo a Francia, a Troyes, para formarse en la ruta. Dos opciones diferentes para dos ciclistas sumamente parecidos, ya que como bien explica el seleccionador británico Sub23 Yeith Lambert ambos son “buenos rematadores en carreras de cotas”, algo que unido a la compenetración demostrada durante su periodo de formación les ha permitido dominar a su antojo muchas de las carreras en que han tomado parte.

Podría decirse que Adam ha vivido a la sombra de su hermano Simon, ya que adolece de un punch final que sí tiene su hermano, aunque tras la segunda posición conseguida en el Tour del Porvenir 2013 ha dejado claro que su formación, centrada en la ruta en el equipo CC Etupes near Belfort, también ha acabado dando sus frutos. Porque hasta ese momento parecía que Simon iba por delante, especialmente tras su victoria en Fossano en el Tour del Porvenir 2011 doblegando a dos hombres hoy asentados en el WorldTour como Romain Bardet y Rohan Dennis.

Desde entonces, siguiendo el asesoramiento de British Cycling, su empeño ha ido dirigido a crecer más que a ganar y en 2013 se pudo constatar su progresión cuando, tras ganar el oro en la carrera de puntuación de los Mundiales de Minsk, fue uno de los grandes protagonistas en el panorama Sub23. Su nombre era ya conocido, pero su explosión llegó en el Tour del Porvenir con un doble triunfo de etapa eclipsado por la general de su hermano. Ambos fueron dos de los nombres propios de la carrera.

photo: James Startt / Agence Zoom Tour de l’Avenir

photo: James Startt / Agence Zoom Tour de l’Avenir

Los Yates volvían a estar en tablas, pero en eso que ambos fueron citados por la selección británica. Y Simon se presentó en sociedad con una victoria parcial en el Tour of Britain por delante de grandes nombres del pelotón como Nairo Quintana o Bradley Wiggins y el tercer puesto en la clasificación general. Era el momento de los Mundiales de la Toscana y ambos se presentaban como grandes candidatos a la victoria, aunque en aquella ocasión el triunfo recayó en Matej Mohoric.

Por aquel entonces la decisión estaba tomada. Los gemelos Yates querían correr juntos, y no querían hacerlo sometidos a la férrea jerarquía del Team Sky, así que decidieron poner rumbo a Australia asestando un doble bofetón a David Brailsford, como director técnico de British Cycling y como manager general del Team Sky, que veía cómo dos de sus grandes promesas ponían rumbo a las antípodas. Allí Shayne Bannan, manager general de Orica – GreenEdge, les ha recibido con los brazos abiertos indicando que “son dos hombres que encajan en la nueva área que queremos cubrir”, y es que con la incorporación de los británicos, los aussies se hacen con dos diamantes en bruto de cara a su objetivo de abrirse camino en la lucha por las generales de las vueltas por etapas.