1. Un líder sólido… Las demostraciones ofrecidas durante toda la temporada tuvieron su proyección en la primera etapa de montaña. El final en alto de Ax 3 Domaines fue el escenario de la victoria y el acceso al liderato en una jornada que evidenció estar un punto por delante de sus rivales. En la siguiente jornada, le tocó defender su liderato en primera persona saliendo victorioso de una difícil situación. El Tour tiene, de momento, un líder sólido. ¿Definitivo?

2. …sin un sólido equipo. Pese a la superioridad de Richie Porte y Chris Froome en Ax 3 Domaines, la situación de carrera vista en la ascensión a Paihères denotaba que el equipo no tenía la solidez de otras pruebas. Los dos líderes junto a Peter Kennaugh coronaron en el grupo de cabeza. Desenlace distinto en la etapa reina de los Pirineos. El ataque de Alejandro Valverde dejó a Froome aislado, sin compañeros, con más de 120 kilómetros por delante. Richie Porte se dejó en meta todas sus opciones mientras que Vasii Kiriyenka llegó fuera de control. A ello se suman los problemas físicos de Geraint Thomas y que corredores como Dávid López o Ian Stannard no están al nivel que acostumbran. El equipo, quien diría, es el punto débil de Froome.

3. Una gran táctica a la que faltó rematar. Prometía la etapa de Bagnères de Bigorre y no defraudó. La ofensiva lanzada por Movistar Team dejó solo a Chris Froome eliminando de la lucha de la general a Richie Porte. Poco más. La nula colaboración entre el equipo telefónico, Team Saxo-Tinkoff y Belkin Pro Cycling dejó escapar una situación perfecta para atacar a un líder sin compañeros. El amarillo salió victorioso de una jornada muy difícil. Dan Martin y Jakob Fuglsang aprovecharon el marcaje de los favoritos para tomar ventaja y decidirse la victoria donde el irlandés consiguió un nuevo triunfo a una excelsa temporada.

© Presse Sports

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4. Nueve etapas, nueve ganadores distintos. Desde la victoria de Marcel Kittel hasta el triunfo de Daniel Martin la edición del centenario del Tour de Francia no conoce a un doble ganador de etapa. Una situación que no sucedía desde 2002 cuando en esa ocasión los primeros catorce días de competición vieron ganador distinto hasta que en la decimoquinta repitió Santi Botero. El presumible sprint de Saint-Malo el martes puede acabar con la tendencia de esta edición.

5. La culminación de un proyecto. Triunfo de Simon Gerrans en Calvi, victoria en la contrarreloj por equipos de Niza y cinco días de líderes gracias al propio Gerrans y a Daryl Impey -primer africano de la historia de la carrera en vestirse de amarillo- sellaron la culminación del proyecto de Orica-GreenEDGE iniciado en 2012. Hasta entonces sin victorias en Le Grande Boucle, el equipo aussie cierra un ciclo, un modelo de gestión que cambiará en la próxima temporada. Después de formar un equipo con el objetivo de las carreras de un día y victorias parciales, la busca de generales será su siguiente paso.

6. Excesivas diferencias en el primer día de montaña. El primer final en alto de una Gran Vuelta suele acostumbrar a ser un día de tanteo. No fue así en Ax 3 Domaines. El fuerte ritmo impuesto por Richie Porte tuvo su prolongación en el ataque de Froome. Detrás, la inmensa mayoría de los favoritos hacían aguas. Al mal día de Contador (+1´45”) se sumó el de Joaquim Rodríguez (+2´06”). No fueron los únicos, otros muchos perdieron el primer día todas sus opciones. Sorprendente del caso de BMC con Cadel Evans (+4´13”) y Tejay Van Garderen (+12´15”) o el de Thibaut Pinot (+6´00”).

7. Gregarios y segundos espadas, el plan “b”. Cada día gozan de más protagonismo. Las dos primeras etapas de montaña han dejado claro que jugarán un papel fundamental para el desenlace de la carrera. La debilidad de Sky Procycling aumenta esta condición. Nairo Quintana, Rui Costa, Roman Kreuziger, Laurens Ten Dam o Dani Moreno serán la proyección de sus líderes en las jornadas decisivas.

© A.S.O. / B.Bade

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8. Cavendish, Greipel y Kittel, un duelo de altura. Después de nueve etapas, el duelo está empatado. Una victoria para cada uno. Los tres grandes sprinters del momento no han logrado imponerse el uno a los otros. Comenzó golpeando Marcel Kittel en la primera etapa después del pinchazo de André Greipel y el corte producido por una caída de Mark Cavendish. El campeón británico se impuso en Marsella después de un gran trabajo del Omega Pharma-Quick Step pero en Montpeiller André Greipel y su Lotto-Belisol lograron imponerse con claridad.

9. Peter Sagan, apunta a su segundo vert. A pesar de no encontrarse a su máximo nivel -Simon Gerrans le ganó en un final muy favorable para sus intereses- la regularidad ha sido la clave para dominar la clasificación de los puntos. Pese a perderse el primer sprint en Bastia por culpa de una caída, aventaja en 93 puntos al segundo clasificado, André Greipel. Apoyado por un equipo dispuesto para sus intereses -mención especial a la etapa de Albi que acabó con su primera victoria- camina a conquistar su segundo vert consecutivo.

© ASO/G.Demouveaux

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10. Las caídas pierden protagonismo en la primera semana. Acostumbradas a truncar la carrera de varios corredores en las primeras etapas, las tan temidas montoneras no han gozado del protagonismo de ediciones anteriores. Jurgen Van den Broeck, Christian Vande Velde, Janez Brajkovic y Maxime Bouet han sido dos de los corredores más notables que tuvieron que poner punto final a su participación.