Una etapa y un final abierto. Difícil hacer un pronóstico antes del comienzo. El perfil ondulado en su eje central encabezado por el encadenado formado por el Col de la Serra y el Col de Vizzavona y la situación de la dura Côte du Salario (1km al 8,9%) a tan solo 12 kilómetros de etapa, dejaban un día imprevisible.

Así fue. De comienzo, una vez paso por el kilómetro 0 cuatro corredores se lanzaron al ataque. Lars Boom (Belkin Pro Cycling), Blel Kadri (Ag2r-La Mondiale), David Veilleux (Europcar) y Rubén Pérez (Euskaltel-Euskadi) formaron la fuga del día. En una posición intercalada, Julien Simon (Sojasun) luchó por entrar en el corte. Sin éxito, su equipo protagonizó un pulso a la fuga recordando la situación de la pasada edición con Nikki Sorensen y Saxo Bank-Tinkoff Bank pero los franceses ni con el potencial deportivo ni con la influencia de los daneses en el pelotón consiguieron meter a su corredor en la escapada.

Fruto de esta acción y la situación del sprint intermedio el cuarteto nunca obtuvo una renta superior a los tres minutos y medio. Boom coronó en cabeza Bellagranajo con menos de un minuto sobre el pelotón. Tras un rápido descenso, la ascensión al Col de la Serra cambió el signo de la etapa. La entrada en cabeza del pelotón de la FDJ.fr significó el principio del fin para los sprinters. Los franceses avivaron el ritmo de carrera en un intento de descolgar a los corredores más rápidos buscando más opciones para su velocista, Nacer Bouhanni. Marc Madiot, como otras tantas ocasiones, sorprendió confirmando que el movimiento buscaba salvaguardar las opciones de su líder, Thibaut Pinot. Mark Cavendish (Omega Pharma-Quick Step), André Greipel (Lotto-Belisol), Alexander Kristoff (Katusha), Matthew Goss (Orica-GreenEDGE) o el líder Marcel Kittel (Argos-Shimano) cedían sus opciones.

La cercanía del grupo hizo que Blel Kadri y David Veilleux atacasen en la fuga pasando en este orden por la cima del Col de la Serra. Lo hacían distanciados, con Kadri en cabeza. Esta situación provocó un movimiento extraño. Thomas Voeckler (Europcar) atacó en el pelotón buscando a su compañero de equipo pero después de rodar un kilómetro por delante del grupo fue neutralizado. Mismos derroteros en la ascensión a Vizzavona. Kadri, en cabeza, fue neutralizado a un kilómetro de la cima por Pierre Rolland (Europcar) que lograba pasar por el alto en cabeza pasando a encabezar la general de la montaña. Segundo, a escasos veinte segundos, coronaba Kadri con Brice Feillu (Sojasun) que intentó tarde seguir la estela de Rolland. El pelotón transitaba a poco más de medio minuto mientras que el grupo del maillot amarillo cedía más de cuatro minutos.

Coronado Vizzavona terreno favorable camino de la Côte du Salario. BMC y Cannondale, después de neutralizar a Rolland, marcaron el ritmo del pelotón en su intento de que los sprinters no lograsen conectar con la cabeza de carrera. El grupo circuló sin contratiempo hasta la llegada de la cota en las calles de Ajaccio. Poco tardaron en llegar los ataques. Juan Antonio Flecha (Vacansoaleil-DCM) y Cyril Gautier (Europcar) echaron un pulso que tan solo el francés pudo ganar al coronar en cabeza. Detrás de él pasaba Chris Froome (Sky Pro Cycling) que sorprendentemente atacó en la parte final encabezando la persecución con unos metros de ventaja. Finalizado el descenso la carrera se compactó.

Diez kilómetros favorables por recorrer en una situación de carrera descontrolada. Un ataque de Michal Kwiatkoswki (Omega Pharma-Quick Step) dio paso al movimiento definitivo. Su compañero de equipo Sylvain Chavanel saltaba del pelotón llevándose consigo a Jakob Fuglsang (Astana), Gorka Izagirre (Euskaltel-Euskadi), Jan Bakelants (RadioShack-Leopard), Manuele Mori (Lampre-Merida) y un Flecha que se recuperaba del ataque anterior. El sexteto aprovechó la falta de efectivos del Cannondale para tomar una ligera ventaja a falta de cinco kilómetros.

El buen entendimiento de la cabeza se impuso al pelotón ganando opciones de victoria. A falta de un kilómetro Bakelants aprovechó esta situación. Esquivó dar un relevo para protagonizar el ataque del triunfo. Favorecido por un ligero tramo de descenso en los últimos seiscientos metros, el belga entró el solitario en meta con un segundo de ventaja sobre el pelotón encabezado por Peter Sagan (Cannondale) y Michal Kwiatkowski. Un segundo que sirve, además, para vestirse de amarillo. Una diferencia que se extiende a todos los favoritos salvo a Rein Taarame (Cofidis) y Thomas De Gendt (Vacansoleil-DCM) que perdieron en meta todas sus opciones de realizar una destacada clasificación general.

Bakelants celebra el triunfo en Ajaccio. / Foto (c) le Tour

Bakelants celebra el triunfo en Ajaccio. / Foto (c) le Tour

Mañana tercera etapa entre Ajaccio y Calvi sobre 145,5 kilómetros con el Col de Marsolino (3,3km al 8,1%) a 13,5 kilómetros de meta. Un final muy parecido a la jornada de hoy que vivirá la emoción y el descontrol a un cierre de etapa donde los sprinters volverán a sufrir por permanecer en el pelotón.