Vaya por delante que cuando se escribe sobre doping hay que ir con sumo cuidado para no caer en contradicciones o incluso en la demagogia. Especialmente, si sucede como en la mayoría de casos, dónde no se dispone de gran parte de la información necesaria para hacerlo con propiedad. Lo cierto es que hoy en día, como tan bien explicaba el compañero Eugenio González con el ejemplo del Sky, ganar le supone a quién lo consigue un problema de credibilidad. Sobre todo ganar mucho.
En el caso del Europcar se puede decir algo parecido. Desde su magnífico Tour 2011, y en especial desde la etapa de l’Alpe d’Huez, dónde todo el equipo rindió a un nivel sobresaliente, el equipo de Jean-René Bernaudeau ha sido tratado en los mentideros ciclistas de sospechoso para arriba. Sin embargo, algunos episodios de difícil explicación en estas dos últimas temporadas han logrado, como mínimo, que esas teoría cogieran algo de fundamentos. Y es ahí dónde encuentra la razón de ser este artículo.
Los hechos irrefutables son los siguientes. A principios de mayo de 2012, Anthony Charteau es obligado por la Federación Francesa de Ciclismo a abandonar los Cuatro Días de Dunkerque por sus niveles excesivamente bajos de cortisol. Este año, antes de la última etapa del Dauphiné, a Pierre Rolland también le encuentran insuficiencia de cortisol, lo que teóricamente debiera impedirle tomar la salida. Pero Rolland sale y abandona a los 20 kilómetros. El médico del equipo sale diciendo que su corredor tuvo que tomar cortisona por razones médicas. A la semana siguiente, el Movimiento por un Ciclimo Creíble, club del que Europcar era miembro fundador, suspende al equipo y echa de su directiva a Bernaudeau, que era uno de los referentes del “lobby”. Pierre Rolland tomó la salida del Tour en Córcega y ahora mismo viste el maillot a puntos rojos de líder de la montaña.
The Inner Ring explica bastante bien el caso aquí. También los temas médicos. El cortisol es la hormona natural que produce el cuerpo ante los choques que sufre el organismo, produciendo adrenalina y actuando contra el estrés. La cortisona es una sustancia médica que tiene un efecto anti-inflamatorio y conlleva un aporte de energía al cuerpo. Su consumo provoca la disminución de los niveles naturales de cortisol. Su abuso puede provocar la destrucción del tejido muscular.
A todos los hechos recapitulados hay que sumarles otros indicios que pueden redundar en la sospecha. Durante la semana previa al último Tour, salieron informaciones que la policía investigaba al equipo por abuso de cortisona. El caso se cerró sin nada punible.
Aquellas informaciones coincidieron en el tiempo con los problemas de rodilla de Thomas Voeckler, que pasó de hacer una temporada primaveral fantástica a no poder acabar carreras en junio y estar casi descartado para el Tour. Es un hecho que la cortisona sirve para tratar inflamaciones de rodilla. También lo es que Titi se recuperó de su lesión en carrera para hacer una segunda parte de Tour antológica.
Un año antes, Christophe Kern tuvo problemas también en sus rodillas. Kern, un ciclista correcto de trayectoria algo anónima en el pelotón francés, se destapó en el Dauphiné 2011 con una exhibición en Les Gets para triunfo de etapa y un excelente sexto puesto en la general. Ya metido en los primeros días del Tour, dónde todo el mundo le apuntaba como uno de las más que posibles sorpresas y tras haber sumado por el camino el campeonato nacional de contrarreloj a su palmarés, aparecieron los dolores en la rodilla. En el caso de Kern, no los pudo superar y le llevaron a abandonar la carrera al cuarto día.
A partir de aquí, cada uno que saque sus propias conclusiones. ¿Hay algo más detrás del modelo Europcar? Es cierto que tanto Rolland, como Kern y sobretodo Voeckler son ciclistas que suelen abusar bastante de desarrollo, algo que puede conllevar problemas de rodilla. Esos problemas pueden tratarse con cortisona. Sin embargo, todos estos casos juntos parecen algo más que una serie de contingencias provocadas por cargar en exceso el plato grande. O no.
Monográfico Europcar. El resto de las piezas
Sobretodo es separado. Fundamiento también canta. Por lo demás, buen monográfico os estáis marcando. Felicidades.
Catalanadas que se le cuelan a uno. Gracias!
Sin pasarme de listo, tiene toda la pinta que al llegar la Dauphine y el tour se ponen a tope de cortisona. Lo peor de todo es que todo el mundo lo sabe, ahi estan sus niveles de cortisol y su excusa de las rodillas es de las menos creibles entre una sarta de mentiras que se pueden inventar sobre estos temas. Abuso de desarrollo, vamos hombre…
Para sólo ponerse a tope en Dauphiné y Tour, andan mucho en las clásicas de primavera, no?!
Tu opinión es muy razonable Javier, y seguramente la más certera dadas las circunstancias. Pero en el artículo se ha intentado sólo presentar una serie de hechos y, en la medida de lo posible, evitar hacer un juicio sobre culpabilidad o inocencia, pues para ello creo que falta información.