Ni Cavendish, ni Sagan, ni Greipel ni Boonen, Alexandre Vinokourov ha sido el que ha conseguido el oro en los Juegos Olímpicos después de una gran actuación durante toda la prueba superando a un Rigoberto Urán que ha pecado de principiante en el sprint final. El kazajo consigue su victoria más importante en este deporte y la que puede ser la última, pues ha hecho ver recientemente sus intenciones de colgar la bicicleta al acabar la temporada. La gran decepción de la jornada ha sido la selección británica, de la cual se esperaba un dominio absoluto de toda la prueba que llevara en volandas a Cavendish hacia la victoria pero para nada ha sido así. El británico ha perdido hoy la oportunidad de su vida para conseguir ser campeón olímpico.
En lo que a la selección española respecta, no se le puede recriminar nada en términos de estrategia pues han estado correctos metiéndose en todos los cortes y estando atentos a todos los movimientos de las selecciones favoritas. Además, hemos podido descubrir las maneras de un Jonathan Castroviejo que ha hecho un Mundial brillante, primero metiéndose en la fuga para posteriormente dar vida al grupo de escapados que se formó en el final de carrera. Donde sí han estado mal es en el desenlace final al no ponerse de acuerdo Luisle y Valverde acerca de quién debía trabajar para quién, perdiendo así todas las opciones de medalla. Pero pese a todo, la actuación ha sido aceptable, principalmente porque gracias a su actuación han conseguido romper el sprint.
En lo que a la carrera se refiere, la fuga del día se formó pronto con ciclistas de la talla de Westra, Menchov, Kristoff, Pinotti, Roelandts, el ya mencionado Castroviejo, O’Grady o Brajkovic, los cuales llegaron a tener más de cinco minutos de ventaja con respecto a un pelotón del que siempre tiraba Gran Bretaña. Durante los kilometros de transición antes de comenzar el circuito pudimos ver a Kiryienka trabajando para Gran Bretaña sin motivo aparente, lo cual hizo acrecentar los rumores que le colocan en Sky para la temporada. En el kilometro 60 hubo una caída en medio del grupo en la que el principal afectado fue Fran Ventoso, de la selección española, que si bien pudo entrar fácilmente en el pelotón, ya quedó descartado para poder hacer algo debido a las consecuencias de dicha caída.
El primer ataque fue el de Michael Rogers, en un movimiento algo incomprensible pues se marchó del grupo pese a tener a su compañero O’Grady por delante. Posteriormente, algunos de los gallos de la carrera probaron sus opciones. Gente como Gilbert, Nibali, Van Avermaet o Gesink se lanzaron al ataque en persecución de los ciclistas ya fugados e intentando romper la hegemonía británica en el pelotón, aunque sin demasiado éxito. Tuvo que ser un ataque de un grupo más numeroso el que consiguiera fructuar. Entre los integrantes, además de Gilbert, Nibali y Van Avermaet que ya lo habían probado con anterioridad, había gente de la talla de Grivko, Chavanel, Boom o Paolini, a los que posteriormente se unieron otros ciclistas que saltaron más tarde como Van Garderen o Nordhaug.
A falta de 75 kilometros para la línea de meta se unieron los dos grupos que estaban escapados, lo cual representó una amenaza todavía mayor para la selección británica la cual aumentó todavía más cuando se marcharon del pelotón ciclistas como Kolobnev o Rui Costa. Mientras por delante Gilbert se marchaba en solitario rodando en cabeza durante algunos kilómetros, por detrás seguía marchándose gente del pelotón sabedores de las amplias opciones de victoria que había en la fuga. Entre ellos había gente de la talla de Luisle y Valverde por parte de España, Urán, Vinokourov, Cancellara o Gallopin. La aventura de Gilbert no fue demasiado lejos y este último grupo de ciclistas que saltó del pelotón se juntó al grupo que estaba en cabeza anteriormente, siendo los kilómetros restantes un mano a mano entre los fugados y la selección británica junto a un ridículo Eisel, que dio más importancia a su compañero Cavendish que a defender los colores de su país.
Gracias al trabajo de un espléndido Castroviejo junto al de los integrantes de la selección suiza en los kilómetros de aproximación a meta se consiguió mantener la ventaja con respecto al pelotón en torno al minuto. A falta de 10 kilómetros para meta, Cancellara trazó mal una curva y se fue al suelo haciéndose mucho daño y perdiendo no solamente las opciones de victoria hoy sino también las opciones de medalla en la contrarreloj. A falta de 8 kilómetros para meta, Urán atacó y Vinokourov se fue a su rueda. Nadie más quiso seguir ese movimiento que acabaría siendo el bueno para la victoria, entre ellos la selección española que, quizás por la ausencia de pinganillos cometió un error de bulto.
Así pues, Vinokourov y Urán se disputaron el sprint donde el kazajo, aprovechando un despiste del colombiano se lanzó a por la victoria en los últimos 300 metros consiguiendo una ventaja inalcanzable para Rigo. Oro para Vinokourov (Kazajstán), plata para Urán (Colombia), bronce para un sorprendente Kristoff (Noruega) y decepción absoluta para los británicos en su casa, que no pudieron hacer valer los pronósticos de claro favorito de su líder Cavendish, que ha perdido una ocasión de oro para conseguir el triunfo en los Juegos, ante su casa y en un recorrido hecho para él.
Clasificación:
1 VINOKOUROV Alexandre 5:45:57
2 URAN Rigoberto 5:45:57
3 KRISTOFF Alexander 5:46:05
4 PHINNEY Taylor 5:46:05
5 LAGUTIN Sergey 5:46:05
6 O’GRADY Stuart 5:46:05
7 ROELANDTS Jurgen 5:46:05
8 RAST Gregory 5:46:05
9 PAOLINI Luca 5:46:05
10 BAUER Jack 5:46:05
Vino ha demostrado que los recorridos se hacen para los valientes y para los listos.
Vinokourov, un vencedor con oportunismo.-
El kazajo Axenndre Vinokourov (38 años), un auténtico forjador de kilómetros, se llevó un título con todo merecimiento. Es un batallador nato y siempre ha sido muy considerado en el ámbito ciclista. Este premio en la competición de carretera para corredores profesionales en los juegos Olímpicos de Londres, viene a compensar a su prolongada trayectoria deportiva con no pocos éxitos. Recordamos, por ejemplo, la Vuelta a España del año 2006, al imponerse en la clasificación absoluta a Alejandro Valverde. Además, nunca está de más mencionar sus tres victorias de etapa: en Lugo, en el Alto de La cobertoira y en Rivas Vaciamadrid. Vinokourov ha necesitado tener una constancia en el esfuerzo, una voluntad de hierro y una afición innata a lo que es pedalear.