El Tour es la única carrera que permite disfrutar de sus mejores días de inicio a fin. Etapas como la de hoy, un sube y baja perpetuo con toque de corneta desde el kilómetro 0 y batalla sin parar hasta la meta, son perfectas para un domingo de sofá y disfrute para el espectador, de dolor en la bicicleta para los ciclistas. Un gran domingo que nos recuerda porqué el Tour es el espectáculo deportivo del verano. Una jornada idónea para que el gran público descubriese a Thibaut Pinot, entre arenga y arenga de su director Marc Madiot, como nuevo ojito derecho del ciclismo francés. Y este es una cosa seria.
El dato
Thibaut Pinot es el ciclista más joven de este Tour, unos meses más joven que el segundo, Peter Sagan. Entre ambos se han llevado la mitad de las etapas hasta ahora disputadas. En el calendario de Pinot no estaba previsto debutar todavía en la Grande Boucle, pero convencido como estaba de su gran estado de forma tras brillar en las montañas de la Vuelta a Suiza, logró conseguir que Madiot le incluyese en el equipo aprovechando el descarte de quién debía ser el mejor escalador del equipo, Arnold Jeannesson. Tan descarado como talentoso, la rebeldía de Pinot no se quedó ahí, y “como veía ciclistas por todas partes”, se fue por delante pese a que la táctica del día indicaba que debía aguantar en el grupo de los favoritos.
La fuga
¿La hubo? ¿Y quién la formaba? ¿Un ciclista en solitario o un pelotoncillo de 20 corredores? ¿Nos quedamos con los primeros 40 kilómetros casi en solitario de Jens Voigt o con los siguientes 20 de Jérémy Roy? Como comentaba @koendekort, hoy 150 ciclistas querían aparecer en este apartado, pero quizá el premio deba ser para la heroica apuesta de Fredrik Kessiakoff. El sueco intentó una hazaña, 60 kilómetros en solitario a través de puertos y más puertos, pero se topó con el muro del Col de la Croix y con un Pinot extraordinario. Al final, premio de consolación gracias al liderato de la montaña y para celebrarlo, su segundo twit, medio año después del primero.
La imagen
Sí, etapas como la de hoy son un plan dominguero perfecto para gozar desde el sofá de casa, pero es mucho mejor disfrutarlas sobre el terreno. Y es que el ambiente del Tour no tiene igual, como muestra esta foto del último puerto del día que nos trae Tim de Waele (@TDWsport).
El tweet
¿Orden marcial o libertinaje? Ya comentábamos ayer el contraste entre Sky y RadioShack. Pues hoy los segundos se rebotaron y usurparon el liderato por equipos. Como dice @DavidMcleanCycl, tendremos que estar un tiempo sin reírnos de ellos.
Bueno, ahora nos podremos reír de sus cascos amarillos a lo Bob the Builder.
Un gran domingo para el ciclismo francés. Contaba el Tarangu después de una victoria con tan escaso margen que durante unos minutos no se sabía muy bien quien iba a ser el vencedor, si el asturiano o Tinho “el hombre de hierro” que un periodista español pensando que el ganador final iba a ser el portugués gritaba alborozado cerca de la meta “hemos ganado! hemos ganado!”…. pues eso. Si el domingo te pareció un gran día de ciclismo, teniendo en cuenta todo lo que pasó, lo único que me consuela es saber que hasta hoy has debido pasar muchos domingos (y aún te quedan algunos) en los que no disfrustastes tanto. Como dijo Fuente, “la verdad es que no sé si este periodista es nacido en España o a mi me considera chino”. Los periodistas de ciclismo, y muchos “aficionados” de este país. merecéis lo que va a pasar, no creo que sean grandes domingos lo que se os viene encima, mas bien “lunes al Sol” . Casi hasta me alegro.
Todos tenemos nuestras preferencias, por nacionalidad, proximidad, o simplemente querencia de cualquier tipo hacia un corredor, y me parece tan válido un motivo como otro para apoyar a un ciclista. Y los hay que, más allá de que podamos tener preferencias, intentamos disfrutar del espectáculo que se nos ofrece por encima de todo.
La caída de Samu me apenó mucho, porque era un ciclista con mucho que decir en este Tour, especialmente en las etapas pirenaicas, pero no empañó una etapa que fue muy bonita y que pudimos disfrutar de principio a fin.
Yo me sigo preguntando por qué las banderas en el ciclismo… y en casi cualquier deporte. La jornada de ayer fue triste, y todos nos quedamos fríos con lo de Valverde y Samu -no tienes que leer nuestros perfiles en Twitter-, pero eso no quita para que no nos alegremos por la victoria de un corredor que, en este caso, a Jordi le gusta desde hace mucho. ¡¡Faltaría más!!
Tras ver el triunfo de Pinot, ver los de Sagan y ver que vuelve a resurgir esa eterna sensación del posible nuevo campeón francés me entra la preocupación, no me entró ahora claro, ya la tenía, pero este Tour la está corroborando, tenemos en España grandes ciclistas, estrellas, pero todos ya con su edad, detrás no parece que tengamos un relevo claro.
Quizá en cuatro o cinco años estemos nosotros agarrándonos a cualquier Pinot que surga.