La temporada 2010 ha finalizado y para el BBox Bouygues Telecom será un punto de inflexión muy importante, ya que las cosas a partir de ahora se pondrán más complicadas todavía para la estructura del veterano director Jean-René Bernaudeau. En cualquier caso, y pese a la presión que había en el equipo ante la falta de patrocinadores para el 2011, el equipo supo hacer una buena temporada, estando a la altura de las expectativas y apoyándose especialmente en la pieza clave del equipo, Thomas Voeckler.

Sus opciones en la temporada pasaban por hacer un buen Tour de Francia. Al igual que el resto de equipos franceses, en las clásicas de primavera y en las pruebas de pavé, poco podían hacer ya que no contaban con ningún especialista en este tipo de pruebas. Sus objetivos en primavera se basaban en las vueltas de corta duración, como el caso del Criterium Internacional que ganó Pierrick Fedrigo. Cyril Gautier se llevó la Route Adelie de Vitré y Franck Bouyer el Tour de Bretagne, pero poco más. La estrella del equipo firmaba un buen papel en la Liège-Bastogne-Liège consiguiendo un meritorio 10º puesto.

foto: reuters.com

En el Giro de Italia, el equipo era sabedor de que no podían optar a nada más allá de dejarse ver en alguna fuga. El resultado fue redondo puesto que Johann Tschopp ganó una de las etapas más importantes de la prueba italiana, la que acabó en Passo Tonale. En esta etapa se “criticó” algo la actitud del suizo ya que no dejó pasar primero a Giberto Simoni por la cima del Gavia, impidiéndole hacerse con la Cima Coppi, lo que hubiera supuesto un excelente colofón a la carrera de Gibo. El resto del Giro fue bastante discreto por parte del equipo francés.

La próxima parada sería el Tour de Francia. Un Tour que sería espectacular y casi perfecto para la escuadra gala. Los elegidos venían en muy buena forma. Vogondy había terminado 6º la Dauphiné Liberé, Rolland fue 8º y en esta prueba había destacado también Cyril Gautier y Voeckler con el maillot de campeón de Francia se llevaría la etapa con final en Bagnères de Luchon, dejando muestras del espectáculo del que siempre hace gala el corredor francés durante la escapada coronando el Port de Balès con el plato grande y en la celebración final. También ganaría Fédrigo la etapa con final en Pau por delante de Rubén Plaza y de Sandy Casar el día en el que Carlos Barredo saboreó la victoria pero le fue arrebatada en el último kilómetro.

Además el equipo consiguió el maillot de la montaña logrado por el sorprendente Anthony Charteau. El ex-Caisse D’Epargne nunca había sido un corredor que entrara en las quinielas para conseguir este premio y nunca había sido un corredor tan combativo, cualidad que se requiere para poder pelear por este maillot. Sus grandes rivales durante toda la prueba fueron Christophe Moreau y Jerome Pineau, aunque nunca estuvieron cerca de poder quitárselo. Este último desistía de conseguirlo en la última semana. Así pues, un premio inesperado para el Bouygues.

El resto del año no sería muy bueno para el equipo francés. En la Vuelta a España el equipo no se dejaría ver prácticamente nada. Ningún corredor del Bouygues tuvo una buena actuación, todos ellos discretos. La única alegría de esta parte final del calendario sería la espectacular victoria de, como no, Thomas Voeckler en el GP de Quebec con una celebración muy suya al pasar por línea de meta.

foto: velonews.com

El equipo estaba centrado en conseguir un patrocinador, y como ya pudimos ver en el artículo de “La lealtad de Thomas Voeckler“, finalmente Europcar será el patrocinador del equipo, aunque lo tendrán muy complicado para recibir invitaciones para las grandes citas con el nuevo sistema. Además, se han ido hombres muy importantes: Vogondy se ha ido a Cofidis; también se ha ido Fédrigo junto con Chainel y Bonnet a FDJ y Tschopp a BMC Racing Team. Muy complicado será el año 2011 para el equipo de Bernaudeau.

Carlos Correa