El equipo.


Con sede americana y patrocinador suizo han dado un salto cualitativo importante este año. La plantilla, compuesta básicamente por corredores suizos y americanos, se ha reforzado de manera significativa sumando corredores de calidad contrastada como Alessandro Ballan, George Hincapie o Cadel Evans. La composición del conjunto parece óptima para brillar sobre la adoquinada primavera rodeando a los ya mencionados Ballan e Hincapie con ciclistas de la talla de Kroon o Burghardt. Con un bloque algo corto para el asalto a carreras de tres semanas el fichaje de un lobo solitario como Evans parece más que acertado para, cuanto menos, dejarse ver en los podios.

Puntas de lanza.

El bloque del equipo para las clásicas sobre el pave es esperanzador y cuenta con varios candidatos a tomar un papel importante. Ballan, un corredor capaz de brillar tanto en De Ronde como en Roubaix, tendrá apoyo de dos gregarios de lujo: Kroon y Burghardt – eterna promesa del conjunto Columbia (T-Mobile)-. Hincapie intentará su enésimo asalto al velódromo con la esperanza que, este año sí, le acompañe la suerte. Finalmente un Evans que compite en toda carrera en que participa no descarta el Tour – siempre que el equipo pueda participar.

La promesa.

Mauro Santambrogio. El equipo suizo-americano no cuenta con demasiada juventud en sus filas y, probablemente, la poca con la que cuenta no tendrán un papel destacado en el equipo. Quizás exista la remota posibilidad que el italiano providente de Lampre de un paso adelante y se convierta en un corredor interesante, al menos como ayuda, en las cotas ‘ardenesas’ y grandes vueltas.

A tener en cuenta.

El salto cualitativo del equipo en cuanto a plantilla ha sido muy grande y se tendrá que ver como se adaptan los nuevos corredores a un equipo con una estructura prácticamente nueva. Será importante ver si el hecho de contar con los dos últimos campeones del mundo será suficiente para conseguir plaza en el Tour.

Web del BMC Racing Team