Carlos Barredo (Oviedo, 1981) comenzó en Mallorca su segunda temporada en las filas de Rabobank tras permanecer cuatro años en el Quick Step. El asturiano es uno de los muchos españoles que han tenido que labrar su carrera fuera de nuestras fronteras y uno de los pocos ciclistas sin pelos en la lengua, no se esconde cuando se le pregunta por los males de ciclismo. Con la espina clavada tras quedarse sin sumar ningún triunfo en 2011, su objetivo pasa por ganar una clásica y una etapa de una gran vuelta, así como poder representar a España en los Juegos Olímpicos y en el Mundial.

Carlos, Mallorca ha sido tu primera carrera de este año, ¿tienes definidas las carreras del resto de año?

Bueno, tenemos definida la primera parte. Vamos definiendo según vaya transcurriendo la temporada. Este año para el Tour de Francia hay tres corredores fijos, luego hay otro grupo en el que estamos los que, si no pasa nada, también iremos. Ahora al principio de la temporada sé que tengo que estar bien en abril y la selección estará basada en esto, en toda la primera parte de la temporada. Sé dónde voy a correr hasta Lieja.

¿Qué rol vas a tener en el equipo? ¿Crees que vas perder libertad en carrera con la importancia creciente de Mollema y Kruijswijk?

No, no, no, para nada. Yo creo que va a haber oportunidades para todos y puede que sea al contrario. Al final correr con gente de esta calidad siempre te aporta muchas más cosas, ya que al tener un rol nuevo tienes que tratar de pasarle la profesión que tú puedas tener. Y muchas veces correr con gente así te da libertad también, porque bueno, hay ciertos marcajes que tú te puedes aprovechar de ello.

¿Te marcas algún objetivo para este año?

Pues sí, sí que hay alguno. El año pasado me quedé con la espina de no conseguir ninguna victoria. La rocé varias veces y creo que con las mejores sensaciones que tuve nunca hasta ahora de profesional, pero sin embargo no me salía nada. Espero que este año se pueda conseguir una clásica como hace dos años la Clásica de San Sebastián y, bueno, si puede ser una etapa en una gran vuelta pues también.

Como dices tus últimas victorias han sido en casa; en la etapa con final en los Lagos de Covadonga y la Clásica de San Sebastián de hace dos años. El año pasado, como has explicado antes, hiciste una gran carrera entrando segundo, pero aparte de ese podio, no se te ha visto delante en las clasificaciones, aunque hayas estado dando guerra durante las etapas. ¿Qué es lo que faltó?

Creo que cuando buscas con demasiada ansiedad una cosa nunca es bueno, y me pasó un poco eso. Ese año la temporada estuvo marcada por ir al Tour con una idea muy clara de ir a ayudar a Robert [Gesink]. Nos fuimos al suelo uno de los primeros días, creo que el cuarto, nos caímos unos cuantos y Robert quedó destrozado para todo el Tour y eso nos marcó un poco. Porque vas al Tour con la idea de intentar estar lo más cerca posible de él, no desperdiciar ni un gramo de fuerza para trabajar todos con un mismo objetivo, después cambia el rol y tienes que volver a lo que en teoría es lo que mejor se te da, que es buscarte la vida. Sin embargo, lo buscaba con tanta ansiedad que no me salía nada y un poco fue la tónica. Si que es verdad que en San Sebastián hice una buena carrera porque el Tour lo acabé muy bien. Y en la Vuelta me pasó lo mismo, la última semana tenía unas sensaciones increíbles pero no me salía nada.

Has tenido muy buenos resultados en San Sebastián. ¿Es tu carrera talismán? ¿A qué se debe tu “buena relación” con ella?

Es una carrera bonita, que coincide siempre después del Tour, y suelo acabar el Tour bien. Me sacrifico una semana más en casa, cuido la alimentación, entreno bien y después llego a San Sebastián y sé que rindo.

Celebrando la victoria en la Klasika de 2009

Pero tu última victoria fue la de Lagos de Covadonga en la Vuelta 2010. ¿Podrías explicar qué se siente al ganar en casa? ¿Qué se te pasa por la cabeza?

(risas) Yo creo que no se te pasa nada, se te pasa que llegue el final, nada más. Pasar la última raya. Para mí es un puerto especial los Lagos, gracias a los Lagos yo estoy andando en bici. Hice una apuesta con mi padre hace mucho tiempo, cuando empecé a andar en bici y fue en los Lagos. Por eso es un puerto especial, incluso antes de andar en bici yo veía ganar ahí a Marino Lejarreta, a Jalabert, a todos esos corredores. La verdad que cuando levantas los brazos allí arriba sientes algo especial, y más porque yo me crié muy cerca de esa zona y con muchísima gente conocida y, bueno, pues eso sí que sientes. Y ahora me siento contento y a gusto con esa victoria.

¿Otro de los objetivos de este año puede ser entrar en la selección para los Juegos y el Mundial?

Si, está claro que sí, para los dos. Hombre, sé que estos últimos años vengo siendo más o menos del grupo que hace el Mundial. En los Juegos de Pekín ya me quedé como reserva, como primer reserva y sí que me haría mucha ilusión poder ir a Londres. Sé que si voy a los Juegos voy a hacer mi papel, que va a ser trabajar para un líder, pero encantadísimo que se hace, porque aquí en España tenemos la suerte de contar con grandísimos corredores, pero también hace falta gente que trabaje para ellos, que se deja la piel y eso puede ser lo que a mí me beneficie para poder acudir a los Juegos.

¿Si tuvieras que elegir entre Juegos o Mundial?

Los dos (risas). Mira, te digo: clásicas, Tour, Juegos, Vuelta y Mundial, y entre medias ganar la Clásica de San Sebastián. Sería la temporada ideal.

¿Quizás mejor ir a los Juegos que son cada cuatro años?

Bueno, sí, pero yo creo que las dos, siempre que se vista la selección. Puede que parezca raro, pero yo siempre digo lo mismo: una carrera por selecciones es más sencilla que una antigua Copa del Mundo. Porque eliminas a muchos corredores que no tienen equipo. Si te paras a pensar fríamente, hay otro tipo de carreras a las que van todos, el nivel es mucho más alto. Yo la primera vez que fui con la selección fui directamente con la absoluta, sí que había estado en convocatorias con la júnior y con la sub-23, pero nunca había ido a un mundial. Es una carrera muy especial, pero después yo, a lo mejor es también la manera que tengo de motivarme, pero te paras a pensarlo y dices; si esto es más fácil que correr una carrera normal, por eso que te decía. Italia, ¿cuántos italianos eliminas? Sólo van 9, belgas, ¿cuántos van? Sólo van 9 , españoles pues también. Así se elimina a mucha gente.

¿Qué hace que los españoles sean tan apetitosos estos últimos años para los equipos extranjeros?

A lo mejor es que nos hacemos apetitosos nosotros, en el sentido de que no tenemos dónde correr en España, entonces lo aprovechan y nosotros también tratamos de abrirnos a ese mercado, puede ser esa la razón. En mi caso, cuando despareció el Liberty tuve la oportunidad de ir a QuickStep, no me lo pensé y es algo de lo que no me arrepiento, ya que para mí fue un cambio muy bueno en mi carrera deportiva. Descubres otras formas de pensar, aprender otros idiomas… Estoy muy contento de haberme marchado fuera.

¿Se echa de menos a Freire en el equipo?

Sí, sí que se echa de menos, sí.

¿Cómo ves la situación del ciclismo español? Porque en profesionales España está en la élite mundial, ¿pero se están haciendo bien las cosas en las categorías inferiores para mantener esa buena situación?

Yo creo que es un problema que no solo pasa en el ciclismo, pasa en muchos deportes ahora mismo. A mí me gusta mucho el deporte de base, el ciclismo de base. Me atrae y en Asturias tratamos de colaborar bastante. Y te das cuenta de que no solo es en el ciclismo. Quizás lo fácil sea decir, es que con el tráfico, cada vez hay más coches, los padres tienen miedo a que los niños se hagan daño, el dopaje… sería lo fácil. Pero si hablas con las federaciones de tenis, fútbol, baloncesto, balonmano… Todas te dicen que cada vez tienen menos niños. Y yo creo que hay 3 razones: primero porque hay menos niños, segundo porque la vida es más sedentaria, más cómoda, es más fácil mandar a un niño hacer 5 actividades distintas durante la semana porque los padres no tienen tiempo para ellos. Y tercero porque como decía es más fácil jugar a la PlayStation que hacer un deporte. Yo creo que te aporta muchas cosas, pero que también hay mucho sacrificio detrás y tienes que renunciar a muchas otras. Aunque no pienses en ser un profesional del deporte, los padres deberían pensar que los valores que te aporta hacer un deporte son algo que te van a servir siempre, que los puedes aplicar en cualquier ámbito de la vida, es mi opinión.

Ves alguna solución? ¿Crees que cuando la crisis económica remita, volverá a haber más equipos y carreras que se han visto afectadas?

Eso sí que puede ser. No sé, el panorama en el ciclismo a corto medio plazo es muy complicado. Por lo que te digo, estamos faltos de equipos, pero dentro de unos años estaremos escasos de corredores.

¿Y la cuestión mediática? ¿Del poco eco que se hace en la prensa de las grandes cosas de este deporte y el morbo que le dan a las mínimas noticias sobre dopaje?

Sí que da rabia… pero yo creo que aprendes a convivir con ello. Ya te aislas un poco, a mí me daba más rabia antes que ahora. Hago lo que me gusta… Muchas vences lo pienso, soy un privilegiado, no me tengo que preocupar de lo que piense la gente, de lo que piense o escriba cierto periodista. Hago lo que me gusta, gracias a Dios me pagan por ello, tengo la familia bien, estoy recorriendo mundo, tengo satisfacciones personales, porque cuando tienes un buen resultado, ya seas tú o tu equipo te sientes bien. ¿Por qué me tengo que preocupar de lo que escriban o lo que no escriban, o compararme con otros deportes? Si estoy bien como estoy. Pero si que es verdad que cuando te paras a pensar de manera global sí que dices, quizás estamos un poco discriminados con respecto a otros, pero también tenemos que pensar que hay otros mucho peor que nosotros. Yo siempre pongo el ejemplo de la natación, que me parece un deporte durísimo y que no le dan casi ninguna repercusión. O dentro del ciclismo otras modalidades, por ejemplo. Siempre que se habla de esto se compara con el fútbol, pero es que el fútbol es la gallina de los huevos de oro. No se puede comparar con eso.

¿Crees que podremos ver en España alguna vez el ciclismo como se vive en Bélgica o en los Países Bajos?

No creo, la mentalidad en España es diferente. Si vas a un colegio en España y preguntas a algún niño qué sabe de ciclismo por alguna carrera de ciclismo, solo te sabrán decir el Tour de Francia, igual no te dicen ni la Vuelta a España. Pero vas a Bélgica y preguntas a algún niño por el ciclismo y te puede decir casi todo el calendario belga, a lo mejor te dice hasta el GP Le Samyn, por ejemplo (risas). La cultura es totalmente diferente.

Con las nuevas grandes potencias, Australia, Gran Bretaña, la internacionalización del ciclismo, ¿puede que si en España no se consigue enganchar a la afición y los patrocinadores, el ciclismo se haga más minoritario aún, con menos equipos y carreras?

Yo creo que lo estamos viendo, por ejemplo este año; Mallorca un día menos, Castilla y León tres días, Murcia en el aire, Almería ha estado en el aire, Asturias en el aire, La Rioja que ya sólo es un día. Y después los equipos, que cada vez hay menos. Yo creo que se está viviendo, sí. Antes un equipo podía sobrevivir prácticamente haciendo un calendario nacional. Ahora no.

Imagen característica de Barredo, actitud ofensiva (c)Tim De Waele

¿Qué te parece el sistema de puntos UCI? ¿Tenéis información de cuántos puntos tiene el equipo o vosotros mismos? ¿Sabrías decirme cuántos puntos tuviste el año pasado?

No, no te sabría decir si te digo la verdad.

Y condiciona mucho la planificación de la temporada?

Sí. Esta discusión la tuve con los mánagers del equipo en plan informal. Yo decía, y ellos me daban la razón, que a la larga es algo que va a traer muchos problemas a este deporte porque se va a perder algo que hacía al ciclismo especial, que aunque la gente que no sepa mucho de ciclismo puede pensar que es un deporte muy individual, es un deporte muy de equipo. Y este sistema del puntuación yo creo que va a traer la individualización a este deporte. Va a dejar un poco de lado el trabajo de equipo, porque al final somos profesionales. Y si llega un manager a final de año y te dice “ya, pero ¿cuántos puntos tienes?”. ¿Y cómo le dices que has estado todo el año trabajando para “este”? Aunque hay equipos, y sé que los hay, Rabobank por ejemplo, que sí que lo valoran, porque saben que para que un líder pueda ganar tiene que haber corredores que trabajen ese día, porque es que esto es un deporte de equipo. Pero en el subconsciente de cada corredor, siempre vas a pensar “hay que trabajar un poco menos y en vez de hacer el 25 voy a tratar de estar entre los 10 primeros que me van a dar medio punto, o un punto”. O en algunas carreras entre los 15 primeros, o veo que se acerca el final y esprintas. A lo mejor sin fuerzas que vas dejando y que a lo mejor un día te hacen falta para trabajar para un líder y no las tienes. Eso va a empezar a degenerar y llegará un momento que se convierta en algo mucho más individual de lo que es ahora.

¿Esto lo piensa el pelotón en general?

Sí, claro.

¿Y la UCI no os escucha? ¿No os toma en cuenta en sus decisiones?

No se pararon a pensarlo tampoco desde ese punto de vista. Ellos ahora mismo con la globalización del ciclismo lo que quieren es tratar de dar valor a todas las carreras, pero creo que esa no es la manera. Aunque también es fácil decir “esa es la manera” y no aportar una idea, pero bueno, yo creo que no es la manera.

Y aparte de que no se os escuche, ¿puede que no haya una voz única dentro del pelotón, que no estéis lo suficientemente unidos como para plantarle cara y defender lo vuestro? Que si el ADAMS, el pinganillo…

Yo creo que en su momento no se supo posicionar el pelotón y ahora es tarde ya. En el caso que comentas del ADAMS, tampoco es una cosa de la UCI, es una cosa de la Agencia Mundial Antidopaje (AMA) y que ahora está llegando a casi todos los deportes. Pero, por ejemplo, lo del pinganillo y muchísimas otras cosas, más que una voz única es que en su momento no se supo parar y al final ahora mismo hay muchos intereses, muchísimos equipos, cada vez hay más equipos. Y yo siempre digo que somos de un padre y una madre diferente, así que va a ser difícil que todos tengamos una idea común.

Por ejemplo el año pasado en la Challenge se hizo el plante por los pinganillos y al final no fue oficial el primer Trofeo. ¿No crees que esas protesta deberían ser en los mundiales, por ejemplo, que los organiza la UCI, en el Tour de Francia que tendría mucha repercusión o en el “inventado” Tour de Pekín?

Sí, pero hay demasiados intereses. Nadie se atreve. Pero está claro que muchas veces indirectamente puedes hacer daño a este tipo de carreras haciendo esas cosas. Es mucho dinero lo que les cuesta sacar la carrera adelante y mucho esfuerzo y por una acción así le fastidias una etapa.

Para acabar, ¿crees que se debería ayudar por parte de la UCI a equipos como el GreenEDGE o como el vuestro que tenéis equipo femenino, de ciclocross o categorías inferiores?

No creo, la UCI lo que tiene que hacer tratar de gestionar el ciclismo y tratar a todos los equipos por igual. No porque inviertan más en su deporte y en más modalidades tratar de ayudarles más. Lo que sí que a lo mejor podrían hacer es tratar de agradecer a esos espónsors que llevan muchos años, valorar ese esfuerzo y tratar de tenerles contentos. Por ejemplo este año, algo que no entendía, no tengo nada que ver, como una opinión personal. El día que se iba a presentar el Movistar y no le dejan presentar a Alejandro Valverde. Acaba de cumplir una sanción y Movistar es un patrocinador que está poniendo muchísimo dinero en el ciclismo en España. Y llega su corredor estrella y a ver cómo le dices al director de Telefónica que a su corredor estrella no se le puede presentar. Eso sí son detalles que deberían mirarse desde el otro punto de vista, desde el punto de vista de inversión, de “business” y que no son buenos para la marca, ni para el equipo ni para el ciclismo.