A finales del pasado mes de julio, Angelo Zomegnan, director del Giro de Italia desde 2004, fue relevado en su puesto como cabeza de la corsa rosa. Le sucedió Michele Acquarone (San Remo, 1972), hasta entonces director ejecutivo de RCS Sport, empresa organizadora del Giro, la Milán-San Remo, el Lombardía, la práctica totalidad del calendario italiano y además parte de un grupo empresarial que posee El Corriere della Sera, La Gazzetta dello Sport, El Mundo o Marca. Mientras Zomegnan, popular entre la afición ciclista por su mano de hierro en los recorridos, llegó desde el mundo de la prensa, la formación y dedicación de su sucesor es completamente empresarial. Hoy la nueva cara visible del Giro de Italia tuvo un rato para hablar con Cobbles & Hills sobre lo que será la primera vuelta grande del año tanto en 2012 como en el futuro inmediato.
¿Van a haber cambios importantes bajo su dirección respecto a la etapa de Angelo Zomegnan?
Creo que no van a haber grandes cambios. Yo he pasado los últimos tres años trabajando con Angelo en RCS Sport: él dirigía la parte ciclista y yo me encargaba del resto de asuntos. En esta anterior etapa, pasamos mucho tiempo juntos y tomamos todas las decisiones juntos. Ahora, Angelo ha dejado la compañía pero todo seguirá prácticamente igual. Somos la misma gente, tenemos la misma estrategia, la misma filosofía… Nada va a cambiar. Es sólo que una persona del equipo ya no está.
El recorrido del próximo Giro fue presentado hace un mes.
¿Le gustó?
No está mal, pero veo algunos aspectos a mejorar. Principalmente, la poca importancia de la contrarreloj individual. ¿Es una tendencia que va a seguir durante los próximos años?
Cuando Mauro Vegni, nuestro director técnico, diseñó el Giro de Italia este año, decidió que para este recorrido no necesitábamos más kilómetros de los que incluimos. No queremos que el Giro se decida sólo por las contrarrelojes; queremos que el ganador del Giro sea un escalador. Así que pensamos que si reducíamos los kilómetros contrarreloj, todo podría funcionar bien. Este año también tendremos menos montaña, así que debíamos incluir menos cronos para que el recorrido estuviera equilibrado. Hay muchos seguidores que se quejan por internet, en las redes sociales, y piden que incluyamos más contrarreloj. ¿Mi opinión? Veamos qué pasa. Si resulta que este Giro no es lo suficientemente espectacular, cambiaremos el modelo el año que viene.
Otra de las características del recorrido del próximo Giro es que la dureza de la carrera está concentrada en la última semana.
No creemos que sea así. En la última semana hay un montón de montañas, como hubo este año y como ha habido tradicionalmente en el Giro. Lo que creemos es que incluso en la primera semana tenemos muchas etapas muy duras y estoy seguro de que nuestros seguidores disfrutarán mucho con las que tienen montaña aunque no sea de los Alpes. Creo que todos los días tendremos algo diferente y espectacular. Aún no hemos presentado todas las etapas, pero cada día habrá algún rasgo de clásica, algo especial. Por supuesto, queremos darles oportunidades a los sprinters, pero queremos que cualquier tipo de corredor pueda brillar en el Giro.
Este tipo de finales con trampas, a modo de clásica, típicos del Giro, están empezando a verse en la Vuelta e incluso el Tour. ¿Cree que se está convirtiendo en una tendencia entre las grandes vueltas?
Nosotros empezamos a hacerlo porque en Italia hay poco terreno llano y muchas montañas pequeñas, volcanes, etc. Al mismo tiempo, ahora hay muchos ciclistas especializados y hay que modificar el patrón clásico de las grandes vueltas. Cancellara puede ganar etapas, Boasson Hagen puede ganar etapas, Antón puede ganar etapas, por supuesto queremos que Cavendish gane etapas… Son diferentes tipos de ciclistas y todos ellos necesitan demostrar su talento durante una gran vuelta. Nosotros estamos comprometidos a facilitarles las condiciones para que den lo mejor de sí mismo.
¿Hay alguna etapa que le emocione especialmente, dentro del próximo Giro?
Por supuesto: la etapa del Stelvio y del Mortirolo. Es la que ha elegido la afición. Les dijimos: “vale, mirad todas las montañas del Giro y elegid la que más os guste”. Eligieron Mortirolo y Stelvio, lo que fue una gran oportunidad para que creásemos la etapa de los seguidores y a mí me encanta, porque lo hicimos todos juntos. Creo que será una etapa única, muy dura, tradicional, espectacular… una bellísima etapa del Giro.
Además el Stelvio es una cima clásica del Giro que últimamente no se veía muy a menudo.
Esperemos que no haya demasiada nieve en la cumbre. Sería una pena no poder hacer la etapa entera por esta razón.
Tras toda la polémica con el Monte Crostis el año pasado, ¿cree que será posible verlo en el futuro en el Giro?
El año pasado tuvimos un problema de comunicación. La organización, los corredores y la UCI no nos entendimos entre nosotros, algo que estamos seguros que no volverá a pasar. Si es posible porque técnicamente la subida está bien, quizá la podremos ver; si no está lo suficientemente bien, no la veremos. Por suerte, no es imprescindible ir al Crostis para la carrera. A lo mejor en los próximos años se convierte en una de las ascensiones más bellas del Giro, pero lo que tenemos claro es que todo lo que hagamos en el futuro contentará a la UCI y a los equipos ciclistas.
Cuando terminó la última edición del Tour, Alberto Contador dijo que no volvería a correr el Giro antes de la ronda gala.
“Nunca más”, dijo.
Sí. Básicamente achacó al desgaste del Giro su fracaso en el Tour, aun reconociendo que había sido una gran victoria de la que estaba muy orgulloso.
Me encanta Alberto, de veras, como atleta y como persona. Creo que es un gran tipo y un campeón. Uno no se encuentra a menudo a un campeón como él. Es el mejor y lo seguirá siendo durante años. Así que cuando dijo “nunca más”, pensé que estaría frustrado y decepcionado por perder el Tour. Por supuesto, le entendí: cuando yo pierdo no estoy nada contento. Él dijo que estaba muy cansado después del Giro y que nunca volvería a correrlo. Después hablamos y me contó que ama el Giro, que ama Italia: “vuestra carrera es la más bonita del mundo, es perfecta para mí. Seguro que volveré al Giro, pero probablemente el año que viene me concentraré en el Tour, porque quiero dominar esa carrera”. En mi opinión, el resto de grandes ciclistas deben darse cuenta de que Contador estará en el Tour de Francia a tope y que será muy difícil ganar la carrera. Probablemente sea mejor intentar ganar el Giro que aspirar a ser segundo en el Tour.
En ese sentido podemos ver el caso paradigmático de Andy Schleck, un gran corredor pero que apenas tiene victorias importantes por centrarse en el Tour.
Para él, me imagino que el Giro podría ser una gran oportunidad. Incluso para Cadel Evans que, por supuesto, ha ganado el último Tour. Pero si yo fuera él pensaría en intentar ganar el Giro de Italia: ganar dos grandes vueltas es mejor que hacerlo sólo en una.
El razonamiento suena lógico, sobre todo para la afición. Pero al final los ciclistas acaban corriendo solamente el Tour, aunque no tengan opciones para ganar.
Es cierto. Sin embargo, y sin haber visto aún cómo será la Vuelta, después de ver los recorridos de Giro y Tour creo que todos los grandes campeones podrían participar en ambos. No son tan duros como lo fueron el año pasado.
En general, ¿están preocupados por la participación? Porque el Giro suele acabar convirtiéndose en una lucha entre ciclistas italianos, con la aparición de alguna figura extranjera de vez en cuando, como Menchov y Contador.
No te puedo hablar sobre el pasado, porque no estaba. Yo empecé a trabajar en el Giro en 2009, cuando Menchov, medio ruso y medio español, ganó la carrera; al año siguiente, Basso ganó la carrera, pero contra Cadel Evans; y el año pasado se la llevó Alberto Contador. En los últimos años, no ha sido sólo una lucha de italianos, y espero que siga siendo así durante las próximas ediciones, que sea una competición internacional. Ahora mismo estamos a la expectativa de ver qué pasa con el mercado de fichajes, pero estoy seguro de que tendremos al menos diez estrellas que vengan a Italia a intentar ganar el Giro, provenientes de todo el mundo.
A estas alturas del año, aun muy pronto, ¿hay alguna estrella extranjera que crea que vendrá a la próxima edición del Giro?
Vosotros lo sabréis mejor que yo: todo lo que conozco sobre esto viene de la prensa. He leído que Andy Schleck está hablando sobre ir al Giro, también Samuel Sánchez, Joaquim Rodríguez, Froome, Fuglsang… Muchos de ellos han hablado sobre el Giro. Lo que sí sé es que suelen decidirlo en abril, así que tendremos que esperar. Recuerda lo que pasó con Contador en 2008, cuando estaba en la playa y luego vino para ganar el Giro. Tendremos que hablar otra vez en abril, pero creo que tendremos diez ciclistas de postín para disputar el Giro en 2011.
A un nivel general, ¿qué espera del Giro para los próximos años?
Siempre digo que nuestra estrategia está muy clara: la afición es lo primero. En los últimos años, nuestros seguidores pedían una carrera muy dura y eso les dimos, con sterrato, muchas montañas, volcanes y demás. Después dijeron que les gustaban las carreras duras y eso no debía olvidarse, pero que el recorrido de 2011 fue demasiado y que los corredores no se merecían sufrir tanto. Nosotros hemos actuado en consecuencia y hemos intentado buscar el equilibrio entre estas dos cosas. En el futuro seguiremos hablando con ellos, quizá haya que poner más kilómetros contrarreloj, o reducirlos… En estos tiempos es muy fácil escuchar a la afición y darles lo que quieren, y ese es nuestro principio de actuación.
Por último, le quiero preguntar por el cambio de fechas del Lombardía. Supongo que, con el anticipio, esperan que vuelva a ganar importancia.
Teníamos dos problemas con el Lombardía. El primero es que todos los equipos y corredores tenían dificultades logísticas, con las novedades del calendario en Asia, para volver a correr en Italia. Es más fácil cerrar la temporada Europea y que después viajen a Asia. El segundo es un problema meteorológico: siempre llovía. Era un fastidio para la afición, para las audiencias e incluso para las ciudades que acogen la carrera. Ahora tendremos buen tiempo y creo que con el nuevo calendario también llegarán los grandes corredores en gran forma, justo después del Mundial. Entre organizadores, UCI y equipos, creo que hemos encontrado la mejor manera de hacer el Lombardía.
Yo confío en el nuevo gestor del Giro, aunque espero un compromiso real y efectivo con eso de revisar el recorrido si realmente no da espectáculo.
Recadito a Andy?¿ = P
¿Qué tiene de malo el recorrido de este Giro? Hay km contrarreloj individual y por equipos, hay media montaña, hay alta montaña para dar y tomar… la gente se ha vuelto excesivamente exigente, tiquismiquis, todo el mundo se cree el mejor diseñando recorridos. Empieza a ser como lo de seleccionador nacional. Deberían dejar que lo diseñara la UCI, sería como volver a los primeros 80, Saronni-Moser (eso si ahora anglosajones o asimilaos), cronodescensos rectos, sprints y mas sprints y ni una montaña sin su buen túnel. Igual así ganaba un Giro Wiggins, Tony Martin, o Peter Sagan. Torna a Sorrento Torriani!