Philippe Gilbert (Omega Pharma – Lotto): el reciente ganador de la Amstel Gold Race lleva evolucionando como corredor, perdiendo kilos, perdiendo masa muscular, varias temporadas para afrontar la Liége-Bastogne-Liége, carrera que pasa casi por la puerta de su casa, en la mayor aptitud posible. Como objetivo cuantitativo tiene marcada La Doyenne como prioridad. Como objetivo cualitativo, esta supuesta victoria le daría un plus de versatilidad que le auparía, aunque en discusión quizás con Fabian Cancellara, como el clasicómano más completo del momento habiendo ganado carreras de características muy diferentes. Su afán de ser protagonista, de ser ofensivo en casi cualquier carrera, le hace reservarse un lugar predilecto en los corazones de los amantes de las clásicas. Una victoria suya el domingo, que podría darse después de una gran selección instigada por él mismo, sería una gran noticia para el ciclismo.

Alejandro Valverde (Caisse d´Epargne): inmerso en un proceso judicial que parece interminable, Valverde puede encontrarse ante la gran oportunidad de justificar 2010 con la que sería su 3ª LBL, hecho sólo alcanzado por corredores como Merckx, Argentin, De Bruyne o el primer vencedor, León Houa, entre otros. Ha corrido mucho más que en años anteriores, está, según demostró en País Vasco, en un estado de forma muy bueno, y siempre que ha llegado en un estado parecido ha terminado ganando (2006 y 2008) o estando cerca de la victoria (2007). Por ello es un favorito cinco estrellas, un elegido para este tipo de carreras quebradas con final en repecho. Habrá que conocer cómo responde sin su mejor gregario los pasados años, un Joaquim Rodríguez que se presenta en Lieja como outsider a la victoria tras su 2º puesto en 2009, y teniendo a Luis León Sánchez como partner en esta aventura de ida y vuelta.

Alejandro Valverde, en su victoria de 2008

Cadel Evans (BMC): proclamado como el corredor más garrapata de los últimos tiempos, el bueno de Evans se ha destapado, desde su fiasco en el Tour 2009, como un ciclista más ofensivo de lo que había sido hasta el momento. De esos instantes (victoria en Mendrisio, por ejemplo) ha derivado una corriente de opinión general que, pensándolo detenidamente, ya tenía su existencia en el pasado; Cadel Evans es un corredor supercompetitivo, con unas condiciones hasta cierto punto limitadas, que suple con una tenacidad y una regularidad digna de mención. El domingo podría dar otro golpe en la mesa de aquellos que lo despreciaban como ciclista, ganando otra gran clásica (venció, recordemos, el Mundial de Mendrisio y la FW el pasado miércoles) que daría su equipo la segunda victoria del año.

Andy Schleck (Saxo Bank): El segundo clasificado del Tour de Francia llega a Lieja para conseguir su primer gran objetivo de la temporada: revalidar en Ans su victoria de 2009. Contará con un bloque potentísimo y, en especial, con su hermano Fränk, también candidato a ganar La Doyenne. A ambos les interesa una carrera muy dura y, por encima de todo, selectiva. Los Schleck necesitan eliminar a los hombres más rápidos y llegar al final de la carrera en un grupo extremadamente reducido, sin la presencia de Alejandro Valverde, a ser posible. Tienen talento y carácter para conseguirlo; todos disfrutaremos muchos si se producen movimientos conjuntos entre los luxemburgueses y Philippe Gilbert. Pase lo que pase, se encontrarán entre los principales animadores de la carrera.

Andy Schleck ganó en solitario la última edición

Joaquim Rodríguez (Katusha): mucho más combativo y activo, además de independiente, como es normal, está corriendo el de Parets este año las clásicas de las Ardenas. Su marcha de Caisse d´Epargne ha revertido en un mayor espectáculo en las carreras que antes corría también con los navarros. En la Vuelta al País Vasco disfrutó de la libertad suficiente para poder imporse en la dura etapa de Aia y el miércoles terminó el podium de la FW. El domingo, con libertad casi absoluta (solo estará supeditado a Kolobnev o Ivanos en caso de que estos estén en algún corte definitivo), podrá optar con todas las de la ley a un carrera donde siempre ha rendido como corredor de equipo, pero que nunca afrontó como líder.

Robert Gesink (Rabobank): sufriendo, como siempre, las mil y una penas que todo corredor pueda padecer en una carrera ciclista, Robert Gesink se presenta en la LBL después de que una caída le lastrara en la Itzulia, así como un mal día y un pinchazo inoportuno lo hiciera en la AGR y la FW respectivamente. La mala suerte que le persigue a él y a su equipo un día deberían de tornarse en buena… quizás sea el domingo en las inmediaciones de Lieja, donde tendrá que llegar al último repecho en Ans en solitario. La velocidad y contudencia en finales de ese tipo no le avalan.

Damiano Cunego (Lampre-Farnese Vini): sexto en la Amstel, quinto en la Flecha, el italiano querrá buscar mejorar su tercer puesto que tiene como mejor resultado en la Doyenne. En esta temporada parece que le falta ese punch que tantas victorias le ha dado en su carrera deportiva, pero merced a sus resultados en Abril seguro que estará peleando hasta el final. Junto a él y aunque el recorrido quizá sea demasiado exigente para sus condiciones, deberemos seguir a Francesco Gavazzi, el cual ya lo intento el miércoles de camino a Huy.

Alberto Contador (Astana): Por fin, nuevos retos para el número uno de las carreras por etapas. Este domingo veremos al pinteño, por primera vez en su carrera deportiva, partir como favorito a una carrera de un día. Al menos así invita a pensar su tercer puesto en la Flecha Valona. Contador acumula una serie de despropósitos en este tipo de pruebas, entre espantadas y desapariciones, frente a unas condiciones innegables para ellas. Nadie duda de que si quiere brillar, puede. El líder de Astana también debe buscar una carrera selectiva y le ayudará el patrón Vinokourov, que llega a Lieja después de ganar a Riccò en el Giro del Trentino. El kazajo puede ser uno de las bazas determinantes de la carrera.

Alexander Vinokourov se impuso al sprint a Jens Voigt en 2005

Chris Horner (Team Radioshack): Cuidado con el veteranísimo compañero de Lance Armstrong. Mientras su patrón, como casi siempre, se ha tomado las clásicas sabáticas -excepción en Flandes, que poco no es-, este atípico especímen del pelotón va acumulando grandes actuaciones. No es sólo que haya ganado la Vuelta al País Vasco, sino que ha estado en los puestos cabeceros de AGR y Flecha Valona. Un ciclista peligroso, al que los favoritos no deberán dejar mucho espacio pese a su poco instinto ganador. Viene acompañado de un bloque notable, sobre todo para las alturas de temporada en las que se encuentra el equipo de Bruyneel.

Roman Kreuziger (Liquigas): el checo ha demostrado que llega bien al último de los Monumentos de Abril con una buena actuación en la Amstel Gold Race. La carrera se adapta muy bien a sus características, siendo como es un corredor que se maneja muy bien en terrenos aserrados como el de la Doyenne. Junto a él, Vincenzo Nibali, que compartirá responsabilidad para conseguir la victoria para el equipo verde.

Gert de Waele (Landbouwkrediet): Tras su sorprendente 4º puesto en la reciente Amstel Gold Race, siendo el primero en desatar los ataques definitivos en Cauberg, y su gran rendimiento en la Flecha Valona (12º), el veterano corredor belga (34 años) intentará de nuevo sorprender a todo el mundo en Liege y dar algún susto a los favoritos. Lo tendrá muy complicado debido a la dureza de esta carrera, pero esta realizando un grandísimo inicio de temporada y no sería descabellado ver haciéndole Top-10.

Igor Antón (Euskaltel – Euskadi): llega a la prueba en su mejor momento desde que se cayese camino de l’Angliru en la Vuelta 2008. Así lo demuestra su victoria la semana pasada en el Morredero y el cuarto puesto conseguido en la Flecha Valona, donde hizo una muy buena ascensión a Huy. Su rendimiento en pruebas de un día va en clara ascensión y aunque aún está lejos de los grandes especialistas del momento, si se dan ciertas situaciones de carrera puede darles un susto importante. Junto a él se presentarán en la línea de salida corredores como Egoi Martínez o Mikel Nieve. Mención especial a la incomprensible ausencia de Samuel Sánchez.

Ryder Hesjedal (Garmin – Transitions): Tras su sorprendente performance en la Amstel Gold Race, quedando 2º tras Philippe Gilbert, y siendo también top10 en el muro de Huy, en la Flecha Valona, el canadiense, vencedor de etapa en la Vuelta a España en 2009, optará a un puesto de honor en la carrera valona.

Michael Albasini (HTC – Columbia): Hemos elegido a Albasini, pero prácticamente todos los integrantes del ocho del equipo podrían haber sustituido al suizo. Ése es el problema de la formación que se trae el HTC a La Doyenne: falta empaque. Hay muy buenos ciclistas: Albasini, Martin, Velits, Monfort e incluso Van Garderen son corredores interesantes para estas carreras, pero ninguno de ellos tiene posibilidades de brillar en serio en esta Lieja-Bastogne-Lieja. Éste, junto a la carencia de un vueltómano, es de los pocos puntos débiles de la estructura norteamericana.

Nicolas Roche (Ag2r – La Mondiale): el apellido avala las espectativas que se puedan tener en el joven campeón irlandés, que con 25 años recién cumplidos ya tiene diversas victorias como profesional, aunque ninguna de la relevancia que con su edad ya hubiera conseguido su padre, Stephen Roche (Tour de Romandía o París-Niza). No obstante, al joven irlandés, que lleva corriendo para equipos franceses toda su trayectoria como Pro, se le adivinan mejoras en sus resultados año a año (en la París-Niza obtuvo buenos puestos en varias etapas), y quizás en esta LBL pueda obtener su primer gran resultado en una gran carrera.

Simon Gerrans (Sky): El equipo británico no pasa por su mejor momento, tras empezar la temporada como motos ganando en todas partes, han desaparecido del primer plano más allá del rendimiento de Flecha en el pavés. Su paso por las Ardenas está siendo bastante discreto. Gerrans, sexto el año pasado, aunque no parece el mismo del año pasado en Cérvelo (fue Top10 en las tres carreras del tríptico) es el teórico líder del equipo en este terreno. Le acompaña en la jefatura otro ciclista del que todavía no se tienen demasiadas noticias esta temporada, el sueco Thomas Lövkvist, eterna promesa con grandes condiciones para una prueba como ésta que no acaba de explotar. También destaca la presencia de Bradley Wiggins, metido en una milimétrica puesta a punto para su gran objetivo del año, el Tour. Pese a los nombres, visto lo visto sería una sorpresa que estuvieran luchando por la victoria.

Rein Taaramae (Cofidis): El joven estonio está realizando un principio de temporada muy bueno, destacando en carreras como Paris-Nice, Volta o Turquía y sus características de buen escalador y rodador junto a su jovial combatividad hacen de él un posible protagonista el domingo. En su contra juega su juventud e inexperiencia, ya hemos visto varias veces como tras lanzar duros ataques quedaba absolutamente desfondado, lo que en una prueba de tanto kilometraje se paga mucho más. También destacan en el ocho del enrachado conjunto francés nombres como el colombiano Duque, para el que probablemente el recorrido sea demasiado exigente pero que avala un decimocuarto puesto el miercoles en Huy o el veterano Moncoutié, de quién se puede esperar cualquier cosa, y que si se encuentra en su día puede convertirse en muy peligroso.

Stefano Garzelli (Aqcua & Sapone): sin apenas resultados después de adjudicarse la Tirreno-Adriático y viniendo de realizar un discreto Giro del Trentino, el de Varese aún así seguirá siendo la referencia allá donde vaya. Además, tanto Paolini como Francesco Masciarelli serán de la partida, por lo que también se tendrá que tener en cuenta sus nombres, sobre todo el del joven Masciarelli, uno de los futuros valores del ciclismo italiano.

Stefano Garzelli, tras Bettini el doblete de Mapei en 2002

Linus Gerdemann (Team Milram): Tras su discreta participación de la temporada pasada, el corredor alemán deberá de demostrar que está capacitado para dejarse ver en las Ardenas. Condiciones para estar delante tiene, como demuestra sus buenas actuaciones en pruebas similares en Italia, pero tiene que refrendarlo. Como curiosidad, el reciente vencedor de etapa de la Volta a Catalunya, Paul Voss, hace 2 años fue 8º en la Liege – Bastogne – Liege sub-23.

Jerome Baugnies (Topsport Vlaanderen): Sin ninguna opción para verse delante en los momentos decisivos para la carrera, el conjunto belga suponemos que se dejará ver en el inicio de la prueba. Destacamos al jovencísimo Baugnies (23 años) que consiguió un meritorio 38º puesto en la Amstel Gold Race y en la Liege – Bastogne – Liege sub-23 fue 5º hace 2 años.

Sylvain Chavanel (Quick Step): el corredor de Châtellerault, tras una temporada de clásicas horrible tiene la última oportunidad de demostrar toda su clase. Su estado de forma sigue sin ser bueno, aunque en las últimas temporadas va mostrando cierta mejoría. Ha participado en esta prueba en varias ocasiones aunque nunca ha conseguido ningún resultado reseñable. De todos modos, aún sin demasiadas opciones de victoria final, cualquier aparición que haga será, como siempre, signo de espectáculo. Las otras bazas del equipo son las de Carlos Barredo y Kevin Seeldrayers, que se encuentran en una situación parecida a la del francés en cuanto a momento de forma y resultados. La incógnita, como ya viene siendo habitual, Stijn Devolder.

Christophe Le Mevel (Française des Jeux): en principio tiene que ser el corredor que de presencia al conjunto galo en una prueba en la que vienen sin exigencia alguna. Ganador esta temporada en el Tour de Haut Var, tendrá que intentar dar la sorpresa desde lejos para aumentar sus opciones de obtener un buen resultado.

Leandro Bertagnoli (Androni-Giocattoli): sin contar con la participación del bloque fuerte de la estructura de Gianni Savio, como lo pueden ser Scarponi o lo sudamericanos Serpa, Rodríguez u Ochoa, las opciones de hacer un buen papel el domingo se esfuman, como ya ocurrió el miércoles en Huy, donde sólo dos corredores llegaron a meta, siendo Leandro el más destacado con un discreto 40º puesto.

Xavier Florencio (Cervélo Test Team): La baja de Simon Gerrans ha mermado notablemente las posibilidades del Cervélo para las Ardenas. Si durante la campaña de piedras cuentan con Thor Hushovd, un seguro de vida, aquí carecen de referente. Si bien participara Carlos Sastre, uno de los líderes de la escuadra suiza, sólo lo hará para ir cogiendo kilómetros en busca del Giro de Italia. En este contexto, el catalán, en medio de una temporada muy discreta, tiene la oportunidad de llamar la atención.

Pierrick Fedrigo (BBox Bouygues Telecom): El reciente ganador del Critérium Internacional nunca ha brillado espectacularmente en el tríptico. Parece que esta temporada ha bajado el pistón tras su importantísima victoria en Córcega, pero es un ciclista con la suficiente calidad como para ser la primera baza del modesto equipo francés en Lieja. Thomas Voeckler es el otro nombre importante para Didier Rous, todavía lejos de sus partes predilectas del calendario. Probablemente busquen cuota de pantalla con fugas lejanas.

Las apuestas de Cobbles and Hills: Alejandro Valverde, Philippe Gilbert y Andy Schleck.