Después de unas semanas centrado en los estudios, estaba deseando cambiar el chip y meterme de lleno en la dinámica de la competición de nuevo…y a pesar de ser sólo un fin de semana sirvió para despejarme del todo! Aunque me llevé un disgusto porque tuve un problema con el coche llegando al hotel del equipo en Onda, al final tuve que volverme el lunes a casa en tren, pero una vez más pude ver la solidaridad del colectivo ciclista así que estoy muy agradecido!

Deportivamente, el campeonato me fue bien. Salí con unas ganas terribles de quitarme la tensión que tenía encima, y aunque no las tenía todas conmigo por el problemilla de la rodilla, la cosa fue mucho mejor de lo que yo pensaba. Estuve muy activo al principio, y aunque no pude coger “la buena” afronté con confianza el circuito del Desierto de las Palmas. Hacía mucho calor y no sé ni cuantos bidones bebimos. ¡Una de las cosas que más me gusto fue la cantidad de gente que había viendo la carrera! Y que bien sentaban esas botellas de agua por la cabeza…que gusto da cuando el respeto entre el ciclista y el aficionado es total!

¿Y da tiempo a pensar en eso cuando vas sufriendo al límite? Pues yo creo que sí. Siempre me fijo en esos detalles y en las ganas que tenía Contador de “liarla” cuando arrancó con todo en la segunda pasada, en el gas que lleva Rojas que sube más que sprinta y ya es decir, en la cámara que llevaba Arroyo en la bici y a la que incluso en algún momento añadía comentarios sobre la carrera..Y claro, con Contador al ataque solo puedes buscar tu ritmo. Eso hice cuando ya llevabamos 200km (porque salieron 215) en la última pasada por el puerto porque sabía que el trabajo estaba bien hecho dejando a Ricardo y Cabedo para luchar por los puestos de honor, ¡pero sin aflojar que como ya os dije iba a esforzarme para seguir cogiendo la forma!

Es turno de entrenar para preparar la segund aparte de la temporada

El resultado, pues lo de menos. Lo mejor, las sensaciones en el puerto tras cinco horas de carrera, lo que me dice que voy por el buen camino. Voy a seguir afrontando con muchas ganas la segunda parte de la temporada, que a finales de mes hará que me ponga el dorsal de nuevo posiblemente en Ordizia, Getxo y Burgos, y más tarde puede que en Italia y Francia.