Pauwels

Hubo un tiempo en el que Kevin Pauwels (Sunweb – Napoleon Game) fue el mejor. No indiscutiblemente, no en todos los terrenos, pero durante el otoño de 2011 fue referencia, al menos, de mismo modo que lo eran Albert y Nys. Un oasis de grandeza en un trayectoria marcada por su carácter. Tímido, retraído e incluso abúlico, durante estos tres largos años parecía que su cabeza no le dirigía hasta donde le podían llevar sus piernas. El talento, a cuentagotas, relucía, mas en el balance global siempre destacaba un adjetivo por encima de ninguno: decepcionante. Sin embargo, octubre mostró detalles esperanzadores. Allá donde fue se mostró regular, competitivo y constante. Un regreso a la senda correcta que hoy, en los anfiteatros arenados de Zonhoven, le ha llevado a una victoria mayúscula en la mejor carrera de lo que vamos de temporada, la segunda del Superprestige, sobreponiéndose al que parecía el zarpazo definitivo de todo un Sven Nys (Crelan – AA Drink).

El de Ekeren hizo gala de todas sus virtudes, ocultas a lo largo de este aciago lapso bajo su casi imperturbable carácter. Tuvo un salida correcta: no es el hombre más rápido, pero sabe imponer su fuerza en la recta inicial para no perder el tren en los primeros compases. De modo que cuando Tom Meeusen (Telenet – Fidea) tensó la cuerda desde el comienzo para separar el grano de la paja, él no tuvo contratiempo alguno. Asentado en la cuarta plaza, a rueda de su compañero Klaas Vantornout, se insertó por simple inercia en el primer corte, en el que figuraban todos los hombres importantes salvo Mathieu van der Poel (BKCP – Powerplus). La perla neerlandesa tuvo un problema con el cambio al encenderse el semáforo verde, lo que le obligó a una remontada en las tranquilas primeras vueltas que irremediablemente pagó cuando el nivel se puso a la exigencia marcada por el Kanibaal.

Nys estaba hambriento. La derrota de ayer ante Van Aert había encendido su furia y, en contra a lo que nos tiene habituados, movió ficha antes que nadie. Aprovechando un pequeño cambio de ritmo efectuado por Vantornout en las zonas de pateo que estiró el todavía compacto paquete, el driekleur se lanzaba a su típica progresión sostenida. Nada de ataques explosivos, simplemente a ritmo, explotó el pelotón en mil pedazos, poniendo de manifiesto una de las “cualidades” más clásicas de Pauwels: los despistes aderezados de mala suerte. En esta ocasión, el demarraje le pilló a rueda del eslabón más débil. Corné van Kessel (Telenet – Fidea) perdía de forma inexorable segundos a cada metro con la cabeza, lo que le dejaba a más de veinte segundos del dúo formado por Nys y Tom Meeusen (Telenet – Fidea), quienes se habían quedado solos tras la caída de Vantornout.

Eso, el año pasado o el anterior, hubiera supuesto su sentencia. En su cabeza, otra oportunidad perdida; y en la campa una visible desconexión. Pero en esta ocasión no se rindió, y al mismo tiempo que Nys torturaba a Tommeke él iba dando pasaporte a todo ciclista que se cruzaba en su camino con el ritmo machacón e impertérrito de sus mejores actuaciones. Tras Van Kessel, le llegó el turno a Philipp Walsleben (BKCP – Powerplus), un juguete a manos del rubio del mismo modo que Van der Poel, quien acusaba visiblemente un inicio a contrapié. Pauwels iba pletórico, camino de alcanzar ya a un Lars van der Haar (Giant – Shimano) que, a un ritmo más humano, también estaba acercándose a la estela de los líderes. Ambos, finalmente se unirían al término del sexto giro, cuando Nys, satisfecho con su selección -luego se arrepentiría-, paraba y daba la alternativa a un Meeusen que al fin podía descansar.

Cuatro hombres delante, pero dos sensaciones. Por un lado, las de Nys y Pauwels; frescos, seguros y confiados; por otro, las de Meeusen y Van der Haar, fatigados y tocados moralmente por un Kanibaal que les había llevado al límite durante media carrera. Cuando el de Baal volvió a la carga, se confirmó. El pupilo de Van Kastener cedía definitivamente, mientras el campeón de los Países Bajos ponía el gancho como buenamente podía para apurar sus escasas opciones de triunfo. Pauwels, mientras tanto, se adosaba con facilidad a la rueda de Nys.

El escenario estaba preparado, y las cartas sobre la mesa. Solo era cuestión de tiempo que llegara el duelo definitivo. Durante unos minutos, recelosos uno del otro, se alternaron en la primera posición sin arriesgar más de lo debido, lo que dio el aire suficiente a Van der Haar para aguantar hasta el toque de campana. Pero mediada la última vuelta, el nivel subió y él desapareció. Nys daba el primer susto, pero Pauwels respondía con un pateo sensacional en la impresionante subida de arena hasta la loma, plagada de público, que le daba el liderato por momento. Porque a pesar de reservarse para uno de los numerosos tramos de arena, Nys sacó el conejo que guardaba en la chistera con un cambio demoledor que le soltó de rueda y le otorgó tres segundos que parecían dejar la prueba vista para sentencia.

Sin embargo Pauwels, con una dureza mental que pocos pueden recordar en él, no se vino abajo y comenzó su progresión. Contra todo pronóstico, se acercaba lentamente a la rueda de un Nys visiblemente fatigado, pero que aun así contaba con margen para resistir. El guión de pronto, cambió. A apenas doscientos metros de meta, cometía un error técnico imperdonable que le cortaba el ritmo y que su rival, lanzado de cara al sprint, no desaprovechó. Pauwels ganaba por primera vez desde el pasado diciembre, dando una alegría en casa Mettepenningen que, no obstante, palidece ante el cómo la logró. Tras tantos meses y desengaños hoy volvió a ser lo que un día fue: el mejor.

Clasificación Cyclocross Zonhoven:

  1. Kevin Pauwels (Sunweb – Napoleon Games) en 58:04
  2. Sven Nys (Crelan – AA Drink) a 0:00
  3. Lars van der Haar (Giant – Shimano) a 0:13
  4. Tom Meeusen (Telenet – Fidea) a 0:33
  5. Mathieu van der Poel (BKCP – Powerplus) a 0:58
  6. Klaas Vantornout (Sunweb – Napoleon Games) a 1:12
  7. Bart Aernouts (Kwadro – Stannah) a 1:15
  8. Niels Wubben (Telenet – Fidea) a 1:22
  9. Corné van Kessel (Telenet – Fidea) a 1:38
  10. Philipp Walsleben (BKCP – Powerplus) a 1:44

Clasificación Superprestige (2/8):

  1. Sven Nys (Crelan – AA Drink): 27 puntos
  2. Lars van der Haar (Giant – Shimano): 27 puntos
  3. Mathieu van der Poel (BKCP – Powerplus): 26 puntos
  4. Kevin Pauwels (Sunweb – Napoleon Games): 25 puntos
  5. Klaas Vantornout (Sunweb – Napoleon Games): 21 puntos
  6. Tom Meeusen (Telenet – Fidea): 18 puntos
  7. Corné van Kessel (Telenet – Fidea): 16 puntos
  8. David van der Poel (BKCP – Powerplus): 12 puntos
  9. Bart Aernouts (Kwadro – Stannah): 12 puntos
  10. Jens Adams (VastgoedService – Golden Palace): 10 puntos