Cuando Julio César pronunció con soberbia estas palabras ante el repleto Senado, tras derrotar a los pontos por aplastamiento en la fugaz batalla de Zela, difícilmente podía pensar que tantos iban a querer hacerlas suyas. De hecho, así ha sido a lo largo de los siglos, sin que en muchos casos la hazaña realizada estuviera a la altura de la pronunciación inicial. Hoy, quizá, sí. Sin compartir el ánimo belicoso de las legiones, pero desde luego sí su gallardía, Mathieu van der Poel (BKCP – Powerplus) puede henchir su pecho y parafrasear orgulloso al dictador romano. En su primer acercamiento del año al barro, compitiendo contra élites a pesar de sus 19 años en toda una prueba del Superprestige y tras haberse centrado durante el mes de septiembre en preparar el Mundial de ruta, se ha deshecho de todas las grandes estrellas internacionales con una suficiencia, dadas las circunstancias, impropia y casi insultante.

Cualquier otro se hubiera achantado. Contando con tres años menos que cualquier otro participante, con solo tres carreras de una hora a sus espaldas y acudiendo con una preparación mucho menos específica que cualquier otro rival, la mayoría se hubiera contentado corriendo con paciencia, buscando ruedas cómodas, tratando de guardar de cara a las siempre decisivas dos vueltas finales, más en un circuito seco y sin excesivos desniveles como el de Gieten. El menor de los Van der Poel, sin embargo, tomaba en cabeza la primera curva. Ni siquiera unos auténticos rifles de competición en las salidas como Tom Meeusen (Telenet – Fidea) o Lars van der Haar (Giant – Shimano) pudieron hacerle sombra, dando continuidad durante una primera vuelta en la que rompió por momentos el grupo, quedándose por delante junto a Tommeke y Kevin Pauwels (Sunweb – Napoleon Games). No obstante, cuando cedió el capote a los belgas ninguno lo recogió, y la amenaza de corte quedó en agua de borrajas durante el segundo giro, cubierto a un ritmo pausado que permitió una ligera reagrupación.

En ella, no figuraba Sven Nys (Crelan – AA Drink). El campeón belga, en una especie de “homenaje” a Albert y su exhibición de la pasada campaña, realizó una salida absolutamente espantosa que le hizo perder medio minuto en el primer paso por la línea de meta. Una renta excesiva incluso para él, sobre todo, por el empeño su homólogo neerlandés en hacerle pagar su error. Tan pronto como alcanzó el liderato, Van der Haar realizó un cambio de ritmo fortísimo, estirando el paquete y provocando el error, en una de las curvas más técnicas del circuito, de Meeusen. Precisamente uno de los hombres más técnicos, se iba al suelo provocando un tapón que dejaba por delante al ciclista de Giant-Shimano junto a un Pauwels carente de frescura, que no tardaría en dar síntomas de debilidad y descolgarse.

Van der Haar rápidamente abrió tierra de por medio. Primero, porque tenía fuerzas. Y segundo, porque Klaas Vantornout (Sunweb – Napoleon Games), poco consciente del sufrimiento de su compañero, creaba el caos molestando detrás. Dejando hacer a ciclistas como Jens Adams (VastgoedService – Golden Palace) o Philipp Walsleben (BKCP – Powerplus), permitió que la renta del líder se incrementara hasta los treinta segundos con el ecuador de la cita ya cubierto. Y fue entonces cuando reapareció Mathieu.

Mathieu van der Poel

van der Poel mostró sus credencial a las primeras de cambio / Foto: http://nl.newshub.org/

El escenario cambió de inmediato. Lo que era un grupo que rondaba la decena de unidades quedó rápidamente reducido a la mínima expresión. Van der Poel se llevaba a Vantornout y daba a caza Pauwels en un abrir y cerrar de ojos, provocando al mismo tiempo la reacción de Nys. El Kanibaal, en una continua remontada desde el comienzo, conseguía reintegrarse en el grupo perseguidor junto a David van der Poel (BKCP – Powerplus), pero su aura le iba a costar toda esperanza en repetir la hazaña de un Albert que contemplaba todo desde la zona de boxes. Atemorizado por su presencia, Vantornout volvía a sobreestimar la fuerza de su compañero Pauwels, formando un tapón para que este se fugara con en campeón del mundo en Florencia. Ahí comenzó el camino hacia el milagro del pequeño de los Van der Poel.

Ya solo, y con dos vueltas por delante, aun cedía veinte segundos respecto a Van der Haar, que seguía calcando los tiempos giro tras giro, en una demostración de una tremenda calidad. Un espectro diferente a la genialidad, suerte o virtud reservada a unos elegidos entre los que se encuentra Van der Poel. Sin crispación alguna, sin dar síntomas especialmente evidentes de emplearse a fondo, iba comiendo curva a curva terreno a su compatriota que, atónito, veía desde el retrovisor como al toque de campana su renta se había reducido hasta los cinco segundos.

Van der Haar no se lo creía. Se levantó de su sillín y trató de empujar con toda la fuerza de sus piernas, buscando la explosión de un chico que, pensaba, debía estar al límite de su capacidad. A mitad de la ronda, ya le tenía a rueda. Como si fuera un mal sueño, daba la impresión de que cuanto más se esmeraba, más rápido se aproximaba, y en su cara empezó a relajarse el miedo de quien ha tenido algo en su mano y ve como se le va a escapar. Paró, aceleró, en definitiva, se sumió en la duda ante lo que se imaginaba como su condena. Y ésta llegó en la arena. Con una potencia desmesurada, Van der Poel le atacaba en el primer tramo de ascenso, tensando una cuerda que finalmente se rompió en la segunda. No había respuesta posible ante eso. El chaval entraba en la recta de meta con los demoledores quince metros que deciden toda carrera y clavaba su dardo en la diana a la primera oportunidad. Como Julio César.

Clasificación Gieten:

  1. Mathieu van der Poel (BKCP – Powerplus) en 56:10
  2. Lars van der Haar (Giant – Shimano) a 0:02
  3. Sven Nys (Crelan – AA Drink) a 0:37
  4. David van der Poel (BKCP – Powerplus) a 0:44
  5. Klaas Vantornout (Sunweb – Napoleon Games) a 0:45
  6. Kevin Pauwels (Sunweb – Napoleon Games) a 0:58
  7. Corné van Kessel (Telenet – Fidea) a 1:16
  8. Jim Aernouts (Sunweb – Napoleon Games) a 1:20
  9. Dieter Vanthourenhout (Sunweb – Napoleon Games) a 1:24
  10. Tom Meeusen (Telenet – Fidea) a 1:31

Clasificación Superprestige (1 pruebas de 8):

  1. Mathieu van der Poel (BKCP – Powerplus): 15 puntos
  2. Lars van der Haar (Giant – Shimano): 14 puntos
  3. Sven Nys (Crelan – AA Drink): 13 puntos
  4. David van der Poel (BKCP – Powerplus): 12 puntos
  5. Klaas Vantornout (Sunweb – Napoleon Games): 11 puntos
  6. Kevin Pauwels (Sunweb – Napoleon Games): 10 puntos
  7. Corné van Kessel (Telenet – Fidea): 9 puntos
  8. Jim Aernouts (Sunweb – Napoleon Games): 8 puntos
  9. Dieter Vanthourenhout (Sunweb – Napoleon Games): 7 puntos
  10. Tom Meeusen (Telenet – Fidea): 6 puntos