El Tour 2014 será recordado por mucha cosas. Por la superioridad de Vincenzo Nibali, por los ¿Y si…? tras los abandonos de Cris Froome y Alberto Contador, por el doble podio francés 30 años después…
Pero si hay algo por lo que será recordado en un futuro muy cercano, será por el cambio generacional que ha supuesto la Grand Boucle de este año. La aparición de escaladores, confirmación del nuevo orden en el sprint, nuevos contrarrelojistas, victorias de etapa por gente joven dando una enorme muestra de calidad, y sobretodo, presencia en carrera. Muchas caras nuevas y no tan nuevas que nos muestran que el ciclismo se va regenerando.
En la lucha por la clasificación general, hemos visto hasta a tres jóvenes dentro del Top-10, con un papel destacado de todos ellos. Cada uno ha tenido su momento álgido durante la carrera, con opciones de todos ellos de entrar en el podio. Un podio donde sólo pudo subir finalmente Thibaut Pinot (1990), a la sazón maillot blanco de la carrera. El más regular de los tres, y al que hemos visto siempre en posiciones delanteras de la carrera. Junto a él vimos grandes momentos de Romain Bardet (1990), sobretodo en los Vosgos e incluso Tejay Van Garderen (1988), quien aún debe estar maldiciendo ese mal día en Balés que le alejó del podio final. Sexto y quinto final, respectivamente.
En la suerte del sprint, también hemos visto como la juventud pide paso a gritos. Empezando por la confirmación del nuevo Emperador de la Velocidad, Marcel Kittel (1988), quien este año se ha llevado cuatro etapas, incluyendo el hito de ganar primera y última. Siempre nos quedará saber que hubiese pasado con Mark Cavendish en liza, aunque ya el año pasado el alemán venció en cuatro ocasiones, tres de ellas enfrentándose directamente al británico. Junto a él, otro “viejo” joven, Peter Sagan (1990), maillot verde, aunque con el enorme lunar de no haber podido levantar los brazos, estando muy cerca de hacerlo en varias ocasiones, ya que ha sido Top-5 hasta en nueve ocasiones. Poco consuelo para él.
Otros hombres rápidos con presencia en carrera han sido entre otros, dos “viejos” jóvenes como Arnaud Demare (1991), quien se quedó a las puertas de la victoria tanto en Lille como en Saint-Etienne, así como John Degenkolb (1989), que pese a estar supeditado a Kittel, acabó 2º tanto en Oyonnax como en Bergerac. Junto a ellos, destacable también el Tour de Bryan Coquard (1992), quien estuvo muy bien durante la primera semana de competición.
Dentro del resto de jóvenes que han dado que hablar durante este Tour, destacar a Michal Kwiatkowski (1990), muy activo durante la primera semana de carrera, quizá metido en demasiadas batallas, algo que ha acabado pagando en la última semana, pero demostrando una gran ambición con el objetivo de vestir el amarillo algún día. Dicho objetivo, el de vestir de amarillo, si que lo consiguió Tony Gallopin (1988), exactamente tras la etapa Mulhouse, lo que le permitió portarlo todo un día nacional de Francia. Además, Gallopin redondeó su Tour con la victoria de etapa en Oyonnax. Excelente el Tour del de Lotto – Belisol.
Dentro de los ganadores de etapas, Matteo Trentin (1989) aprovechó la falta de un líder claro en su equipo para imponerse en Nancy a todo un Peter Sagan, volviendo a demostrar ser un gran cazador de etapas. Ramunas Navardauskas (1988), sigue siendo uno de los corredores más fiables de Garmin – Sharp, metiéndose en los sprints, 3º en Harrogate y París, y logrando una enorme victoria en Bergerac tras vencer un pulso en solitario al grupo de sprinters, demostrando sus grandes cualidades en terrenos pestosos. Y si hablamos de vencedores de etapas, no podemos olvidarnos de Rafal Majka (1989), quien se quejaba de venir al Tour tras correr el Giro, y que ha terminado venciendo dos etapones como Risoul y Saint-Lary Soulan, así como llevándose el maillot de la montaña, siendo uno de los corredores que mejor ha acabado el Tour de Francia.
Como decimos, caras nuevas y no tan nuevas que se van consolidando en la élite mundial, y que mejor lugar para reivindicarse como este Tour de Francia recién concluido.