El Tour de Francia 2014 está siendo sólidamente dominado, hasta el momento, por un Vincenzo Nibali (Astana) que no ha mostrado fisuras en ningún terreno. Pero, detrás de él, escondido tras los más mediáticos Riche Porte (Team Sky) y Alejandro Valverde (Movistar), y obviamente sin la atención por parte del público y prensa local que las esperanzas francesas están recibiendo, Tejay van Garderen acecha a apenas un minuto del tercer puesto provisional, cómodamente situado fuera de los focos de atención mayoritarios.

Una de las razones de que el estadounidense del BMC permanezca en un plano relativamente discreto probablemente sea la falta de solidez en sus resultados a lo largo del año y de su carrera globalmente. Ciclista que empezó a destacar jovencísmo en las filas del HTC – Columbia, fundamentalmente gracias a su tercer puesto en el Critérium du Dauphiné 2010, sin haber cumplido aún los 22, hasta el momento no ha teminado de satisfacer las enormes expectativas creadas en aquel momento.

Foto: © Laurent Brun

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Corredor muy completo, con un nivel casi parejo en contrarreloj y en montaña cuando está en forma, decepcionó en el pasado Tour de Francia cuando más se esperaba de él, llegando de imponerse en el Amgen Tour of California pocas semanas antes y, claro está, con el fantástico 5º puesto logrado en el Tour 2012, en el que logró el maillot blanco de mejor joven. Lejos en la general en 2013, mostró no obstante buen carácter y capacidad para rehacerse con un valiente ataque de lejos en la etapa de Alpe d’Huez que a punto estuvo de darle la victoria parcial.

Su trayectoria irregular a lo largo de la presente campaña ha hecho que no muchos confiasen en él para este Tour de Francia. Empezó bien el año, podio en Omán, que auguraba buenas prestaciones en Paris – Nice, uno de sus objetivos. Sin embargo, allí se vio obligado a abandonar en la primera etapa. Regresó en Catalunya a un gran nivel, venciendo en el final en Valter 2000 a corredores en principio más escaladores y con más cambio de ritmo que él, y finalizando tercero en la general.

Sin embargo, en el reciente Critérium du Dauphiné no dio buenas sensaciones. Arrastrando aún las secuelas de una lesión provocada por caída en Romandía, su imagen cediendo del grupo de favoritos demasiado pronto fue protagonista. Claro que de Dauphiné al Tour de Francia hay tiempo, y Tejay van Garderen parece estar en la posición idónea para mejorar aquel prometedor quinto puesto del año 2012, algo que sería fundamental para reafirmar su progresión cuando está aproximándose a las puertas de la madurez ciclista, cerca de cumplir los 26. Junto a Porte, es el mejor contrarrelojista de los aspirantes al podio, y en forma no es inferior en montaña a casi ninguno. Como siempre, la carretera terminará por dictar sentencia.