Regularidad y crecimiento, dos bases que mantienen el buen hacer de Jesús del Pino (Segurilla, 1990) en su segunda temporada en el campo profesional. Con un rol y peso mayor en las filas del Burgos – BH, el manchego se está confirmado junto a David Belda como líderes de una estructura que mantiene en el ataque su sino en las carreras.

A esta posición llegó tras lograr la única victoria del equipo burgalés en 2013. El final en alto en Faucigny – Glières fue el estreno del palmarés de Jesús del Pino en el Tour des Pays de Savoie. “Fue una escapada numerosa que se hizo de salida y entré a última hora. Fueron pasando los puertos y fui viendo que cada vez nos quedábamos menos y en el último puerto arranque desde abajo y pude llegara meta con medio minuto de ventaja”. Un triunfo que cambió su figura tanto en la carretera como dentro del seno del equipo. “A partir de conseguir una victoria se ve todo con más calma, se abren las expectativas y sobretodo dentro del equipo te afianzas y sumas algo de galones, también es importante”.

Con el propósito de mejorar y crecer en 2014 ha comenzado fuerte la temporada. Se infiltró en la escapada del Trofeo Serra de Tramuntana logrando finalizar en séptima posición sumando los premios de la montaña y la combatividad. Un resultado que a Jesús del Pino le ayudó para las sucesivas competiciones. “Afrontas las carreras con muchas ganas. Ves que el trabajo del invierno ha sido bueno y que año a año vas evolucionando y mejorando” afirma el corredor del Burgos – BH que tras Mallorca cruzó el charco para competir en México, una prueba donde la altura y la falta de aclimatación pasó factura. “Fue precipitado. Llegamos prácticamente un día antes de comenzar y pronto comenzaron las etapas de montaña; 2.000 – 2.500 metros e incluso una finalizamos a 3.000 metros. A David Belda no le afectó mucho y se pudo meter en varias etapas entre los mejores y en la general finalizó en top6 así que contentos” sentencia sobre la actuación en la Vuelta a México donde él concluyó en vigésimo quinta posición.

De regreso a España tiempo para recuperar y entrenar sin que el calendario español les diese oportunidad de enlazar competiciones hasta la disputa del Gran Premio Miguel Indurain donde se encontró con buenas sensaciones. “Venimos de tres semanas parados una vez acabada la Vuelta a México y descansar después de estar allí en altitud que me afectó un poquito y he tenido la oportunidad de recuperar”. Así en Estella logró ser decimosexto ante el dominio de los equipos World Tour -trece corredores entre los veinte primeros- siendo el mejor corredor del Burgos – BH junto a David Belda. Al día siguiente en La Rioja, territorio para sprinters, entró con el mismo tiempo que el vencedor mientras que en Amorebieta finalizó dentro del grupo que luchó por la cuarta plaza.

Jesús del Pino en antes de la salida del GP Indurain. Foto © cobblesandhills.com

Jesús del Pino en antes de la salida del GP Indurain. Foto © cobblesandhills.com

Actuaciones destacadas para cumplir con parte del propósito del año. “Mi objetivo es hacer la primavera de competiciones españolas y sobretodo verano. El Tour de Qhingai Lake, Vuelta a Portugal y Vuelta a Burgos. Es un reto de dos meses donde creo que lo podemos hacer bien”. Y es que la temporada estival es la fecha en el calendario que más competiciones suman y más nivel acumulan. “En dos meses corremos 40 días de competición” afirma un corredor que volverá a tener en las pruebas de China el cierre del ejercicio. Pero antes gozará de otras oportunidades en el suelo europeo con la disputa del Tour du Loir et Cher e Provost, la Vuelta a Asturias o la Vuelta a Castilla y León, tres pruebas para seguir creciendo.