Comentábamos allá por el mes de septiembre, a modo de introducción inicial, el escaso movimiento que los despachos de los grandes equipos de ciclocross habían tenido durante el periodo estival, el cuál la mayoría de los mánagers quisieron tomárselo con idéntica calma que sus pupilos. Un par de promesas con nuevos colores y un puñado de corredores saliendo por la puerta de atrás era el escaso bagaje que había dejado el mercado veraniego del profesionalizado ‘veldrijden’. No obstante, la cercanía al fin de año ha revitalizado el tráfico de corredores que han decidido -o se han visto obligados- a cambiar de aires, lo que mudará la parrilla por completo. Muy a mejor.

Y es que durante estos meses se ha confirmado un secreto a voces que ha superado todas las expectativas: la entrada de VastGoedService como nuevo conjunto que aumentará el espectro de colores de las campas… y las carreteras belgas. Lo que inicialmente sonaba como un patrocinador privado para Rob Peeters -su fichaje estrella de cara al invierno-, fue una bola de nieve que no hizo sino aumentar hasta confirmarse su inscripción en la federación belga como escuadra continental y la llegada de nombres para complementar ambos calendarios y cubrir, en cierto modo, el vacío dejado por Crelan-Euphony -y su álter ego de barro, Crelan-KDL Trans- en el ciclismo flamenco. De este modo, a medida que transcurrían las semanas se añadían al de Geel nombres como los de Jens y Joeri Adams, listos para comenzar de inmediato; los aún juniors Yannick Peeters y Jelle Schuermans que no echarán a rodar con el equipos hasta el próximo septiembre y, sobre todo, el de Wout van Aert. La gran esperanza belga rompía todos los esquemas de Hans van Kastener -quien había iniciado una profunda reestructuración de Telenet-Fidea en torno al prometedor joven- al anunciar su marcha a la escuadra de moda a consecuencia de desavenencias con el nuevo entrenador telefónico. En cualquier caso, habrá que esperar hasta la siguiente temporada para ver alejarse a Van Aert del equipo en el que había estado toda su vida.

Estas serán las últimas carreras en las que veamos a Peeters con ese atuendo / Foto: Telenet-Fidea

Pero además, la llegada de la empresa inmobiliaria no ha sido la única sorpresa positiva en el registro de la UCI, en el que a partir del primero de enero figuraran cinco equipos de ciclocross. El empuje de dos patrocinadores ambiciosos como Kwadro y Stannah ha dado luz verde a un proyecto al que se suma Julien Taramarcaz como nueva punta de lanza extranjera para el equipo, así como otros cinco corredores belgas -Joeri Hofman, Diether, Laurens y Hendrik Sweeck, además del campeón nacional en categoría élite sin contrato, Kevin Cant- que llegan al equipo con una doble, sino triple intención: conseguir una económica licencia continental belga, plegarse a las exigencias de unos patrocinadores que querían más presencia dentro del país y, en cierta medida, alejarse de forma pública del los hermanos Roodhooft -directores de BKCP-Powerplus-, impulsores iniciales de un equipo que pretendía atraer el talento foráneo a competir en Bélgica, para lo que también han cambiado a Adrie van der Poel por Marc Herremans.

Un distanciamiento que no debería preocupar en exceso a los directivos del equipo de Niels Albert, que como novedad para Baal contarán ya definitivamente con la gran estrella en ciernes del ciclocross mundial -Mathieu van der Poel-, promocionado al fin desde el equipo de formación de BKCP-Powerplus. La consecución del título mundial en Florencia no cegó ni cambió las prioridades del ‘sobrinísimo’, que ha ligado su futuro al invierno para los siguientes cuatro años. Serán Vincent Baestaens y él quienes tengan que cubrir las plazas vacantes dejadas por los hermanos Michael y Dieter Vanthourenhout, respectivamente, quienes ponen rumbo a ‘chez-Mettepenningen‘ como apuesta de futuro y hombre de equipo que sirva como apoyo a las dos estrellas blanquirrojas. Dos apuestas lógicas que chocan de frente con la sorprendente incorporación de un contrarrelojista y antiguo ‘pistard’ como Dominique Cornu a sus filas, para que actúe como líder de la escuadra en sus contadas y para nada prioritarias incursiones en la carretera.

Cambios en todas las estructuras que también afectan, por supuesto, a Telenet-Fidea. El que fuera otrora el plantel más potente del panorama internacional, ve como cada movimiento resulta un palo más duro que el anterior para la estructura, que para cubrir las dos importantes bajas que han puesto pies en polvorosa bajo el amparo de Johan Verstrepen se han tenido que conformar con dos hombres de perfil medio, aunque con cierto margen de mejora como son los neerlandeses Niels Wubben y Thijs van Amerongen -quien no obstante concluirá la campaña con AA Drink-.

En cualquier caso, fuera de los equipos continentales las novedades han sido más bien escasas, y residían mayormente en la situación en que quedaría Sven Nys -y su íntimo amigo Sven Vanthourenhout- tras el abandono del patrocinador bancario del ciclismo profesional. Dudas que fueron cercenadas poco después por el mánager de la entidad financiera, que aseguró seguir patrocinando a ambos, sabedor del infinito rédito que supone en ‘Kanibaal’ en términos publicitarios. Detalle del que también Trek se ha dado cuenta al unir su bicicleta al rodar del corredor de Baal, que abandona su Colnago tras una trayectoria deportiva completa unido a ella. De esta manera, quedan escindidos definitivamente de KDL Trans, quien aún así seguirá patrocinando a Micki van Empel y Bart Verschueren.

Sin duda, dos afortunados, ya que todo este baile de piezas también ha dejado varios damnificados, especialmente por parte francesa. Tanto Quentin Jauregi como Arnaud Jouffroy se despiden por la puerta de atrás del ciclocross belga y, en el caso de doble campeón mundial, también del ciclismo. Decepcionado con el rendimiento desempeñado en los últimos tiempos y por la falta de ofertas de garantías sobre su mesa, el ciclista de Senlis ha decidido colgar la bicicleta, del mismo modo que hará Davy Commeyne el próximo 30 de diciembre en Loenhout.