Cuatro años después del proyecto Andorra-Grandvalira, Domènec Carbonell regresa a la primera plana del ciclismo de la mano del Team Ecuador. La formación sudamericana, primer equipo profesional de la historia del ciclismo ecuatoriano, salta al pelotón bajo la dirección del manager catalán y de Melcior Mauri motivado por “la inquietud de la gente de allí para crecer y hacerlo de una manera organizada” con el apoyo de la Federación de Ecuador. “En principio el auspicio es público pero se está trabajando mucho para que entre el sector privado; de momento están receptivos, están por la labor”, según relata Domènec Carbonell.

El Team Ecuador nace con un objetivo claro. “Quieren dar ese paso de calidad, mirar de mejorar a nivel técnico porque fuerza y poderío físico tienen, ahí no hay problema, pero técnicamente tienen carencias que se pulirán con los técnicos de aquí, con preparadores físicos, sistemas de entrenamiento y material, ya que allí tienen pero no se le da un uso adecuado”.

En cuanto al calendario trabajan con una base mixta dividiendo los días de competición entre América y Europa, donde se encuentran con dos situaciones totalmente diferentes. “Se baraja unos setenta días de competición en América y unos sesenta días de competición en Europa con todo tipo de pruebas. Ahora la lucha para conseguir pruebas en América va a ser más o menos fácil, porque nos esperan en todos los sitios, pero en Europa nos tenemos que hacer con un sitio para ir ganando calendario. Espero que con ocho españoles en nuestras filas nos hagan un hueco en el calendario español; de lo contrario será una decepción para mí”.

Una plantilla de diecinueve corredores

El equipo técnico del Team Ecuador tiene diseñada las líneas generales de una plantilla que en su estreno en competición estará compuesta por diecinueve corredores tal y como confirma Domènec Carbonell. “La estructura la forman diecinueve corredores de los cuales once son ecuatorianos y ocho de España que irán entrando progresivamente. En principio entra un bloque con quince o dieciséis corredores que se enviará a la UCI y después se incorporarán los especialistas. Nosotros apostamos por ruta y por pista, por eso está Jaume Mas en el proyecto; hay que intentar hacer una buena cuarteta”.

De momento van cumpliendo los pasos exigidos por la UCI. “Ya hemos pagado la tasa de la UCI y a partir de ahí vamos a cerrar el tema de incorporaciones tanto de Ecuador como España”. Para ello trabajan con una línea clara. “Se está buscando montar un grupo polivalente, que se complemente en todos sus aspectos, corredores que tienen una experiencia contrastada con jóvenes; de los diecinueve, siete o ocho serán sub23, está por ver” asiente el manager catalán que cuenta con Jordi Simón, Higinio Fernández y Jaume Roviera como primeros corredores firmados tal y como adelantó ayer Biciciclismo.

Higinio Fernández firmó el regreso al campo profesional. © Team Ecuador

Higinio Fernández firmó el regreso al campo profesional. © Team Ecuador

En cuanto a los ciclistas ecuatorianos la base será el equipo RPM. “Como el club que ha hecho paso es el RPM la gran mayoría de corredores proceden de este equipo. El equipo continental será una ampliación del RPM y será también la base para la selección de Ecuador en los eventos que sea necesarios como por ejemplo el Mundial o como pueden ser las Olimpiadas o las pruebas sub23”. Los prometedores Richard Carapaz -campeón panamericano sub23- y Marcelo Paspuesan, Jorge Luis Montenegro y José Carlos Ragonessi son algunos de los nombres que darían continuidad al RPM.

También ansían firmar a Byrom Guamá con el que mantienen abiertas las negociaciones para incorporarse al Team Ecuador. “Manifesté que no podía concebir el primer equipo continental UCI de Ecuador sin un corredor que podemos decir que es el mejor corredor ecuatoriano que hay hoy en día. Para mí sería inconcebible”, sentencia el manager catalán.

La problemática continental en España

El Team Ecuador no es una vía de salvación para el ciclismo español, una circunstancia que puntualiza Domènec Carbonell. “Se ha dado la casualidad de que el encargo se le ha hecho a una persona del país, pero se podían haber ido a otro país como Portugal, Francia o Italia. Ellos no vienen a salvar la situación del ciclismo español pero se da la casualidad de que por idioma, evidentemente, es más fácil que sea aquí que en otro sitio. La intención del proyecto no es de venir a salvar nada, no es nuestra tarea; lo que sí que es verdad es que ante la necesidad evidente de cubrir plazas he optado en estos momentos por coger a corredores españoles pero no tenía por qué; podría haber cogido franceses y estar instalado aquí. Con esto quiero decir que pongo mi granito de arena para ver si podemos tirar para delante. Si la normativa continental fuera otra irían las cosas por otro camino”.

Una normativa española que en palabras del manager catalán perjudica la creación de nuevos proyectos en la tercera categoría del ciclismo mundial. “La normativa UCI es internacional y es para todo el mundo, la UCI deja con esa normativa que cada Federación la maneje como quiera y en España hemos ido a un nivel de exigencia tan alto que difícilmente van a salir equipos porque no compensa y por el calendario que les pueden ofrecer. Un equipo continental en España se tiene que ir a Francia a buscarse la vida para poder competir. No hay unos servicios, unas prestaciones que vayan acorde al esfuerzo que hace el equipo para salir”.

¿Cuál puede ser la solución? Domènec Carbonell concibe “hacer una reestructuración de esa normativa adaptándola más a la realidad en la que vivimos. Hay una crisis galopante y reunir 600.000 euros de presupuesto para correr seis carreras en España es normal que no compense a nadie. Otros países como pueden ser Bélgica, Países Bajos, Estados Unidos o Japón están sacando trece o catorce equipos. ¿Por qué? Porque la normativa que aplican es la que marca la UCI y cumplen perfectamente con esos estándares mínimos que no dejan de ser la realidad de un equipo Continental”. Pero también existe un problema de concebir una categoría que no se sabe exactamente la figura que representa. “Un equipo Continental para mi, y supongo que para mucha gente, es un equipo de formación, un equipo que está entre lo amateur y el profesional. Aquí está mal entendido, yo creo, lo que es un equipo continental; ahí radica, a mi parecer, el problema que tenemos”.

Pero además de la problemática económica en España la escasez de calendario .2 es un lastre para una categoría que apuntaba en 2014 a poder disputar pruebas élite, una medida que el manager catalán no cree que sea una solución. “No creo que se gane nada dejando correr carreras de 2.12 con equipos continentales con equipos amateur porque la diferencia sería mayor, sería un agravio en cuanto a estructura y corredores que impediría que el campo amateur pudiera florecer”.