El ganador del Tour del Porvenir en 2008 ha logrado por fin explotar y estrenarse con sus primeras victorias como profesional. Y lo hizo a lo grande, en el mejor escenario posible, en el Tour de Francia levantó por primera vez los brazos y se enfundó el maillot amarillo. Una victoria fiel a su estilo, corriendo de un modo agresivo y valiente, de la misma forma que logró el Tour del Porvenir.
El belga ha dado el paso adelante en el momento clave de su carrera. Tras seis temporadas como profesional, y cuatro en World Tour, acababa su relación con Radioshack-Leopard a final de temporada, por lo que necesitaba hacer una buena campaña para lograr un buen contrato para la próxima. Llegó a junio sin haber podido lucirse, pero a partir de ahí comenzó la segunda parte de la temporada avisando. Fue 4º en el GP Gippingen, 3º en Luxemburgo y 3º en el Campeonato Nacional belga, unos resultados ya habituales en su historial, siempre estando cerca de la victoria pero sin llegar a ella.
Sin embargo en la 2ª etapa del Tour con el final en Ajaccio, -la que parecía hecha para que Peter Sagan se enfundara el maillot amarillo- logró sorprender al pelotón y en un final agónico manteniendo unos pocos segundos de ventaja alzó los brazos por primera vez. Una primera victoria como profesional en el Tour de Francia es algo de lo que muy pocos pueden presumir, además con el plus de vestir de amarillo al día siguiente. Su Tour no acabó ahí, y es que estuvo cerca de lograr una segunda victoria, tanto el día de Lyon (12º) como sobre todo en Le Grand Bornand (3º) cogió la fuga buena y estuvo luchando por el doblete. A pesar del desgaste por meterse continuamente en fugas, fue 18º en la General, mejor incluso que el propio líder del equipo, Andy Schleck. El talento del belga fue lo que salvó a Radioshack de un Tour desastroso.
Tras el Tour ha seguido demostrando un nivel altísimo siendo 12º en San Sebastián, 15º en Québec, 10º en Montreal o 7º en el Tour de Pekín además de lograr otra victoria en un cara a cara contra uno de los grandes, y es que batió a Thomas Voeckler en la meta de Wallonie.
Muchos equipos se interesaron en él, pero fue el equipo de Alonso el que se aseguró su contratación. Pero tras los problemas a la hora de formar el equipo, Bakelants puso rumbo al Omega Pharma-Quick Step. Con los belgas tendrá mucha libertad a la hora de disputar generales, tanto de Grandes Vueltas como sobre todo de Vueltas de una semana. Además tendrá cierta libertad en las clásicas. Y es que Jan Bakelants es uno de esos corredores todoterreno, buen contrarrelojista, buen escalador, explosivo, se mueve bien sobre adoquines y ante todo agresivo y combativo. En 2014 habrá que estar muy atentos a él y ver hacia dónde focaliza su carrera deportiva. Con 27 años se encuentra en su plenitud deportiva y tiene cualidades para triunfar en todo tipo de carreras.