Pocas dudas se pueden tener con la elección de Chris Froome como mejor corredor de 2013. El incontestable triunfo en el Tour de Francia como eje central de un magnífico año emerge en un palmarés donde sobresale el excelente camino hacía la gran prueba francesa que recuerda a la campaña 2012 de Bradley Wiggins.

Desde el comienzo de temporada en el Tour de Oman donde ya demostró estar a un gran nivel con su segundo puesto en el final en el Green Mountain a la que acompañó la victoria de etapa al día siguiente y el consiguiente triunfo en la clasificación general. Dos semanas más tarde dio inicio a la competición en Europa en la Tirreno-Adriático donde no dio opciones en el final en alto de Prati di Tivo. Cuando todo parecía encarrilado hacía la victoria final, el fantástico días de ciclismo en Porto Sant´Elpidio truncó sus opciones de triunfo finalizando segundo en la clasificación general. Única derrota destacada de la temporada.

A finales de marzo tomó el Critérium Internacional al no encontrar rival en la ascensión al Col de l´Ospedale adjudicándose la última etapa y la clasificación general. Tras un mes parado, regresó en La Doyenne -trigésimo sexto- retomando el camino del éxito en Romandia donde se impuso en el prólogo conservando el liderato hasta la última contrarreloj; para entonces ya había sentenciado la clasificación general en Les Diablerets donde cedió el triunfo a Simon Spilak. Tras otro mes de concentración en altura, el Dauphiné mostró las cartas a veinte días del comienzo del Tour de Francia. El buen rendimiento en la contrarreloj -tercero- estuvo unido a una clara superioridad en la montaña donde conquistó el triunfo en Valmorel y el segundo puesto en Risoul donde sólo el escapado Alessandro De Marchi llegó antes a la cima alpina.

Así llegó al Tour de Francia. El favoritismo de Chris Froome quedó manifestado en la primera oportunidad que tuvo. El comienzo de la montaña con el final en Ax-3-Domaines dejó patente la superioridad del británico frente al resto de sus adversarios. Finalizado el bloque pirenaico y la contrarreloj larga de Mont-Saint-Michel aventajaba en más de tres minutos al segundo clasificado. Con el susto en Saint-Amand-Monrond llegó al Mont Ventoux donde dejó prácticamente sentenciada la carrera. Antes de los Alpes, se anotó también la sinuosa contrarreloj de Chorges. Cedió terreno en Alpe D´Huez y Le Semnoz donde demostró ser humano pero, aún así, acabo venciendo en París con más de cinco minutos sobre el segundo y tercer clasificado.

Froome

Conquistado el objetivo de la temporada, el último tercio de la campaña fue un paseo para Chris Froome. Disputó el USA Pro Challenge y las dos pruebas canadienses del World Tour antes de formar parte de Sky Procycling en la contrarreloj por equipos del Mundial de la Toscana accediendo a al tercer peldaño del cajón. Finalizó el año retirándose de la prueba en línea del Mundial. Seis meses bastaron para ser el mejor del año.