Para Unipublic es una premisa de cada año mantener al rojo vivo la clasificación general de la Vuelta a España hasta la última semana de carrera. Este año y ante la falta de un claro favorito para la victoria, la lucha por el podio y por el maillot rojo vuelve a estar muy apretada. Dos parecen ser los ciclistas que se jugarán hoy en el Angliru el trono de campeón de la Vuelta a España 2013.
A Chris Horner y a sus 41 años de edad se le plantea una situación de carrera idónea. Se ha mostrado como el corredor más fuerte en las tres semanas de Vuelta a España y además viste el maillot rojo, que como se suele decir siempre da alas. Aventaja a Vincenzo Nibali en tan solo tres segundos, tres segundos que pueden parecer poco, sin embargo la debilidad mostrada por Lo Squalo la última semana de carrera, hacen parecer la ventaja todo un mundo para el siciliano.
El golpe de efecto que ha dado a la carrera el americano se antoja casi definitivo en la lucha por el maillot rojo de la Vuelta. Hoy día y visto lo visto hasta la llegada del temido Angliru, es una locura pensar que mañana el corredor americano sufra una pájara que le haga perder la Vuelta a España. Pero es aquí donde entran otros factores determinantes en una gran vuelta, que pueden hacer mella en cualquiera de los ciclistas que están peleando el rojo y un puesto en el podio de la carrera. El cansancio, la altitud, el clima y el desconocimiento del terreno, serán para muchos un inconveniente. Para Chris Horner, por ejemplo, será la primera vez que ascienda l’Angliru en carrera.
Vincenzo Nibali ya conoce la ascensión de primera mano, y es que ya lo sufrió en sus propias carnes en el año 2011, cuando Juanjo Cobo dejara casi sentenciada la Vuelta a España. El punto débil del italiano es que parece llegar muy justo a este final de la Vuelta. No era de extrañar antes del comienzo de la misma, y es que después de ganar el Giro de Italia, él mismo venía con dudas de cómo podría terminar su segunda gran vuelta de este año.
La lucha no termina ni mucho menos de la mano de Nibali y Horner, l’Angliru es un puerto en el que siempre se suelen hacer buenas diferencias, y con tan solo 1,06 y 1,57 respectivamente, no se puede descartar a Alejandro Valverde y a Joaquin Rodríguez. A priori, serán los que se jueguen una plaza en el podio. Tampoco sería descabellado ver como Nibali se baja del cajón en detrimento de Valverde y Rodríguez, que parecen llegar mejor a esta resolución de la Vuelta.
Con todos los ingredientes para ver un bonito y ajustado final de carrera, tan solo nos que sentarnos en nuestros sofás para disfrutar de la última ascensión de esta Vuelta a España. Una ascensión a l’Angliru que desde 1999, aquella en la que el “Chava” Jiménez nos dejó aquellas míticas imágenes venciendo entre la niebla, se ha convertido en toda una religión en el mundo del ciclismo.
A ver si aguanta el tiempo.
Ahora mismo está cubierto y “orbayando” por momentos en las proximidades.