Si bien el Tour cambió el sistema de puntuación en el maillot de ‘topos’ rojos para que el ganador final, este año Nairo Quintana, fuera uno de los que se jugaba la general, la Vuelta sigue con la invitación a ‘actores secundarios’ para que se dejen ver y luchen por el maillot de la montaña de la ronda española. En la pasada edición fue Simon Clarke, que con una victoria de etapa en Valdezcaray y una intención conseguida de ir siempre delante, atacando y buscando fugas, consiguió un trofeo que antes había conseguido cuatro veces consecutivas David Moncutie. El aussie pasó primero por Valdezcaray, Vilaesteva, O Lago, Folgueiras de Aigas, Morcuera, Canencia y Navafría, es decir, acertó cogiendo la fugas correctas en los días importantes (los que tenía más encadenados).
Esta manera de correr es la que deben asumir los que quieran suceder a Simon Clarke, porque en una carrera con tantos finales en alto los de la general estarán siempre al acecho y totalmente por inercia. Durante los primeros días de carrera, quien quiera optar al maillot de puntos morados deberá ir sumando puntos prestando especial a atención a las etapas con final en Hazallanas (previo paso por Monachil) y Castelldefells (previo paso por el Rat Penat). La lucha por la montaña se pondrá mucho más interesante en los días sucesivos al final en Castelldefells, ya que los finales en La Gallina y Peyragudes tienen 2 ‘segundas’, 2 ‘primeras’ y un puerto de categoría Especial antes de subir hasta meta.
Tal es la cantidad de puntos que el hecho de coger estas fugas será imprescindible si uno quiere conseguir en Madrid ser el mejor escalador de la Vuelta de 2013. Porque luego sí es cierto que quedan puntos por distribuir (varios ‘segundas’, ‘terceras’ y el Cordal), pero casi todo quedará para los de la general si no llegan las fugas a Formigal, Peña Cabarga, El Naranco y l’Angliru.
Esta es posiblemente la clasificación más difícil de discernir, pues por ella luchan corredores que a veces es complicado elegir antes del inicio de la carrera. Pero siendo una cuestión de corredores secundarios, también lo será de equipos que no luchen, por ejemplo, por la general con sus líderes. Aunque quien sabe, porque Euskaltel – Euskadi con Mikel Landa, Igor Antón y Mikel Nieve podrían optar a llevarse el trofeo. También otros hombres que podrían optar tras no verse con los mejores en la general, por el cansancio acumulado de la temporada, por ejemplo, como Rigo Urán, Dan Martin, Laurens Ten Dam o Domenico Pozzovivo. Pero esto es entrar en cábalas nada recomendables, porque lo lógico es que estos apuesten por otros objetivos.
Simon Clarke, David Arroyo, Amets Txurruka, Jan Barta, Oliver Zaugg, Johnny Hoogerland, Serge Pauwels, Kevin De Weert, Jelle Vanendert o Juanma Garate parecen nombres que cumplen a la perfección con el perfil de corredor que podría luchar por la clasificación de la montaña. Y no solo éstos, porque también habrá que tener en cuentan a jóvenes con ganas de dejarse ver como Yannick Eijssen, David De la Cruz, el trío de FDJ (Elissonde, Pinot y Geniez) o Warren Barguil.