Favoritos a la victoria en el velódromo de Roubaix

Fabian Cancellara (Team Leopard)

Vigente campeón y principal favorito, una vez más, una carrera más. Se vió su lado humano en los muros de De Ronde, pero aquí no los hay, solo piedras y kilometros llanos para apretar el botón de destruir pelotones. Ya ha declarado que en Flandes la gente corrió a hacerle perder, y sabe que el domingo ocurrirá otro tanto. No será fácil, pero apuntar a cualquier otro como rueda a vigilar es una locura. Su otra debilidad en el Monumento anterior estuvo en el desempeño de su equipo, el Leopard-Trek, recién formado por y para los hermanos Schleck, que no tuvo el potencial necesario para acompañarle con garantías (sólo el joven Klemme pudo echar un cable), y se encontró solo ante el peligro muy lejos de la meta. Si esto vuelve a ocurrir todo será más complicado, pero ¿realmente necesita equipo alguien capaz de rodar en solitario, manteniendo a raya a manadas de bufalos en su persecución? Lo veremos. Y a poder ser, que le suban el agua con sales más rápido esta vez, o el maligno Riis volverá a reir a carcajadas.

Cancellara Paris Roubaix 2006

Juan Antonio Flecha (Sky)

Apoyado en una fe inquebrantable, Flecha quiere Su Monumento. Años lleva optando a un triunfo que bien valdría toda una carrera profesional, porque si algún día vence en el velódromo de Roubaix, la suya no sería un victoria cualquiera. Sería un victoria histórica, de empeño inenarrable, esfuerzo indescriptible, de conquistar fronteras y de tirar barreras. El triunfo de la constancia y el heroismo que supone la victoria de alguien nacido tan lejos de los tramos adoquinados del norte de Francia. Casi más que nunca tendrá un buen equipo a su servicio, encabezado por Thomas, Hunt, Wiggins, Hayman o Arvesen. Merecer, en su sentido más amplio posible, es el verbo que más se ajusta a la carrera de Flecha en Roubaix. Esperamos que los adoquines le hagan justicia.

Thor Hushovd (Garmin – Cervélo)

Thor Hushovd en particular y el Garmin – Cervelo en general ha de reconciliarse con las piedras tras el bochornoso momento vivido desde el coche del director del equipo Jonathan Vaughters durante el Tour de Flandes en el que ordenaba a sus ciclistas no ayudar en la persecución a Cancellara y pelear por un teórico 3º puesto. El actual campeón del mundo debe ir a por la victoria sin excusas. En los dos últimos años con Cervélo, el noruego ha sido tercero y segundo en el Velódromo, este año debe dar un paso más y conseguir llevarse la victoria final. Para ello, su equipo debe funcionar como lo que es, un equipo.

Tom Boonen (Quick Step)

Tommeke llega herido. El absurdo movimiento táctico en De Ronde anterior al Leberg, donde no pudo seguir a Cancellara, puso en bandeja el triunfo al suizo, y sólo por una inexplicable combinación de astros acabó llegando a 2km de meta en el grupo que se jugaría la carrera tras haber sufrido mucho en el Muur y el Bosberg; se le volvió a escapar el tren y no peleó por la victoria. Quedó claro que no llegaba en plenitud de condiciones, por lo que aunque haya mejorado, para este domingo -más aún tras sus dos caídas en el Scheldeprijs- tampoco estará al 100%. La capcidad de su equipo estará supeditada a la presencia de Sylvain Chavanel, que tras su exceptional Vuelta a Flandes puede ser un arma que Quick Step utilice en favor del campeón flamenco, ya que salvo Steegmans el resto del equipo no parece tener potencial a día de hoy para ser un buen soporte de su jefe de filas. Las exhibiciones en solitario parece que quedan lejos, por lo menos para esta temporada y tendrá que luchar por llegar a meta en un grupo reducido donde explotar su punta de velocidad. Ante él la oportunidad de igualar a De Vlaeminck con cuatro victorias y entrar en la leyenda.

Alessandro Ballan (BMC)

Tras mostrar un buen rendimiento en el Tour de Flandes con un inteligente y buen ataque en el Kapelmuur siguiendo a Gilbert, llega Alessandro Ballan a la París – Roubaix dispuesto a conseguir volver a ser alguien temible en las clásicas de primavera. No se le da mal la prueba al italiano, puesto que ya acumula 2 terceros puestos en 2006 y 2008, pero hay otros corredores mejores que él en el pavé y más rápidos que él en un teórico sprint, así que tendrá que intentarlo desde lejos para conseguir un triunfo que necesita para recuperar unas sensaciones que no encuentra desde 2008.

Outsiders

Filippo Pozzato (Katusha)

Nos queda poco que decir de Pipo. Calidad le sobra, actitud le falta. Esta temporada en las piedras está siendo cuanto menos ridícula. Tras su buena Milán – San Remo (5º), esperábamos mucho más de él, pero no se le ha visto desde entonces. Este domingo tiene una nueva revalida en una prueba en la que ya subió al pódium en 2009 (2º), veremos su actitud si se involucra en la carrera (difícil), si se suelda a la rueda de Cancellara o Boonen (probable) o si al menor contratiempo, desconecta y se baja de la bici (posible).

George Hincapie (BMC)

El eterno Top10, ya que hasta siete -aunque ha estado lejos de él los dos últimos años- son los que colecciona el ex-campeón estadounidense. París-Roubaix es la carrera que siempre le ha fascinado, la que le ha quitado el sueño desde antes de descubrirla. En su plenitud siempre fue una pieza extraña en el equipo de Bruyneel, que tenía metas muy distintas a las suyas. Ahora cuando se acerca su ocaso -cumplira trentayocho años en Junio- está en un equipo hecho para las clásicas de piedras donde no parece ser el jefe de filas, pero viendo que De Ronde fue para otro outsider como Nuyens, ¿por qué no pensar en él?

Geraint Thomas (Sky)

Sin lugar a dudas la sorpresa agradable de esta temporada de piedras. Tras el 2º lugar en A Través de Flandes, el pasado fin de semana consiguió un meritorio 10º puesto en el Tour de Flandes llegando en el grupo de los elegidos. Paris – Roubaix es una carrera que posiblemente le venga mucho mejor que la flamenca. El año pasado ya pudimos verlo por algunos tramos en la etapa del Tour de Francia que acabó en Aremberg donde sólo fue superado por Hushovd. Veremos si tiene libertad de movimientos o si tendrá que ayudar a Flecha. Apostamos por lo primero.

Björn Leukemans (Vacansoleil)

Nunca ha estado realmente cerca de la victoria, el corredor de Vacansoleil, en el segundo domingo de abril. En 2007 estuvo en el corte bueno, aunque la definición táctica de la carrera le dejó a casi un minuto del vencedor final, Stuart O´Grady, y a un puesto del cajón, que ocuparon también Flecha y Wesemann. Dos puestos más atrás, en el 6º lugar, quedó el pasado año, cuando estuvo aún más lejos de la victoria y del podium. En cualquier caso, es un corredor veterano, con muchos kilómetros en todo tipo de clásicas, y parece estar en forma. Justificaría su presencia en carrera otro gran momento en carrera como el de 2010, cuando mandó a vainas al bisonte de Cancellara en medio de un tramo adoquinado.

Heinrich Haussler (Garmin – Cervélo)

De Ronde no ha despejado la incógnita del potente ciclista alemán. Haussler no ha estado entre los elegidos en los monumentos de la temporada, y en San Remo mostró mejor nivel que en el adoquín de Flandes, pero si consigue dar el paso adelante y llegar con los favoritos al velódromo de Roubaix, sigue siendo una baza tremenda. Otra más de Garmin-Cervelo, tantas tiene, que parece que al final se anulan entre ellas… o lo hace su director, Jonathan Vaughters. ¿También habrá cámaras dentro los coches en la Paris-Roubaix?