El ciclismo tiene lugares míticos. Y sin duda uno de ellos es el velódromo de Roubaix. Allí donde hace medio año Tom Boonen ganaba su cuarta Paris-Roubaix e igualaba a un mito como Roger De Vlaeminck (quien por cierto en su palmarés tiene un Mundial de ciclocross) volvía esta tarde, tras dos temporadas ausente debido a las rotaciones entre las sedes francesas, la Copa del Mundo de ciclocross. Y allí, en línea de salida había un corredor que iba a tomar parte de las dos citas, Steve Chainel, 16º en abril y 18º en el día de hoy. El resultado final el maillot belga entrando victorioso.

photo: sporza.be

La prueba, como de costumbre, ha empezado con Lars van der Haar siendo el mejor en la salida, junto a un recuperado Tom Meeusen que se ponía en cabeza para redimirse de un inicio de año bastante aciago y silenciar algunas críticas hacia su figura que han surgido durante estos meses. Pero la gran sorpresa era que Albert salía bien y desde el primer momento se situaba en cabeza… bastante mejor que Nys que alrededor de la duodécima posición veía cómo llegar hasta las primeras posiciones sería un trabajo exigente. En cabeza, como presagio de lo que íbamos a vivir, estaba el campeón suizo Julien Taramarcaz distanciado a 10”.

Viendo a su verdugo en el mes de noviembre retrasado Albert se ponía manos a la obra y aumentaba el ritmo para hacer que el campeón belga tuviese que hacer un sobreesfuerzo para alcanzarle. Kevin Pauwels aguantaba sin problema el ritmo del campeón del mundo, algo que costaba bastante más a los jóvenes van der Haar y Meeusen que, especialmente en el caso del belga, únicamente cuando se llegaba al Velódromo, Albert levantaba el pie y Taramarcaz se ponía a comandar contactaba con el grupo.

Albert veía que Nys se acercaba a 10” y aumentaba un punto más el ritmo haciendo que Tom Meeusen acabase por descolgarse como había hecho Lars van der Haar momentos antes. Pero el Kanibaal van Baal si una cosa tiene son nervios de acero forjados en mil batallas y a base de constancia iba superando rivales hasta que una vez liderando el grupo perseguidor hacía sonar su corneta avisando a Niels Albert que iba a por él. Albert aumentaba también el ritmo, pero en ese paso por el mágico anillo la noticia era que Klaas Vantornout, bicicleta al hombro, perdía toda opción de seguir bien situado en la general.

Poco a poco Nys iba reduciendo las distancias, a pesar de que en cada una de las vueltas sufría para trazar el segundo de los descensos de las laderas que se incluían en las laderas; bordaba el primero, pero acometía con inusual inseguridad la segunda, por lo que su llegada al grupo cabecero, con Tom Meeusen a su rueda, reacio a dejar pasar una oportunidad como la que se le presentaba, se demoraba algo más de lo esperado. Pero una vez más allí estaba Nys, dispuesto a demostrar que ésta tiene que volver a ser su temporada.

Con la llegada del maillot trikleur a cabeza de carrera se producía un parón que Meeusen y Taramarcaz aprovechaban para jugar sus cartas; tras mucho tiempo los tres grandes dominadores (a jornada completa) del ciclocross volvían a encontrarse, por lo que el marcaje entre ellos podía darles opciones. Pero el grote drie no estaba por la labor de dejar escapar una victoria de nivel en la Copa del Mundo y no les daban opción, generando un parón en cabeza que hacía que llegasen al grupo cabecero actores secundarios e incluso terciarios como Dieter Vantourenhout, Radomír Šimůnek, Rob Peeters, Lars van der Haar, Twan van den Brand o Bart Aernouts. A falta de cinco vueltas para el final de las doce de las que ha constado la prueba había un grupo de diez ciclistas liderando la carrera. Del que no se tenían noticias tras su extraordinaria actuación en Koksijde era de Francis Mourey.

Demasiados outsiders que veían una gran oportunidad, así que Nys tomaba las riendas del grupo de cabeza para hacer selección. Le han bastado un par de meneos a su tamiz para saber quién sería y quién no sería rival, quedándose con Albert y Pauwels… y Taramarcaz, que sorprendentemente no acusaba el peso de las vueltas anteriores y seguía soldado a la rueda de los belgas. Tras la selección Nys dejaba hacer y era Pauwels el que tomaba la iniciativa por primera vez en la carrera haciendo renacer las ilusiones de muchos aficionados que esperan que el mejor Kevin Pauwels, como el turrón, vuelva a casa por Navidad. Su mando, sin ser nada extraordinario, dejaba claro que el que iba más justo era Albert, a quien durante las últimas semanas las carreras se le habían hecho largas, por lo que Taramarcaz soñaba con su primer podio.

Se llegaba a falta de dos vueltas y el ritmo había bajado sensiblemente, así que el grupo perseguidor volvía a soñar con contactar de nuevo con el cabecero, una situación peligrosa que Nys no quería aceptar bajo ningún concepto, o eso parecía cuando se ponía en cabeza, porque lo cierto es que con el de Baal liderando van der Haar veía cada vez más cerca la rueda trasera de un Albert que sufría cuando Nys daba un pequeño arreón en una ascensión hacia la entrada al Velódromo.

Laatste ronde. Seguían los cuatro juntos y los perseguidores ya no contactarían con ellos. Albert se sabía inferior a Nys y Pauwels, así que en la zona semiurbana que seguía al paso por el Velódromo lanzaba un ataque sostenido que hacía sufrir a Taramarcaz pero que Nys neutralizaba ipso facto. Se llegaba a la zona decisiva y, devolviéndole la jugada que le había hecho en Niel, Nys adelantaba a Albert en el tramo de escaleras y se ponía en primera posición. Ningún problema en los descensos de las laderas y se llegaba a la última ascensión hacia el Velódromo con Nys liderando, Albert y Pauwels a rueda es segunda y tercera posición respectivamente y Taramarcaz un par de metros por detrás.

Y en un colosal demarraje de Nys se decidía la carrera. Llegaba a la zona superior del anillo con una decena de metros de ventaja y volvía a lanzar la bici obligando a Albert a hacerlo para que el hueco no creciese, pero ya sabemos cómo encaja el de Bonheiden los esfuerzos explosivos… la distancia crecía y Pauwels se situaba en segunda posición aunque demasiado lejos del Kannibaal para disputarle la victoria. Se bajaba al Velódromo con las posiciones perfectamente escalonadas que no sufrirían ninguna modificación en meta. Nys, Pauwels, Albert y Taramarcaz, que había cuajado su primera gran carrera en la élite, en un circuito suave sin excesiva complejidad técnica, pero su primera gran carrera en la élite. Aquí el vídeo de la última vuelta.

La Copa del Mundo queda en un pañuelo llegado a su ecuador con Albert en primera posición con 15pts de ventaja sobre Nys y 26 sobre Pauwels. Durante las fiestas navideñas tendremos un total de tres citas, el 23/12 en Namur, el 26/12 ben Zolder y el 06/01 en Roma antes de echar el cierre en Hoogerheide el 20/01.

Clasificación final

1. Sven Nys
2. Kevin Pauwels
3. Niels Albert
4. Julien Taramarcaz
5. Lars van der Haar
6. Radomír Šimůnek
7. Rob Peeters
8. Twan Van den Brand
9. Diether Vanthourenhout
10. Tom Meeusen

Clasificación de la Copa del Mundo (4/8)

1. Niels Albert – 280
2. Sven Nys – 265
3. Kevin Pauwels – 254
4. Klaas Vantornout – 209
5. Lars Van der Haar – 197
6. Bart Aernouts – 196
7. Tom Meeusen – 185
8. Francis Mourey – 180
9. Thijs Van Amerongen – 165
10. Radomír Šimůnek – 183