Hay que reconocer que perder al Philippe Gilbert de 2011 fue un palo para el equipo de nueva creación de Lotto, que junto con Belisol formaron escuadra con André Greipel, Jelle Vanendert y Jurgen Van den Broeck como líderes. Un velocista puro, uno de los mejores del mundo, eso sí, y dos corredores con notables dificultades para rematar cualquier carrera. Al final, rascando victorias de aquí y allá han ido cumpliendo en la temporada, sobre todo de la mano del sprinter alemán, que le ha dado a los de Marc Sergeant nada más y nada menos que 19 triunfos, el que más en todo el año entre los profesionales de todo el calendario mundial.
Bien es cierto que ni Vanendert ni Van den Broeck han dado lo esperado, el primero más decepcionante que el segundo, pero gracias a las victorias de Jurgen Roelandts -en un año con mucha mala suerte para él-, Gianni Meersman, Gaetan Bille y Lars Ytting Bak -en el Giro-, Lotto – Belisol ha conseguido darle continuidad a la gran temporada de André Greipel. Y tiene mérito; el proyecto de los ‘loteros’ aumentaba el espíritu belga del asunto, confiando en más de una tercera parte de la plantilla en corredores locales jóvenes por hacer. El resultado ha sido bueno, pues 27 victorias no son fáciles de conseguir.
Como momentos destacables, sobre todo, el Tour de Francia. 3 victorias de Greipel, demostrando que aunque no es el mejor en su materia puede medirse -es el único que puede hacerlo- de tú a tú con Mark Cavendish, además de cuarto puesto en la general de Van den Broeck. La victoria en el Giro d’Italia, además del GP Fourmies, de Lars Bak o las últimas de Jurgen Roelandts en el Circuito Franco – Belga, por la mala suerte del belga en toda la temporada, son otras buenos momentos del equipo.
El mejor del equipo; André Greipel
Pocas dudas sobre esto. No es la temporada con más triunfos del de Rostock (20 en 2009 y 21 un año después), pero sin ningún debate posible sí es su mejor temporada, consiguiendo ganar de enero a septiembre -salvo en marzo- asumiendo la responsabilidad de Lotto – Belisol. Sus compañeros han trabajado para él en todo momento, demostrando en todo un Tour de Francia que la confianza era pertinente. Greipel respondió con tres victorias en Rouen, Saint-Quentin y Cap d’Agde. Tres victorias de calidad, sobre la última, en la que consiguió pasar cerca de la cabeza el Mont Saint Clair para luego rematar en meta un grandísimo trabajo de equipo.
La decepción; Jelle Vanendert
Pensando que tiene cierto margen de mejora, la temporada de Vanendert es algo decepcionante. Sin ni un solo triunfo -estuvo cerca de llevarse la Amstel Gold Race en unas decentes clásicas de cotas para él, bien es cierto-, su temporada pasa sin pena ni gloria cuando, ya con 27 años, estaba en una temporada importante para demostrar si es galgo o conejero. No ha dado un paso adelante ni como clasicómano, realizando unas performance similares a 2011 -pero sin Gilbert en el equipo-, ni como posible vueltómano, estando lejos de los mejores en el Tour y sin acercarse a, al menos, una victoria de etapa. Su no inclusión en el equipo mundialista belga terminó por rematar una temporada para olvidar para Vanendert.
La nota de C&H a Lotto – Belisol; 6
Un aprobado, más que un suficiente, es la calificación que pensamos que merece Lotto – Belisol en este 2012. Con una estrategia arriesgada, auspiciada por la reducción de presupuesto tras la salida de la farmacéutica Omega Pharma, Marc Sergeant le dio un sentir más belga al equipo, con gente joven, que ha ido respondiendo en mayor o menor medida. Son casi 30 triunfos, cubriendo algunas vueltas World Tour y dos Grandes Vueltas. El lunar más claro es que sus dos líderes para las vueltas por etapas y clásicas, Van den Broeck -a pesar de su cuarto puesto en el Tour- y Vanendert, no han conseguido ganar nada. Pero entre Meersman y Roelandts han conseguido asumir cierto liderazgo que, junto con el temporadón de Greipel, hace que LTB se merezca al menos el aprobado.