El Giro de Lombardía llega en 2012 con dos cambios muy significativos que dan sentido y toca la sensibilidad del último Monumento del año. El primero de estos cambios, motivo de crítica por parte de los más ‘puristas’ y amantes de la tradición del calendario ciclista, es el movimiento de fechas de la carrear al último fin de semana de septiembre. Dos semanas antes de lo normal dejan a la clásica en una fecha atípica, septiembre, cuestión que no ha ocurrido en toda su historia más reciente. De hecho, solo en las primeras décadas de la carrera, en las que se alternaron el último fin de semana de octubre y el primero de noviembre como fecha de celebración, alteran la costumbre adoptada sin remisión a partir de los años 30 de celebrar la carrera en el segundo, o tercer, sábado de octubre.

Pero la UCI manda, y teniendo tal intención de apertura hacia otros mercados, Il Lombardia ha tenido que moverse para dejar lugar al Tour de Hangzhou y el Tour de Beijing, fuente de puntos para los equipos, y de dinero para la Unión Ciclista Internacional. China mueve a Italia como cierre de la temporada World Tour. Pero hay que ser positivos; el cambio de fechas, a una semana después del Mundial por fuerza, quizás suponga una ponderable, y apetitosa, invitación a corredores que veían antes la celebración de la Clásica de las Hojas Muertas muy lejos. Muchos han reconocido que correrán; Alejandro Valverde, Joaquín Rodríguez, Philippe Gilbert, nuevo arcobaleno, Vincenzo Nibali, Alberto Contador, Rui Costa o Samuel Sánchez. Sin duda, un punto positivo en el cambio de fechas.

El otro cambio, considerable, comunicable y atractivo, es la inclusión del Muro di Sormano en el recorrido de la prueba. Sin ascenderse desde 1962, el Muro de Sormano, terrible vertiente de la Colma di Sormano, son apenas 2.000 metros pero con una media en torno al 15% y rampas cercanas al 30% en su metro número 1.000. Sí, porque el muro más protagonista de Il Lombardia está marcada a cada metro. Una agonía física y psicológica para todos los ciclistas presentes en la salida de Bérgamo.

El resto del Giro de Lombardía será lo que siempre se espera; la lucha de italianos contra extranjeros, la búsqueda de la última gran victoria en una temporada que tiene cada vez su final más cerca. Il Lombardia no será el cierre de la temporada en 2012, pero seguirán siendo Il Lombardia. La clásica de otoño. Una carrera apasionante. Más si cabe en esta edición. Ci vediamo a settembre!

Giro Lombardia 2012