Una vez más, nuestras sorpresas y decepciones. Opinad y debatamos cuáles son para vosotros.

Sorpresas

Joaquín Rodríguez (Katusha). Nadie esperaba que aguantara. Las dudas sobre su capacidad para regular y aguantar ritmos de carrera altos, y recurrir a que durante la primera semana corría en ‘su’ terreno eran la tónica durante los últimos días de agosto. Pero llegó septiembre, y con éste la alta montaña. Y ‘Purito’ no solo aguantó todos los días, sino que en dos de ellos -Ancares y Cuitunigru- sacó diferencias a sus máximos rivales. Fue una sorpresa que lo hiciera tan bien en el Giro, pero es una sorpresa aun mayor que esté a estas alturas con el maillot rojo puesto… y a pocos días de llevarse una Gran Vuelta.

Andrew Talansky (Garmin – Sharp). Más que sorpresa, confirmación. En la figura de Talansky el amigo Vaughters sigue con su cuasi eterno compromiso con los puestos altos en rondas por etapas de tres semanas. Pero el ‘pitbull’, como le llama el ex corredor, no es fruto de una de esas transformaciones basadas en trabajo específico y bajadas de peso drásticas. Talansky es un vueltómano que, de haber tenido más kilómetros contra el crono, más distancia para especialistas, estaría amenzando tranquilamente la 5ª plaza de la general.

Andrew Talansky

‘¡Me llaman pitbull porque me flipan sus temazos!’

Nairo Quintana (Movistar Team). Cuando un corredor tan joven (1990) sufre en la primera semana, pierde tiempo en el primer día de montaña (Arrate), y no se siente bien hasta bien avanzada la carrera (etapa de Ancares), piensas que es normal. Pero que luego, como le ha pasado a Nairo Quintana, destaque como el cuarto mejor escalador de la Vuelta -tras los españoles que coparán el cajón en Madrid seguramente- en el bloque montañoso astur-leonés es una sorpresa y un argumento muy a favor de que, con Quintana, estamos ante algo grande.

Simon Clarke (Orica – GreenEdge). Casi nadie reparaba en este ex pistard de la factoría aussie. No es el que más promoción llevaba detrás, así que, con buena lógica, tampoco era el más conocido. Tras su victoria en Valdezcaray parecía aprobada más que con nota su Vuelta a España -y la de su equipo-, pero con clase, concentración, tesón y buenas decisiones está peleando por el único maillot que ahora mismo no pertenece a Joaquín Rodríguez.

Decepciones

Chris Froome (Team Sky). ¿Acaso no pensábamos todos que un duelo con Alberto Contador, por aquello de medir con el Tour, no era lo ideal? ¿Acaso no veíamos en la batalla de estos dos ciclistas lo necesario para hacer que esta fuera inolvidable? Se le vio flojear en el circuito de Barcelona, cuestión que notaron varios de sus rivales, y luego falló en la crono y en cada uno de los finales en alto de la semana pasada. Una decepción, Chris Froome.

Damiano Cunego (Lampre – ISD). ¿Sabíais que había venido a correr? No hase falta disir nada más. Y pensar que algunos le veíamos con su versión Vuelta de 2009 activada.

cunego lampre

No hemos encontrado ninguna foto de Damiano en esta Vuelta. Así que ponemos esta.

José Joaquín Rojas (Movistar Team). No se metió en los sprints -para eso entendemos que vino-, y luego varios percances le dejaron fuera de carrera sin haberse dejado ver en toda la carrera. No es tanto una decepción por esta Vuelta en concreto, pero sí por su año en general. No ha aprovechado las oportunidades que el equipo le ha dado, y la mala suerte se ha cebado también con un corredor que se mueve en la indefinición. Que cambie para 2013.

Igor Antón (Euskaltel – Euskadi). Queríamos esperar a este Sorpresas y Decepciones para ver qué hacíamos con Igor Antón. Pero es que tras un año en el que ‘ni sí ni no’, con un calendario muy poco exprimido, ha llegado a la Vuelta a España, como el año pasado, y ha vuelto a no hacer nada. ¿Será Fuente Dé, La Lastrilla o la Bola del Mundo su particular Bilbao de este año? Al menos ayer mostró otras piernas.