¡¡Saludos de nuevo!!
Os prometí que esta vez os iba a escribir desde un sitio diferente y es que me encuentro ahora mismo en Seúl, capital de la República de Corea (popularmente conocida como Corea del Sur), disfrutando de unos pocos días de descanso. Pero ya trataremos este viaje en próximas entradas que aún lo tengo a medias. Vamos a hablar de la carrera del fin de semana pasado en Ishikawa, Fukushima.
La podemos calificar como la carrera del casi; casi llego en la escapada y casi hago top10 (undécimo puesto en meta). Todo el mundo me decía: ‘el circuito de Ishikawa te va bien, te va a gustar, veras como vas a estar adelante’. Claro que yo aquí no me creo nada, pero bueno. Esta vez vamos a decir que tuvieron razón. Para empezar pude hacer una cosa que no había podido hacer las otras veces y es reconocer el circuito el día antes, y allí ya pude ver que sí, me gustaba. Era más “europeo”, carretera de doble carril, sin tantas curvas. Mucho más a gusto.
El circuito consistía de una larga subida. Primer kilómetro y medio duro, al 7%, luego había 2 km de falso llano (2-3 %), una rampita al 8%, otros 500 metros al 5%, 500 metros más llanos y la última rampa de 600 metros al 8% antes de encarar una larga bajada, donde milagro, se podía recuperar e incluso ¡¡comer!! Luego había una curva de 180º grados y había un par de repechos de 500 metros duros, pero era más cómodo ya que luego había bajada para recuperar.
En total 8 vueltas y media (es decir, nueve subidas) para un total de 115 km (esta era cortita). Había hasta tramo neutralizado… ¡menuda novedad! Y bueno esta vez se salió con un poco menos de agresividad que en otras pruebas, con el equipo de Utsonomiya Blitzen dominando las primeras posiciones y sin dejar grandes fugas. La verdad es que la tiranía del equipo rojo está siendo impresionante.
Unas vueltas se subía más rápido y otras más despacio. Aquí la verdad que no me cuesta nada de trabajo ir colocado entre los veinticinco primeros del pelotón y sin darme cuenta éste pasa de los 120 a los 50. Como decía Manolo, el director de Froiz, estas carreras se hacen por detrás. De hecho a mitad de carrera Yosuke me dice que solo quedamos 3 del equipo. ¿Solo? ¿Y los demás?
Y llegamos al momento clave de la carrera; a falta de tres vueltas para el final el equipo Blitzen se pone como locos en la subida con cinco miembros demostrando una fortaleza terrible. Yo voy bien colocado, en los veinte primeros, pero iba a resultar clave los tres corredores que se abrieron delante de mí y tuve que hacer un pequeño sprint para superarles. Y es que los Blitzen consiguieron en solo 1.500 metros destrozar la carrera. Llegamos diez corredores al falso llano, yo cerrando el grupo y haciendo todo lo que sabía. Y aquí llego mi tragedia, pensaba que iba a poder respirar y recuperar, pero lejos de eso me llevaron a tope y al llegar de nuevo la parte dura explote junto un corredor del equipo Ukyo, marchándose ocho por delante y yo siendo neutralizado por lo que quedaba de pelotón.
¡¡Qué rabia!! Encima luego iba en el pelotón con sensaciones extrañas. Como que me había quedado atufado. Llegue a la última subida con muchas dudas pensando que me iba a cortar al primer achuchón, pero para mi sorpresa fue todo bastante bien y es que aguante todas las embestidas en cabeza del grupo para llegar al sprint en un reducido grupo siendo tercero, undécimo total, sumando un gran botín de puntos para el Ranking J Pro Tour, importantes para el equipo y que me sitúan ya en la posición 48 habiendo faltado a las 5 primeras carreras.
Sensaciones agridulces por lo tanto. Buen resultado, pero como siempre pudo ser mejor. Espero poder seguir esta línea ascendente para próximas citas. Bueno voy a seguir disfrutando un poco de Corea.¡¡¡ Abrazos!!!