Después de ganar una etapa y el maillot de la montaña en 2011 y quedarse a las puertas del podio en 2010 (al que finalmente accedió por la sanción sobre Alberto Contador), Samuel Sánchez (Oviedo, 1978) es uno de los ciclistas con mejores resultados en el Tour de Francia de entre todos los que tomarán la salida en Lieja. Después de llevarse la Vuelta al País Vasco, quizá su otro gran objetivo del año por debajo del Tour, el ciclista ovetense llega con buenas sensaciones y sin presión a La Grand Bouclé. En plena concentración en Sierra Nevada para ultimar su puesta a punto, el jefe de filas del Euskaltel-Euskadi habló con Cobbles & Hills sobre el Tour de Francia 2012.
¿Te queda alguna secuela de la caída del Dauphiné?
Gracias a Dios, no. Como no hubo nada roto, fue todo muscular y un edema óseo, con el paso de los días la inflamación va desapareciendo y el hematoma interno se va reabsorbiendo. A día de hoy estamos muchísimo mejor.
La temporada hasta el Tour va muy bien. Muy buenos resultados y sobre todo la victoria en la Vuelta al País Vasco que tantos años llevabas buscando.
Es el mejor arranque de temporada que he tenido en mis 13 años como ciclista profesional. Haber conseguido hacer dos podios en carreras del World Tour (ganar en País Vasco y segundo en Cataluña) ha sido un arranque muy bueno. Llegamos al Tour con un balance muy positivo.
Ha sido el mejor arranque de tu carrera en resultados. ¿También en sensaciones?
Yo diría que sí, sobre todo en la Vuelta al País Vasco. Nos salió todo a pedir de boca, tuvimos muy buenas sensaciones y el equipo estuvo fenomenal, a la altura, y nos acompañó el resultado. Hay veces que te encuentras muy bien y las cosas van saliendo bien pero luego el resultado no acompaña. Este año las cosas han salido mejor que nunca y ganar la Vuelta al País Vasco con dos victorias de etapa es lo mejor para mi y para el equipo, porque es de casa y el patrocinador y la afición se merecían algo así.
Ahora que estamos tan cerca del Tour, ¿qué hace exactamente un hombre fuerte de la general para terminar de prepararse para la carrera?
Yo llevo prácticamente diez días en Sierra Nevada, acumulando mucha carga de trabajo, acostumbrándome al calor y repitiendo lo que he hecho en estos últimos años, que me ha ido bien. La carrera son tres semanas y cada ciclista lleva su preparación. Este es el tercer año que vengo a Sierra Nevada y me está gustando. Lo que aquí busco sobre todo es tranquilidad, desconectar de todo, pensar sólo en la bicicleta y descansar lo máximo posible.
¿Tú ves a Wiggins como el máximo favorito para el Tour?
Yo veo a Evans. Evans es el favorito número uno y Wiggins, el aspirante número uno. Evans al final sabe lo que es ganar el Tour, sabe lo que es estar en el podio de París. Wiggins sólo sabe lo que es estar en el podio de una Vuelta a España y lo mejor que ha hecho en un Tour ha sido cuarto. Hoy por hoy Evans es el favorito número uno y viendo cómo iba en el Dauphiné, muy parecido al año pasado, creo que va a llegar muy bien. Y luego tiene mucha más experiencia que los demás.
Lo que sí tiene Wiggins es un equipo que parece muy difícil de batir.
Pues sí. El Sky ha mostrado un dominio incontestable. Lo han hecho muy bien en el Dauphiné, con primero y segundo en la general y cuatro en los diez primeros. Es el equipo que puede controlar una vuelta grande de principio a fin.
Sé que esta pregunta es complicada de responder ahora, porque luego la carrera sale como sale, pero ahora mismo ¿con qué resultado crees que saldrías satisfecho del Tour?
Si la forma física es la del año pasado, con repetir los resultados de 2011 estaría muy bien. Haber conseguido un maillot de los cuatro que hay en el Tour, una de las etapas más emblemáticas y estar todo el momento en la pelea, para mí sería un resultado muy bueno. Todos buscamos lo mismo, que es ganar o estar en el podio, pero eso es muy difícil. La carrera tiene que ir por sí sola y lo primero es llegar a Lieja y tener buenas sensaciones, ir acumulando los días y encontrarse igual que el año pasado que yo creo que es lo importante: tener buenas piernas y a partir de ahí ir planteándose objetivos.
¿Tú te imaginas como ganador del Tour?
No. [Se ríe tímidamente]
¿Y en el podio?
Hombre, el podio lo tuve muy cerca en 2010. Menchov me bajó de él a falta de una jornada. Tengo un podio pero por causas ajenas, no por mérito propio. Yo creo que si en 2010 conseguí estar cerca, por qué no otra vez. Sé que es muy complicado, que se tienen que dar muchas cosas a favor, pero si se dan podemos estar luchando. Sé que es muy complicado pero hay que tener esperanza, fe e ir día a día.
Todo el mundo habla de las dos cronos que hay. ¿Vas a tener que atacar para recuperar el tiempo? Es decir, ¿ya vas predispuesto a tener una actitud ofensiva antes de empezar la carrera?
Eso no lo sé, se va viendo sobre la marcha. El Tour es una carrera muy difícil, siempre puede haber contratiempos. Es un Tour parecido al que ganó Carlos Sastre en 2008; era un escalador, había dos cronos largas y sin embargo ganó un Tour de Francia que a priori era para los contrarrelojistas. El Tour es muy largo. Para la última crono, que son 52 km., queda mucho, y la carrera puede dar muchas vueltas. Vamos a ir día a día y según se vaya desarrollando la carrera habrá que optar por unas estrategias u otras. Si hay fuerza, se puede hacer un Tour bonito, parecido al del año pasado, que estuvimos muy activos.
¿Cómo crees que puede afectar a la carrera la baja de Andy Schleck?
Tanto Andy como Alberto Contador van a ser una ausencia muy clara. Dos corredores que van siempre al ataque, que intentan desestabilizar la carrera cuando se pone para arriba. El principal perjudicado es el ciclismo y el espectáculo. Andy hubiese sido un ciclista obligado a atacar. Ese espectáculo no lo veremos, pero otros ciclistas tendrán que atacar, porque saben que llegar a la última contrarreloj con el tiempo de Wiggins y Evans es una desventaja. El Tour es una carrera muy dura y seguramente veremos ataques, desfallecimientos… Siempre depara sorpresas.
Que este año no esté Alberto Contador, os puede añadir al resto una especie de responsabilidad extra, porque ganar con él es más difícil.
Siempre que esté Alberto en la carrera es el favorito número uno. Es el gran dominador de las vueltas grandes, sólo hay que ver su palmarés: ningún ciclista en activo se acerca a ese palmarés. Siempre que Alberto sale a correr es favorito y parece que uno de los tres lugares del podio y casi siempre el de arriba del todo, el primero, tiene su nombre. Entonces a veces hay que ser conscientes de que hay que pelear por ser segundo o tercero.
El otro día hablamos con Perico Delgado sobre ti. Él dijo que nunca te había imaginado capaz de conseguir lo que has conseguido. Que le parecía muy difícil que te metieses en el podio y luchases por ganar, pero que no se atrevía a pronosticar en tu contra y que eres la mayor baza del ciclismo español en este Tour.
Para mí es un halago que un doble ganador de la Vuelta y un ganador del Tour diga eso de mí. Pero la carrera pone a cada uno en su sitio y eso se verá en el día a día. Hay más ciclistas: Alejandro [Valverde] sabe lo que es ganar una vuelta grande y va a regresar al Tour con muchas ganas y también lo puede hacer bien. Desde aquí le doy las gracias a Pedro por la confianza que muestra. Intentaremos no fallarle [se ríe].
Justo después del Tour llegan los Juegos Olímpicos. ¿Ya conoces el circuito?
Más o menos, sí. Es más duro de lo que se dice, porque al final son nueve vueltas a un circuito en el que hay una subida de cuatro kilómetros al cuatro por ciento. Eso creo que va a hacer que la carrera sea un poco más selectiva. No tanto como en Pekín, que era una carrera muy dura, pero sí más selectiva de lo que parecía, y eso a nosotros nos viene bien.
¿Te ves con opciones de medalla entonces?
Sí. Los cinco que vamos podemos tener nuestra oportunidad. Va a ser una carrera estratégica, estar en el momento justo cuando el corte bueno vaya para adelante, algo complicado, pero creo que cualquiera de los cinco podemos tener un metal. Eso es lo importante: todos estamos capacitados para estar en puestos de cabeza.
Además vas a hacer también la contrarreloj.
Sí, pero en este caso no es como en China, que era una crono que nos venía muy bien a Alberto y a mí y nos quedamos muy cerca de las medallas. Era una crono muy dura. En Londres es más llana y con los especialistas va a ser un pelín más complicado.
Cuando hablamos antes de empezar la temporada te preguntamos por la Vuelta y dijiste que lo decidirías después del Tour. ¿Ha cambiado algo?
Es complicado. La Vuelta a España está muy cerca del final de los Juegos, sólo hay dos semanas. Prácticamente no te da tiempo a recuperar, porque después de la Olimpiada el día 14 está la Clásica de San Sebastián, donde supongo que estaré, y es muy complicado llegar a la Vuelta con la forma física y la motivación para tener garantía de hacerlo bien. Aparte, Igor Antón este año va a hacer sólo la Vuelta y ahí tiene que asumir responsabilidades.
Además de acercarse al Tour, la Vuelta también se aleja del Mundial, que este año parece que te viene bien.
Viene bien a muchos ciclistas. En España hay muchos ciclistas capacitados para hacerlo bien en el Mundial: Alberto, Purito, Alejandro, Óscar [Freire], Luis León [Sánchez]… Hay mucha gente que lo puede hacer bien. Pero queda mucho, queda mucho para el Mundial.
¿Y cómo ves el futuro del equipo Euskaltel-Euskadi, con todo lo que se habla al respecto?
La cosa va bien encaminada, yo creo. Yo sé lo que sale en la prensa. Parece que las cosas van bien. Hay que esperar a que se confirme por parte del patrocinador, pero yo creo que las cosas van bien. A ver si tenemos noticias rápidamente.