“He demostrado que también puedo ganar en la carretera”. La victoria conseguida en Cassel fue algo más que un simple triunfo. El adoquín de la ciudad francesa vivió el estreno del palmarés en ruta de un doble campeón del mundo de ciclocross. Zdeněk Štybar (Planá, 1985) abandona el barro para brillar en el asfalto. El paso del Telenet-Fidea al Quick Step a comienzos de 2011 llevaba consigo el más que consecuente abandono paulatino del ciclocross para comenzar a centrar su temporada en la ruta. Pese a lograr su segundo título mundialista la decisión estaba más que tomada.
Las críticas se ceñían sobre el checo. Un año después de su debut ha conseguido contestar con una victoria. “Gran cantidad de gente decía que no era posible y ahora les he demostrado que sí que lo era. Cuando elegí correr en carretera me limité a escuchar a mi corazón y la decisión ha sido correcta.” Los Cuatro Días de Dunkerque se ha convertido en un territorio fetiche. Después de sorprender la temporada pasada volvió a repetir una gran actuación. La potencia que exhibe en el barro pasó en su máximo esplendor en Région Nord-Pas de Calais. Con su firme planta, golpeando duramente al pedal fue soltando rival a rival hasta que entró en solitario en la meta de Cassel. Una corta ascensión, ese terreno sube y baja tan característico de ciclocross. Un escenario propicio para sus características donde consiguió apuntillar al resto del pelotón. Štybar se resarcía a lo grande de la victoria que le robó John Degenkolb dos días antes. En su cuarto día de competición en ruta llegó el triunfo.
Su caso no único. En las últimas temporadas nos encontramos claros casos de un brillante paso del ciclocross a la ruta con dos grandes irrupciones: el propio Štybar y Lars Boom. El holandés, también campeón del mundo de la especialidad, es el ejemplo de la adaptación y consecución de resultados. Victoria de etapa en Vuelta a España, general de la Vuelta a Bélgica, Tour of Britain, victorias en París-Niza, Dauphiné, Qatar o en el propio Tour of Britain contempla un palmarés donde, además, destaca el sexto puesto conseguido en la París-Roubaix de este año.
Dos ciclocrossman brillando en ruta. Los dos últimos grandes ciclocrossman no belgas. Simple y vana curiosidad. Los belgas, grandes dominadores, a pesar de salir a competir también en ruta se afanan por seguir luciendo sobre el barro y las praderas. Ni Niels Albert ni Sven Vanthourenhout han continuado las escapadas a la carretera más allá de la simple preparación. El paulatino abandono de Lars Boom y Zdeněk Štybar propicia que la ya casi incontestable superioridad de los belgas sea paso a paso mayor.
Dunkerque ha sido el primer paso de una carrera ya de por si brillante pero que ahora atisba un horizonte dorado para los intereses del ciclista del Omega Pharma-Quick Step. Centrado en la ruta el objetivo pasará por seguir creciendo en una temporada que se antojó desde el comienzo como vital para su transformación. Las grandes clásicas en un futuro cercano son su meta pero de momento será la Vuelta a Bélgica la próxima parada de un hombre que con un chispazo de calidad ha sabido callar a todos los críticos. Pocos ciclistas pueden tener a sus espaldas la categoría fuori di classe. Zdeněk Štybar es uno de ellos.