Análisis global

Al frente de RCS Sport se ha cambiado a Zomegnan, periodista apasionado del ciclismo de toda la vida, por Michele Acquarone, un hombre “nuevo” en el ciclismo con formación empresarial y de marketing. Y este marketing se puso en funcionamiento desde la presentación, intentando distanciarse del Giros anteriores y las críticas de algunos sectores sobre su supuesta extrema dureza, vendiendo un Giro “más humano”.

¿Pero es verdad? ¿Estamos ante un Giro mucho más suave que los de Zomegnan indicando un cambio de rumbo con la nueva dirección? En realidad no. El Giro 2012 repite un esquema similar a pasadas ediciones, con los mismos aciertos y errores, algo que no es de extrañar porque Angelo todavía tuvo mano en el diseño.

Toda la alta montaña se concentra entre los dos sábados finales de la carrera, donde los corredores tendrán que superar las 5 etapas más duras de la edición con los finales en Cervinia, Pian dei Resinelli, Cortina d’Ampezzo, Alpe di Pampeago y Passo dello Stelvio. Son 8 días de carrera de lo más duro, subiéndose los 10 puertos HC (>240APM) que tiene el Giro (Joux, Cervinia, Valcava, Duran, Giau, Manghen, Passo Pampeago, Alpe di Pampeago, Mortirolo y Stelvio) a los que sumar otros 7 puertos de primera (>120APM).

Y pese a tanta dureza, este bloque ofrece dudas, principalmente porque solo hay una etapa que no acabe en alto (Cortina d’Ampezzo) y porque la dureza va en aumento “empujando” a que los corredores se dediquen a reservar fuerzas para los siguientes días. El encadenado Joux + Cervinia, aunque llegue tarde, es un buen primer contacto similar a la etapa del Etna del pasado año. La llegada a Pian dei Resinelli viene precedida de un gran encadenado, pero solo Valcava es realmente rompedor y está lejos de meta. La etapa de Cortina es casi perfecta y las llegadas a Alpe di Pampeago y el Stelvio tienen recorridos previos durísimos que pueden romper todo desde lejos… pero también finales durísimos que pueden provocar que se espere al final.

Altimetría general del Giro de Italia 2012

Corresponde por tanto a la media montaña dar aliciente a las primeras 13 etapas. Con la CRI inicial, la CRE de Verona y 3 etapas llanas dando inicio a la Corsa Rosa, hasta la 6ª etapa no hay ninguna dificultad montañosa reseñable. Esta quebrada jornada de Porto Sant’Elpidio (con 3 km de tierra incluidos) junto con la de Sestri Levante son las únicas donde podremos ver autentica media montaña con muchos puertos repartidos a lo largo del día. Las otras etapas con dificultades (Rocca di Cambio, Lago Laceno y Assisi) tienen puertos cerca de meta para dar emoción a la victoria de etapa y quizá picar algunos segundos. Atractivas, pero tampoco dan más de sí.

La escasa media montaña es la gran diferencia con los Giros de Zomegnan y una de las deficiencias de la carrera. Si toda la montaña va al final, hacen falta etapas impredecibles y buena media montaña durante las dos primeras semanas. Y si además apenas hay contrarreloj, al menos programar etapas abiertas a toda tipología de corredor que puedan hacer diferencias en la general y obligar a los que quieran ganar a atacar y arriesgar en la montaña.

Nos queda analizar la crono, y este análisis va a ser tan breve como el tiempo que pasarán los corredores encima de “la cabra”. Es escasísima. Vergonzosamente escasa y llegar tardísimo. Que solo haya 38,8 km de CRI deja una carrera muy descompensada donde no se penalizan los puntos flacos de aquellos escaladores con malas prestaciones en esta especialidad, algo que ni los 33,2 km de la CRE de Verona arreglan.

En definitiva, estamos ante un recorrido con etapas muy atractivas y variadas, muchos grandes puertos y una semana final que puede ser infartante. Pero esto solo si todo sale bien y los corredores se muestran ambiciosos y sin miedo al ataque.

Pero estamos en 2012 y esta última premisa en demasiadas ocasiones no se da y se corre a la expectativa y reservando. El problema es que el Giro 2012 se lo pone fácil a este “ciclismo moderno” abusando de los finales en alto duros, sin apenas crono y dejando todo lo más importante para los últimos días. Ofrece terreno más que de sobra con las etapas más duras y atractivas del año, pero la estructura general hace difícil que se genere la necesidad de atacar y aprovecharlo.

Análisis etapa por etapa

  • Sábado 5: Herning – Herning CRI 8,7 km

La primera etapa es una contrarreloj individual corta, donde contará mucho la explosividad y el manejo de la bicicleta para negociar y recuperar el ritmo a la salida de las numerosas curvas (hasta 17) que tiene el recorrido.

  • Domingo 6: Herning – Herning 206 km

En Dinamarca casi siempre sopla el viento, como atestiguan sus antiguos molinos y modernos aerogeneradores. Y este factor es el que puede convertir las dos primeras etapas en linea en un caos de abanicos. En esta etapa de Herning el peligro está sobre todo en los primeros 100 km pegados al Mar del Norte, para luego volver por el interior y terminar con un circuito y dos pasos por meta. Hacer la etapa en sentido contrario hubiera sido más interesante.

  • Lunes 7: Horsens – Horsens 190 km

Similar a la etapa anterior, el enemigo podría ser el temido viento pero la zona pegada a la costa del Báltico llega en el primer tercio de etapa, lejos de meta. Se acaba con otro circuito urbano y 4 pasos por meta.

Martes 8: DESCANSO

  • Miercoles 9: Verona – Verona CRE 33,2 km

El Giro salta a Italia para disputar una crono por equipos llana, no muy larga para la especialidad. El inicio y final son aptos para rodar y trabajar bien en conjunto, con una zona más técnica y estrecha a mitad del recorrido. Destacar las monumentales salida y llegada, desde la Basílica de San Zenón a la Arena de Verona.

  • Jueves 10: Modena – Fano 209 km

Etapa recta y llana, solo 24 km de repechos por el P.N. Monte San Bartolo darán más “vidilla” a las escapadas, aunque los 13 km llanos hasta meta dejan otra gran oportunidad a los sprinters.

  • Viernes 11: Urbino – Porto Sant’Elpidio 210 km

En los exigentes primeros 120 km del día se acumulan siete ascensiones rematadas con el Passo della Capella, 7,4 km al 7% con los únicos 2850 metros de tierra de la carrera. Pero se corona a 90 km de meta y le siguen 30 km sin dificultades, lo que dificulta que rompa la carrera.

El bloque final de puertos es un serrucho de pequeñas ascensiones con rampas de entidad. Montelupone no se sube por el muro de las victorias de Purito, pero la trampa llega con la pared de Montegregaro y sus ¡1,2 km al 13,8%! seguido de otro muro de 1,2 km al 10%. Lo malo es que pudiendo bajar directamente a meta desde aquí, se hace un incomprensible rodeo alejando la meta. Una etapa interesante, que probablemente quede para escapadas porque podría haber sido mucho mejor diseñada.

  • Sábado 12: Recanati – Rocca di Cambio 205 km

Primer final en alto de la edición, muy similar a Montevergine que se subió el pasado año, pues es largo (19,2 km) pero tendido, siempre rondando el 5%. Es de esperar un desarrollo similar, con un sprint de un nutrido grupo de favoritos.

  • Domingo 13: Sulmona – Lago Laceno 229 km

Interesante etapa con final en el Lago Laceno. De salida se sube al Piano delle Cinque Miglia que con 20,8 km al 4% es un terreno ideal para que se formen fugas numerosas que pueden dar lugar a un “bidonazo” estilo L’Aquila 2010 ya que una etapa larga y quebrada es difícil de controlar.

Lo que tenga que pasar en la general o para resolver la etapa ocurrirá en el Colle Molella, coronado a solo 4,4 km llanos de meta. Sus números globales (9,9 km al 5,9%) esconden 3,5 duros kilómetros al 9,4% donde hacer diferencias. Aquí ganó Zülle en el 98.

  • Lunes 14: San Giorgio del Sannio – Frosinone 166 km

Etapa llana con algo de aliciente de cara a la resolución de la misma, pues llegando casi a meta se suben tres repechos consecutivos , el más duro el último con 1,5 km al 6%. Se corona a 4,7 km de la linea final.

  • Martes 15: Civitavecchia – Assisi 186 km

La etapa que llega a la preciosa Assisi (el Asís de San Francisco) acaba en un muro final doble, con 1,1 km al 11%, seguidos de 1,2 km de bajadita más el repecho de meta de 1,2 km al 8,3% finalizando sobre pavés. Espectáculo cortito, intenso y de pequeñas diferencias.

  • Miercoles 16: Assisi – Montecatini Terme 255 km

La etapa más larga de esta edición 2012 es básicamente llana y avocada al sprint, con un bucle final que incluye Vico, de 3,3 km al 5,2%, a 11 km de meta para que algún valiente pruebe suerte.

  • Jueves 17: Seravezza – Sestri Levante 155 km

En una preciosa etapa de media montaña, tras 50 km llanos de inicio los corredores tendrán que afrontar 100 finales enlazando casi a la perfección los puertos de La Foce (3,6 km al 5,9%), Passo del Termine (7,8 km al 4,6%), Valico Guaitarola (9,8 km al 6,2%), Valico la Mola (9,2 km al 5,2%), y Villa Tassini (5 km al 5,9%) para terminar con 7 km llanos finales. Sin pendientes imposibles, es la acumulación de subidas constantes y técnicos descensos lo que puede hacer saltar la liebre.

  • Viernes 18: Savona – Cervere 121 km

Etapa cortita con algunas dificultades de salida y dos repechos a 6 km de meta donde ver la típica lucha entre sprint y escapada.

  • Sábado 19: Cherasco – Cervinia 209 km

Por fin llega la alta montaña y lo hace con un buen encadenado final. Primero se afronta el Col de Joux (22,4 km al 5,6%) y sus 1250 m. de desnivel, puerto de desgaste sin grandes rampas para, a renglón seguido, encarar la subida a Breuil – Cervinia (27 km al 5,5%). Se trata de un puerto eterno con 1475 m de desnivel. Bastante irregular, destacan los 8,5 km al 7,1% entre el -11 y el -3,5. Aquí Gotti ganó y se vistió de rosa en el 97.

  • Domingo 20: Busto Arsizio – Lecco / Pian dei Resinelli 169 km

Tras 70 km sencillos se afronta el gran coloso del día, Valcava, subido en el pasado Giro de Lombardía. Está lejos de meta, pero sus 11,6 km al 8,1% esconden 3 km al 11,6% que hacen mucho daño. Además hasta meta no hay respiro ni llano, enlazándose Berbenno (7,3 km al 3,7%), Forcella di Bura (10,9 al 4,3%) y sobre todo Culmine di San Pietro (irregular, con tramos duros y una bajada complicada) y el exigente final de Pian dei Resinelli (7,8 km al 7,8%).

Si bien puede que los corredores reserven toda la munición para el puerto final, la etapa da para mucho más.Lunes 21: DESCANSO

  • Martes 22: Limone sul Garda – Falzes / Pfalzen 173 km

Etapa sin mayor dificultad que su final, un duro repecho de 2,3 km al 8,8% seguido de 2,4 km de falso llano hasta la meta donde ver movimientos y lucha por la etapa o algunos segundos.

  • Miercoles 23: Falzes / Pfalzen – Cortina d’Ampezzo 186 km

La etapa dolomítica de este año tiene un diseño brillante y es especialmente interesante al ser la única de montaña que no acaba en alto, sino tras descenso. De salida y para formar escapadas se sube Terento. Poco después comienza el interminable periplo hacia Valparola, con un largo falso llano que va incrementando su pendiente para ponerse serio y acabar con 6,5 km al 7,8%.

Tras la larga bajada llega en perfecto encadenado final. Primero se afronta el mítico y duro Passo Duran, 12,2 km al 8,1%. Tras él se sigue ganando altura por Forcella Staulanza, más sencillo pero con un duro inicio y un final sostenido en torno al 7%. Tras su corta bajada llega el terrible y espectacular Passo Giau por Selva di Cadore de 9,9 km al 9,3%. 17,8 km de trepidante descenso separan su cima de la meta y pueden hacer diferencias como ya ocurrió en 2007.

  • Jueves 24: San Vito di Cadore – Vedelago 149 km

Etapa corta de transición y última oportunidad para los sprinters.

 

  • Viernes 25: Treviso – Alpe di Pampeago / Val di Fiemme 198 km

Llega la traca final con este etapón tremebundo de unos 5200 m de desnivel acumulado.. 4000 de ellos en los últimos 100 km. El puerto más duro del día es el colosal Passo Manghen (20,5 km al 7,4%, los 6,2 km finales al 10%), pero a diferencia de otros años tras llegar por primera vez a Val di Fiemme se sigue subiendo hasta el Passo Pampeago (asfaltado para la ocasión) completando 10,5 km al 9,5%. Tras la rapidísima bajada, el Passo Lavazè espera con otra encerrona, 2,5 km iniciales al 10,9%, para terminar la agonía en los 7,7 km al 9,8% de Alpe di Pampeago… ¡siendo los 4 finales a casi el 12! Una tortura.

  • Sábado 26: Caldes / Val di Sole – Passo dello Stelvio 219 km

El Giro de Italia termina como solo lo hace el Giro, con la etapa reina en el sábado final de carrera, tan dura que pese a que las diferencias en la general sean grandes, puede dar un vuelco a todo como el líder flaquee lejos de meta en la nueva vertiente del Mortirolo o se hunda en el colosal Stelvio. Estamos hablando de más de 5800 m de desnivel total y 219 km. Se enlazan así dos de esas etapas donde los ciclistas se vuelven héroes solo por acabar.

Para “calentar”, se suben el Passo del Tonale (15,1 km al 6,1%), el falso llano de Aprica (15,9 km al 3,1%), el empinado Teglio (5,9 km al 8%) y antes de iniciar el Mortirolo quedan dos repechos durillos no puntuables.

El Mortirolo por Tovo di Sant’Agata es de similar dureza, pero más extremo y rompedor todavía que la vertiente tradicional de Mazzo. Será el escollo más duro de la edición y debería hacer trizas la carrera.

El falso llano ascendente hasta Bormio puede hacer también muchísimo daño si el pelotón viene roto…o provocar reagrupamientos y desincentivar ataques en el Mortirolo. Todavía quedará el final a más altitud de una carrera en Europa, el Passo dello Stelvio… aunque por su vertiente menos dura. De todos modos, sigue siendo un gigante de 22,4 km al 6,9% y 1548 m de desnivel que puede enterrar a cualquiera, máxime con tanto desgaste.

  • Domingo 27: Milano – Milano CRI 30,1 km

Aunque parezca mentira, si hay una CRI “larga” en esta carrera: llana, por Milán, con bastantes curvas y tipo “guía turística”, seguramente quede muy poco por decidir en ella.

Eugenio González