Hace cosa de un mes, este que escribe se frotaba las manos ante lo que se presumía un increíble duelo en las alturas entre Philippe Gilbert y Alejandro Valverde. El belga porque tenía la condición de indiscutible favorito después de pasearse en 2011. Y el murciano porque llegaba tras dos años de inactividad y venía dispuesto a demostrar que sigue siendo el de siempre.
Llegamos ahora a la tercera entrega del Tríptico, la Liège-Bastogne-Liége, y no hay rastro de ese cara-a-cara por ninguna parte. De hecho, podría decirse que todo ha sucedido al revés de lo que se esperaba. Después del comienzo de año que ha tenido, Gilbert parece haberse entonado y, aún lejos de su mejor forma y nivel, hace todo lo que puede para estar con los mejores. Todavía no ha estrenado su casillero de triunfos en 2012 –después de las 18 del año pasado, el número es todo un contraste-, pero a base de casta y coraje firmó un cuarto puesto en Amstel y subió al cajón con la tercera posición en la Flecha Valona. Lo que se dice caer con dignidad.
Valverde, por su parte, está pasando sin pena ni gloria por las Ardenas después de un comienzo de temporada fulgurante. Y esto, ¿por qué? Pues hay dos opciones: la primera, que el Bala esté pagando la inactividad después de tanto tiempo sin correr. Una falta de ritmo que puede suplir con su calidad en carreras como Andalucía o Down Under. Pero en abril, cuando todos los ‘gallos’ están ya muy finos, pasa factura. La segunda posibilidad es que, simplemente, Valverde haya llegado pasado de rosca a esta terna de carreras después de muchos días de competición en los que prácticamente lo ha disputado todo. Y a la vista están los resultados. Un puesto 22 en Amstel y 46 en Flecha.
En lo que a Lieja se refiere, Valverde ya conquistó dos veces esta carrera (2006 y 2008) y Gilbert es el actual campeón. Es la última gran corona de 2011 que le queda y la defenderá a muerte. Además, ha ido progresando con el paso de los días y seguro que estará en la lucha para reeditar su victoria. El murciano, por su parte, espera volver a verse delante y responder a esa condición de favorito en las clásicas.
Pero, visto lo visto en Flecha Valona y Amstel, el gran rival de Gilbert –y por tanto claro favorito a la victoria- será otro español. Un ‘Purito’ Rodríguez que, a sus casi 33 años, está más fuerte que nunca y busca un doblete que le haga entrar del todo en la leyenda. Subiendo el Mur de Huy se hizo un auténtico entrenamiento con público en rampas que rondaban el 20% de desnivel. Es verdad que la llegada final en Lieja no es tan brutalmente explosiva, pero en un recorrido mucho más largo se presume que llegarán menos corredores en el grupo cabecero.
En definitiva, el duelo Gilbert-Valverde que tanto esperaban los aficionados no ha sido tal. Mientras el belga se defiende como puede y espera resucitar del todo este domingo, Valverde apura las últimas reservas pensando ya en el descanso tras un primer pico de forma en el que empezó fuerte pero se ha ido desinflando. Habrá que esperar al año que viene para ver a ambos cracks luchando cuerpo a cuerpo en los empinados muros de las Ardenas.