¡Hola a todos!

Como pasa el tiempo…empezamos ayer la temporada y ya estamos a punto de disputar el Memorial Valenciaga, la clásica entre las clásicas del ciclismo amateur en España. Y yo…¡nunca la he corrido! Así que estoy con unas ganas que os podéis imaginar porque voy a debutar en la que quizá es la carrera más prestigiosa del año, por todo lo que la rodea, tanto el nivel de los corredores, que van a por todas porque saben que es la mejor oportunidad de dejarse ver ante equipos y directores pros, pues algunos de ellos se les puede ver en las cunetas como a Matxin, que en eso siempre ha ido un paso por delante, como por el verdadero gentío que se acerca a ver la carrera…

Es lo más parecido a una carrera en profesionales que podemos correr en nuestro país. Si os acercáis por el alto de Ixua, que da acceso al famoso santuario de Arrate tantas veces cima en la Bicicleta Vasca y ahora en la Vuelta al País Vasco, lo podréis comprobar. Ese pasillo humano que no para de animarte y que te hace subir en volandas el último kilómetro del puerto. Parece psicológico, ¡pero os aseguro que ver tanta gente te hace dar el 110%!

¿Y cómo llego? Las ganas saltan a la vista y la forma creo que también. Después del gran fin de semana en tierras zamoranas, seguí entrenando con normalidad aunque creo que lo mejor hubiera sido que me tomase una semana de “descanso activo” para ir asimilando los esfuerzos ya que la temporada es larga y además tenía que adelantar bastantes asuntos relacionados con el Proyecto Fin de Carrera, que en seguida llega la Semana Santa y nos plantamos en Mayo…

http://www.youtube.com/watch?v=AkIuEhjZtlg

Por ello, llegué a la cita con mi masajista y amigo Kike un poco cargado, lo que noté el día de la carrera -G.P. Macario de la Copa de España- ya que no empecé a sentirme a gusto hasta que pasó la mitad de carrera. No era la carrera más propicia para esperar al final, el recorrido no era exigente y no sopló mucho aire, al estilo de la primera prueba de Don Benito…así que fue muy difícil romper el orden del gran grupo, aunque a punto estuvimos de conseguirlo gracias a tres de mis compañeros del Super Froiz que se metieron en la fuga buena en la parte final de la carrera, pero por desgracia fueron neutralizados en los últimos kilómetros. Entonces, intenté meterme en el sprint final, pero ante la locura total y los numerosos bandazos que estuvieron a punto de tirarme, decidí atacar a falta de 1km en un repecho que pasaba por las vías del tren aprovechando que estaba bien colocado en ese momento, ya que veía que si no hacía algo me iba a ir para atrás e iba a hacer el 25…así que me lancé y cogí unos metros, pero al final de una larga recta me cogieron, cuando quedaban 300 metros, y la verdad es que me pasaron por encima. Por lo menos lo intenté y es lo que voy a seguir haciendo en todas la carrera, ¡empezando por este domingo en Eibar!

Ah, y muy pronto, os contaré que tal me fue en el estudio aerodinámico que hice con Yago Alcalde, de Ciclismo y Rendimiento, esta vez con la cabra BH del equipo Super Froiz. Aquí os dejo algunas fotos para abrir boca.

¡Un saludo a todos!