Alemania, país de la cerveza y Das Land der Dichter und Denker (La tierra de poetas y pensadores) vive horas bajas para su ciclismo en la actualidad. Lejos quedan los buenos tiempos en que Reimundt Dietzen peleaba por ganar la Vuelta a España, Jan Ullrich o Andreas Klöden luchaban por el Tour de Francia o Erik Zabel, Steffen Wesemann y Olaf Ludwig se batían en las clásicas más importantes del calendario internacional, con los ciclistas más importantes del momento.

Estamos en semana de Milán – San Remo, el primer monumento de la temporada, y es inevitable, que en las espaldas de los ciclistas alemanes, recaiga la responsabilidad de romper el maleficio con la Classicissima que duran nada más y nada menos que 11 años. Se dicen pronto…11 años los que han pasado desde que Erik Zabel, consiguiera en 2001 su última Milan – San Remo batiendo en el sprint a Mario Cipollini y Romans Vainsteins.

Actualmente cuatro nombres que destacan por encima del resto, luchan por conseguir la hegemonía alemana en los sprints, tres de ellos se citarán este sábado y uno de ellos no participará, sus nombres, André Greipel, Gerald Ciolek, Marcel Kittel y John Degenkolb. Cuando Erik Zabel en 2001 ganaba su última Milán – San Remo, André Greipel tenía tan solo 19 años y corría en el equipo alemán amateur de su ciudad PSV Rostock. Aquel chaval no podía imaginar, que tendría la responsabilidad de suceder al mismísimo Erik Zabel. Por el contrario Gerald Ciolek estaba en la categoría cadete, a punto de pasar a juveniles y ya ganaba la mayoría de las carreras que disputaba en su país, pero veía desde la lejanía, como un ídolo como lo fue Erik Zabel, reinaba en todo el mundo con sus potentes sprints.

También por aquel entonces, Marcel Kittel y John Degenkolb, disfrutaban de su infancia y empezaban a entrar en el mundo de la bicicleta a un nivel más competitivo, tan solo 13 y 12 años tenían respectivamente las ahora figuras alemanas del momento. En su mente, seguro tienen lapsus y recuerdos de aquellos sprints potentes que ostentaban la figura del ciclista berlinés, Erik Zabel.

Años más tarde, ciclistas de diferentes generaciones alemanas, se dan cita este 17 de Marzo de 2012 con un mismo propósito, triunfar en la Vía Roma y suceder a Erik Zabel como último ganador alemán en la Milán – San Remo, un sueño que con la calidad de estos ciclistas, se antoja cada vez mucho más cerca, porqué aunque el ciclismo alemán viva en horas bajas, no podemos olvidar que hubo un tiempo en que era una de las potencias en el ciclismo.