Casi medio año y centenares de carreras después, la temporada de ciclocross cierra de una vez por todas el telón en (¿dónde sino?) Flandes. Han sido muchos meses de competición en muchas partes del mundo, que han dejado victorias, derrotas, alegrías, decepciones, malos tragos, sorpresas y emoción con barro de por medio. Aunque por encima de todo, la temporada 2011/12 nos deja dos grandes vencedores. Kevin Pauwels, ganador de la Copa del Mundo, GvA Trofee, líder final del ránking UCI y dominador durante buena parte de la campaña; y Niels Albert, quien obtuvo en Koksijde su segunda zamarra arcoiris tras el año más irregular de su vida.

Como ya es habitual desde hace algunas temporadas, mientras nosotros aun disfrutábamos del duelo fraticida entre Cobo y Froome en la Vuelta a España, en Estados Unidos nos encontramos con el punto de partida de la temporada para los americanos y una forma sensacional de apurar la pretemporada para algunos europeos que cruzaron el charco. Bart Wellens, Nicolas Bazin, Ian Field y el prometedor Lars van der Haar fueron algunos de los aventureros que volvieron a la vieja Europa con victorias en el zurrón. Una Europa con sus ojos puestos todavía hacia la carretera en la que apenas se disputaban más que pruebas de segundo nivel en Chequia y Bélgica.

En la vida cada cosa tiene su momento, y tras el Mundial y Lombardía, cada vez más y más miradas se tornaron hacia el barro. La calidad de las carreras iba en aumento para dar el pistoletazo definitivo a la campaña en Bélgica, cuna sacrosanta de este deporte, con la primera manga del Superprestige. Viaje a Flandes a modo de bautismo a una temporada que daría sus primeros pasos en República Checa, con las dos primeras pruebas de la Copa del Mundo. Dos pruebas, dos ganadores y un duelo para toda la temporada por el arcobaleno. Sven Nys y el propio Pauwels superaban en su casa al bicampeón universal, Zdeněk Štybar, quien no pudo obsequiar a sus aficionados con el triunfo pese a dejarse la piel en ello.

Wellens y Peeters empezaron la temporada en Estados Unidos / Foto: Dave McElwaine

Tras completar las dos primeras estaciones para abrir boca, el calendario dejaba por delante todo un mes para las carreras de un carácter más local y nacional. Es en el Superprestige donde Niels Albert se recompuso de la lamentable actuación en Chequia para un hombre de su talla. Sin embargo, la cruda realidad del momento iba a dar una bofetada en la cara del crosser de Bonheiden. Una vez más, esa tormenta ganadora tomó la forma de Pauwels, a quien solo uno de esos días de Štybar pudo quitarle el triunfo en las siguientes cinco pruebas puntuables. Un Styby, por cierto, que ha vivido durante este año la peor crisis de resultados que se le recuerda. Fuera del Norte, Francis Mourey parecía intratable y se postulaba como el mejor ciclocrossman que no competía habitualmente con los belgas; en Estados Unidos (aislados para casi todo, sea bueno o no), Jeremy Powers sumaba sus presencias con victorias a las que únicamente tenía capacidad de respuesta el prometedor Ryan Trebon; en el regreso de Enrico Franzoi a su país, éste sumaba una victoria tras otra, al igual que el alemán “exiliado” en Chequia Christoph Pfingsten. Mientras que en España era Egoitz Murgoitio quien contaba sus participaciones por victorias aplastantes y lideraba la Copa de España tras las carreras de Navia y Gijón.

Tras este impás en medio de la campaña, la UCI y su vanagloriado trofeo regresaban con toda su fuerza, con cuatro carreras en un mes que explosionarían una clasificación abierta hasta convertirla en un cara a cara. Eso sí, sin la presencia de Albert, que pocos días antes se fracturó la muñeca entrenando. Es en este punto de la temporada donde comenzó a asomar la cabeza el Kanibaal van Baal, haciendo doblete el mismo fin de semana en Gieten y en el circuito donde se disputaría el Mundial. Con Nys en alza y el de Ekeren a la baja, ambos se devolvían golpes en cada una de las carreras que se disputaban. Pauwels ganaba en la visita a Igorre, pero el veterano crosser de Landbouwkrediet contestaba con un doblete el siguiente fin de semana y la victoria el Namur quince días más tarde tras romper el cuadro en la manga del GvA del día anterior. Nys estaba inconmensurable metido ya de lleno en la locura navideña que se vive en Bélgica, pero se chocó de pronto con un recuperado Albert en dos ocasiones y como no, con el tímido Kevin en el circuito de Zolder, una balsa en medio de la tempestad tanto para él como para Štybar.

Sin embargo, una de las muchas cosas que nos dice la historia es que no se puede sacar nada bueno de cabrear a un caníbal. Para empezar se exhibió en la carrera que lleva su nombre en su pueblo natal, lo que posiblemente sea un caso único en la historia del deporte. En el horizonte, la semana de los campeonatos nacionales en todos los países, en los que Nys abusó de sus rivales, pero que empezaron de la peor forma posible con la hospitalización de Wellens por un episodio de fiebre alta con afección coronaria que acabó con su temporada. Noticias más agradable llegaban a lo largo de todo el ancho y largo del planeta se sucedieron los campeonatos que avanzaron según lo previsto y otros que finalizaron con triunfadores sorprendentes. Pero donde la se dio una campanada tan fuerte que aun repica en los oídos de Murgoitio es en nuestro país, donde el vizcaíno cayó derrotado por Isaac Suárez por primera y única vez en la temporada dentro de nuestras fronteras.

Pauwels y Nys en la Copa del Mundo de Koksijde

El duelo más recurrente de la temporada: Nys y Pauwels; Pauwels y Nys / Foto: www.ispaphoto.com

Con algunos ciclistas estrenando maillot, éstos se enfrentaban al momento cumbre de la temporada. Tres domingos consecutivos en las que se decidirían la Copa del Mundo y el Mundial. Con las otras clasificaciones paradas, las espadas estaban por todo alto para el duelo final entre los dos dominadores del calendario, quienes tenían tres triunfos cada uno. Sin embargo, tanto en Liévin como en Hoogerheide la lucha se fraguó entre Pauwels… y Štybar, que parecía recobrar sus mejores piernas de cara a Koksijde, al mismo tiempo que a Nys parecía que le habían fallado los cálculos y la temporada se le estaba alargando en exceso. El corredor de Sunweb-Revor se llevaba la casaca blanca y aparecía en todas las apuestas para conseguir también el arcoiris.

Quien había desaparecido (levemente) de las quinielas tras las dos últimas semanas era Albert, de quien no se sabía si estaba regulando o es que no iba más. Bueno, no lo sabíamos nosotros, pero parece que su mánager, Christoph Roodhooft, y él lo tenían muy claro. En las dunas patrias tanto él como sus compatriotas se exhibieron con una actuación memorable, en la que todos los belgas llegaron por delante de todos los extranjeros, aunque por encima de todos hay que destacar a Rob Peeters, que se llevó la plata siendo el último de la lista de Rudy De Bie y que ha hecho un final de campaña excepcional. En las otras categorías no hubo sorpresa alguna, y Marianne Vos, Lars van der Haar y Mathieu van der Poel se hicieron con el arcoiris en las carreras femenina, sub23 y junior, respectivamente.

Albert ganando el Mundial en Koksijde

Niels Albert salvó su irregular temporada consiguiendo el arcoiris en la ahora llamada Albertduin / Foto: Riccardo Scanferla

Ya sólo quedaba rematar la temporada en el Norte, acabando de definir el GvA Trofee y el Superprestige, que aparecían dominados con cierta claridad por (seguro que no lo adivinan…) Pauwels y Nys respectivamente, como consecuencia de los periodos de brillantez que nos habían mostrado durante la temporada. Dos carreras de cada campeonato en las que ambos defendieron el liderato sin excesivos problemas, pero en las que el nombre propio fue Tom Meeusen, quien por fin pudo saborear las mieles de la victoria en esta campaña.

Y tras el espectacular critérium de Hasselt, donde Dieter Vanthourenhout y Niels Albert fueron los vencedores, el barro que a trompicones se hizo un hueco en el calendario allá por el mes de septiembre, se fulmina ahora dejando paso a la primavera ciclista. A los aficionados al ciclocross no nos queda más que esperar a la campaña próxima, que trae como principales novedades la llegada de Van der Haar y Roma a la Copa del Mundo, el adiós de Štybar e Igorre y, sobre todo, unos campeonatos mundiales que se disputarán por primera vez fuera de la vieja Europa y viajarán hasta Louisville, tierra del turf, para decidir quien será el caballo ganador de la temporada. Como siempre, ¡nos vemos en los prados!