La globalización del ciclismo culminó una nueva etapa de su desarrollo con la celebración del GP Québec en Canadá, enrolado dentro del circuito Pro Tour. Un circuito con poco más de 12 kilómetros esperaba a los ciclistas. Dentro de el dos pequeños obstáculos: un pequeño repecho y una cota con una longitud de 3 kilómetros en la que se encontraba situada la meta.

Tras varios intentos de fuga llegamos a la parte final y con ella emocionante de la prueba. A falta de dos vueltas para la finalización, el ídolo local, Ryder Hesjedal, se marchaba en cabeza junto a Damiano Cunego, Matti Breschel, Robert Gesink y Fabian Wegmann, logrando alcanzar una ventaja de entorno medio minuto sobre el grupo de favoritos que seguía su estela.

Bajo el sonido de la campana anunciando la entrada en la última vuelta, las distancias se acortaban. Sólo el tesón y esfuerzo de Hesjedal lograba sacar una chispa de vida en busca del éxito, pero la entrada al revelo de hombres del RadioShack y Euskaltel acercaron al grupo cuando daba inicio la última y definitiva ascensión a la cota. Tras la reagrupación vino la calma y la vigilancia. Todo parecía predispuesto a un sprint final, pero un valiente y correoso Voeckler se lanzó en solitario creando la sorpresa en el grupo. El galo comenzó a abrir hueco mientras por detrás la vigilancia continuaba, pareciendo tomar la distancia al corredor del BBox. Una vez entrado en el último kilómetro Voeckler seguía en cabeza sin síntomas de debilidad, consiguiendo una relajada entrada triunfal en meta inscribiendo así su nombre en el estrenado palmarés de la cita canadiense. Por detrás fue Edvald Boasson Hagen quien consiguió la segunda plaza superando a Gesink, Hesjedal y Staf Scheirlinckx.

(Foto: © Rob Jones)

Gran sabor de boca nos deja el primer GP Québec, tanto a nivel organizativo como a nivel de público. Fueron muchos los que se agolparon a ambos lados de las vallas para presenciar el paso de los ciclistas.

El domingo llegará la segunda y última cita canadiense del Pro Tour con la disputa del GP Montreal sobre un circuito más duro y de nuevo con una meta que pica hacia arriba.

Miguel Hermosilla