¡Hola amigos!

Aquí estoy de nuevo para contaros cómo sigo trabajando en esta pretemporada, con tres días de gimnasio con las pautas que os comenté en la última entrada, seguidas de media hora de bicicleta; con otros dos días de natación en la que me centro en las respiraciones profundas y mejorar nuestra capacidad respiratoria, al mismo tiempo que trabajamos una parte de nuestro cuerpo que a lo largo del año la tenemos olvidada; otro día de bicicleta de montaña o de carretera, según el clima y las ganas, pero siempre suave; y otro de caminatas por el monte o la sierra si estoy en el pueblo, ya que Valladolid, por si no lo sabíais, es la única provincia de España que no tiene montañas.

Y como también os dije, ya he hecho mi primera prueba de esfuerzo, en la que no me exprimí al máximo ya que ahora mismo creo que no tiene sentido, ya que con que sobrepasemos un poco el umbral y podamos obtener a que pulsaciones está cada zona de entrenamiento, los lactatos y el consumo de oxígeno. Lo de apretar a muerte para tener una evidencia de cual es nuestro estado de forma lo dejamos para más adelante.

Los resultados fueron muy buenos, ya que además de la prueba, el reconocimiento médico completo incluye electrocardiograma, antropometría, espirometría y analítica y a la vista de todos ellos he obtenido la misma conclusión: ¡estoy como un roble!

De peso y de grasa estoy igual que como acabé la temporada en el campeonato de España de Pista; la patata funciona muy bien, me encanta oir la frase “que corazón tan grande tienes chico”. En lo que fue concretamente la prueba me quedó un umbral aproximado de 172 pulsaciones y 370 watios, así que en cuanto tenga las gráficas y los informes completos, ¡ya se puede empezar a trabajar en base a ello!

Para terminar de pulir aspectos de cara al año que viene, voy a hacer algo que he echado de menos estos últimos años, y es hacer una visita al biomecánico. El sistema retül es uno de los más innovadores en este aspecto y equipos como RadioShack, Sky o Garmin confían en él. Digo yo que por algo será, ¿no? Además, confío plenamente en la experiencia de Yago Alcalde, que es el director del centro y que además de análisis biomecánicos prepara entrenamientos personalizados. Sólo tenéis que echar un ojo al enlace para ver que tiene mucha experiencia y ha adquirido gran cantidad de conocimientos que ha plasmado también en su libro “Ciclismo y Rendimiento” que me leí el pasado verano por primera vez (desde entonces han caído otras dos) y que fue el que me motivó para hablar con él y hacerle una visita antes de empezar la temporada, ya que después de haber tenido varios problemas con las rodillas y la espalda este año creo que es algo primordial para en la medida de lo posible buscar el origen de esos dolores y ponerles una solución antes de empezar a hacer tiradas largas en la bici.

Así que lo dicho, cuando vaya y saque conclusiones, os lo contaré por si os sirve de experiencia. ¡Cualquier duda que tengáis no tenéis más que decírmelo! Por si no lo leo por aquí, vía twitter: @NoelAlCubo.

¡Un saludo a todos!