Un refrán del mundo de la tauromaquía dice que no hay quinto malo. Eso debe pensar hoy Philippe Gilbert (Omega Pharma – Lotto), quien cumplió todos los pronósticos alzando los brazos en solitario en la línea de meta de la edición 112º de los campeonatos nacionales de Bélgica, tras un tremendo ataque a kilómetro y medio de la llegada al que nadie pudo responder, de modo que se lleva por primera vez una prueba en la que ya había subido cuatro veces al podio. Tras su estela, completaron las otras posiciones del cajón Gianni Meersman (FDJ) y Jelle Wallays (Topsport Vlaanderen – Mercator).
La carrera se dinamitaba desde bien lejos. Un demarraje a unos 100 kilómetros del final por parte del propio Gilbert formaba en cabeza un grupo de 18 corredores, mayoritariamente miembros de Quick Step, Omega Pharma – Lotto y Topsport Vlaanderen – Mercator. Todos los fugados comenzaron a colaborar rápidamente y a abrir hueco sobre un pelotón del que tiraba mayoritariamente el equipo Verandas Willems – Accent, quienes no habían metido a nadie en el corte, así como algunos favoritos rezagados, como Ghyselinck (HTC – High Road), Vansummeren (Garmin – Cervèlo) o Nuyens (Saxo Bank – Sungard). A falta de 50 kilómetros la ventaja ya superaba los dos minutos, y ante el cada vez menor entendimiento en el grupo de atrás, resultaba ya evidente que la victoria se la jugarían entre los de delante.
Los escapados prosiguieron la marcha a relevos con buena sintonía hasta que se llegó a la última vuelta, con excepción de dos ataques de Preben Van Hecke (Topsport Vlaanderen – Mercator) en los giros previos, que fueron abortados por los hombres de Quick Step (Devenyns y Vermote) con suficiencia. Por detrás, nada reseñable de cara a la victoria, salvo algún que otro ataque a la desesperada tanto en el Hoogledeberg como en el Gitsberg los cuáles, obviamente, no fructificaron; y los abandonos de varios favoritos ante la imposibilidad de conseguir la victoria, como Nick Nuyens o Johan Vansummeren.
Los últimos 13,4 kilómetros, que completarían la decimoctava vuelta al circuito de Hooglede y Gits, cambiaron la morfología del grupo cabecero, sobre todo tras el paso por el Hoogledeberg y el tercer intento en vano de Van Hecke. Los gregarios de Quick Step y Omega Pharma – Lotto tomaron el mando de la carrera, con Tommeke y Phil a rueda de ellos. Justo detrás, los cuatro hombres del Topsport Vlaanderen, deseosos de que Kris Boeckmans pudiera aguantar hasta la recta final para lanzarle el sprint. Por último, los otros seis corredores restantes, solos, a la expectativa. El trabajo de las dos grandes escuadras belgas fue efectivo, y llevaron el grupo controlado hasta el Gitsberg (muro inferior a los 1.000 metros de distancia, con un pendiente muy leve, pero con un tramo final sobre suelo adoquinado).
Allí, Dries Devenyns ponía un fortísimo ritmo, intentando bloquear el final para que su líder pudiese disputar la volatta. Sin embargo, el astro valón burló cualquier posible defensa y aplastó a todos sus rivales con un ataque brutal, al que sólo Tom Boonen (Quick Step) y Pieter Vanspeybrouck (Topsport Vlaanderen – Mercator) pudieron hacer el amago de seguir. De ese modo, Gilbert conseguía una amplia ventaja y se pudo permitir el lujo de saborear la merecida victoria en los últimos metros. Por detrás, todos sus compañeros de fuga llegaron disgregados, encabezados por Meersman y Wallays.
Clasificación final (241,2 km):
- Philippe Gilbert (Omega Pharma – Lotto) 5:19:34
- Gianni Meersman (FDJ) a 2″
- Jelle Wallays (Topsport Vlaanderen – Marcator) a 2″
- Edwig Cammaerts (Landbouwkrediet) a 2″
- Pieter Vanspeybrouck (Topsport Vlaanderen – Marcator) a 4″
- Stijn Devolder (Vacansoleil – DCM) a 4″
- Tom Boonen (Quick Step) a 8″
- Kurt Hovelynck (Donckers Koffie – Jelly Belly) a 13″
- Preben Van Hecke (Topsport Vlaanderen – Marcator) a 16″
- Fabio Polazzi (Wallonie Bruxelles – Credit Agricole) a 18″