Encaja perfectamente en el perfil de un corredor que no sólo está demandando si no que al mismo tiempo está triunfando en el ciclismo: el percherón. Ciclista grande físicamente, fuerte con un notable poderío para rodar y con una buena punta de velocidad. La mejor descripción para Stefan Küng (Wil, Suiza, 1993), integrante del equipo de desarrollo de BMC y que recientemente ha firmado contrato con la estructura del World Tour con los que competirá las dos próximas temporadas.
Formado en la pista donde consiguió notables logros como la plata en la modalidad de persecución individual y el bronce en Madison en los pasados Campeonatos del Mundo en febrero, su crecimiento en la carrera ha sido su principal baluarte para ascender de categoría. Una evolución que comenzó a demostrar en su primer año como sub23. A las primeras de cambio, el primer día de abril, sumó el primer triunfo al batir a Silvio Herklotz y Mitchell Mulhern en el Giro del Belvedere di Villa di Cordignano (1.2U). Prosiguió el éxito al proclamarse campeón nacional contra el reloj sub23, su punto fuerte. En la especialidad mostró sus cartas en la Chrono Champeonis, cita antes del Mundial, donde concluyó tercero tras los aussies Campbell Flakemore y Damien Howson. Días más tarde firmó un notable sexto puesto en Florencia superado por, curiosamente, cinco corredores que saltaron al campo profesional en 2014.
Precisamente ha sido 2014 el año del primer salto de calidad de Stefan Küng. Aprovechando al máximo su perfil de rodador logró en el mes de marzo el primero de sus grandes éxitos de la campaña. El siempre complicado Tour de Normandie (2.2) vio como accedió al liderato en el prólogo y fue manteniéndose en las primeras posiciones hasta que recuperó el primer puesto a falta de una jornada tras meterse en el corte definitivo. Un triunfo de prestigio para comenzar un año que le está situando entre mejores jóvenes. Duodécimo en la Paris – Roubaix Espoirs, decimocuarto en la Ronde de l’Oise -empatado a tiempos con Carlos Barbero o Jon Aberasturi- y vencedor en solitario de la Flèche Ardennaise son otros de los resultados que se sucedieron ante su explosión a finales de junio y comienzos de julio.
La Flèche Ardennaise dio paso a lo mejor de la temporada, hasta el momento. Finalizó segundo en el global del nacional suizo contrarreloj a 49” de Fabian Cancellara sumando el triunfo en categoría sub23. En la prueba en línea logró también el título sub23 tras concluir séptimo sólo precedido por corredores profesionales (Martin Elmiger, Michael Albasini, Steve Morabito, Martin Kohler, Gregory Rast y Marcel Wyss) empatando a tiempos con tres de ellos y quedándose a únicamente 9” de disputar el título.
Si brilló en los nacionales, en el Campeonato de Europa mostró todo su potencial. Tras ser décimo en el Omloop Het Nieuwsbad Espoirs -empatado a tiempos con el quinto- dominó la prueba contrarreloj sobre 26,9 kilómetros en Nyon; superó en 24” a un especialista como Davide Martinelli rodando a una velocidad media de 47,58 km/h. En la prueba en línea idéntica situación. Con un certero ataque en los últimos compases logró entrar en solitario pero con el mismo tiempo que el numeroso grupo cabeceo donde figuraban, entre otros, corredores como Silvio Herklotz, Liam Bertazzo, Sondre Holst Enger o su compañero de equipo Dylan Teuns.
Dos triunfos de postín que elevan a seis el número de éxitos de una campaña donde acabará con la tranquilidad de saber que disputará las dos próximas temporadas en el campo profesional. Por el camino quedará el Tour del Porvenir y los Mundiales de Ponferrada, dos objetivos donde tratará de cerrar una brillante campaña, la temporada de su primera confirmación.