Y no, con marea naranja no nos referimos a los colores del añorado Euskaltel – Euskadi, sino a los de Rabobank – Liv, el equipo de moda en las últimas semanas de la temporada. Boels – Dolmans mandaron en los adoquines pero, superada esa página, el turno de las neerlandesas ha llegado, y con mucha fuerza. Han dominado subiendo, bajando, al sprint, y allá donde han querido. Copando el podio final, con Pauline Ferrand – Prevot en lo más alto –escoltada por Marianne Vos y Anna van der Breggen–, se han llevado además como botín todas las etapas, y las clasificaciones de la regularidad, montaña y, por supuesto, por equipos.
Las escapadas a trío de un equipo son algo poco común en el ciclismo, y a muchos nos retrotraen, salvando las respectivas distancias, a aquella inolvidable Paris – Roubaix de 1996 y el Mapei – GB como protagonistas. Ayudadas -que también hay que decirlo- por la mala fortuna de quien seguramente hubiese sido su máxima rival, Emma Johansson (Orica – AIS), a quien un pinchazo inoportuno le hizo perder el tren de la victoria, Rabobank – Liv asestó un primer golpe implacable en Urkiola que llevó a Ferrand – Prevot, Van der Breggen y Vos a jugarse el triunfo en solitario, cruzando la meta de Iurreta en ese orden.
Orica – AIS salió de Oñati al día siguiente con la intención de lavar el mal sabor de boca de la jornada anterior. Primero con Valentina Scandolara y después con Loes Gunnewijk intentaron animar la carrera, aunque la fuga con más consistencia terminaría siendo la protagonizada por Aude Biannic (Lointek), Susanna Zorzi (Astana – BePink) y Elena Cecchini (Estado de México – Faren). Su aventura se terminó poco después de subir Udana para dar paso al salto de Elise Delzenne (Specialized – lululemon). Tampoco llegaría muy lejos y la selección definitiva se haría en el último paso por Udana. En la misma cima, Marianne Vos arrancó del selecto grupo de favoritas y, haciendo uso de sus habilidades en el descenso, se presentaba en la meta con la ventaja suficiente como para arrebatar el liderato a su compañera.
La tercera etapa, con salida en Arrieta y llegada en Mungia, iba a devolver el jersey amarillo a las espaldas de la joven francesa del Rabobank – Liv. Los escarceos iniciales de Lucinda Brand (Rabobank – Liv), Emma Pooley (Lotto Belisol) y Valentina Scandolara (Orica – AIS) no prosperaron. La gloria del día estaba reservada a Pauline Ferrand – Prevot, quien protagonizó una cabalgada de 40 kilómetros en el sinuoso terreno del tercio final de la etapa. Llegó a conseguir una diferencia de dos minutos sobre sus principales perseguidoras, y aunque al llegar a Mungia el margen fue más pequeño, le sobró para recuperar el liderato con un hueco casi insalvable a un día del final.
El test final de la Emakumeen Bira 2014 era una etapa con salida y llegada en Ataun a través de algunos duros puertos de paso. Una fuga de 11 ciclistas animó la carrera desde el inicio. El primer paso por el puerto de Urkillaga dejaba al grupo en 7, entre ellas Lizzie Armitstead (Boels – Dolmans), quien, tras perder todas sus opciones para la general en la víspera, salió hoy con la vista fijada en el triunfo parcial. La británica se marchaba en solitario en Abaltzisketa y, durante varios kilómetros, dio la firme sensación de poder llegar en solitario. Pero un pinchazo y el segundo paso por Urkillaga terminaron por enterrar sus opciones. De nuevo, las tres Rabobank – Liv se iban en solitario por fuerza, aunque esta vez Emma Johansson consiguió alcanzarlas. En evidente superioridad numérica, las naranjas jugaron sus opciones. Primero con Anna van der Breggen, sin éxito, y finalmente con Marianne Vos, quien ponía el broche de oro a una actuación de equipo irrepetible.