Golpe de autoridad de un Cadel Evans (BMC) que hace ya un tiempo se propuso acallar todas las voces críticas y quedar en el recuerdo de todos como un gran ciclista y no como un gran amarrategui. Con actuaciones como este Giro del Trentino donde junto con su equipo ha liderado la carrera de principio a fin no lo tendrá difícil para seguir ganándose el cariño de cada vez más aficionados. Sigue retrasando su decaída y su retirada y repetir el podio en el Giro de Italia del año pasado cada vez parece una labor más asequible al para el aussie.

Como hemos dicho, el conjunto BMC dominó la carrera de principio a fin. Y no es una forma de hablar. En la contrarreloj por equipos del primer día no encontraron rival. Un equipo compensado, motivado y con buenos rodadores les valieron para imponerse con cinco segundos de ventaja sobre los chicos de NettApp – Endura y nueve segundos sobre el Sky Procycling. El italiano Daniel Oss, único ciclista del equipo que corría en casa fue el encargado de cruzar la meta en primer lugar y enfundarse la maglia fucsia de líder de la carrera. Los cuartos en discordia, por cierto, fueron los hombres de Movistar Team (a 12 segundos), guiados por un excelente trabajo de Adriano Malori y Alex Dowsett. Caja Rural –Seguros RGA, decimoquintos a 38 segundos.

La segunda etapa estaría marcada por la presentación en sociedad de otra joya de la cantera italiana. Tras resistir un carrusel de ataques entre los favoritos a ganar la carrera, un pequeño grupo se distanciaba del líder. De entre ellos, el más listo y más fuerte fue el sorprendente Edoardo Zardini (Bardiani – CSF). En su segunda temporada como profesional, el escalador del conjunto italiano consigue su primera victoria entre profesionales apenas un par de semanas antes del Giro de Italia y se cuela entre los candidatos jóvenes a tener cierto protagonismo en carrera. Tras él cruzaban la meta un espectacular Przemyslaw Niemiec (Lampre – Merida) que, pese a haber realizado una temporada discreta hasta ahora, parece que ya calienta motores para el Giro y un genial Fabio Duarte (Team Colombia) que prefiere rendir en la carretera en lugar de penar en los problemas de visados que afectan a su equipo. En una plácida cuarta posición y en el mismo tiempo que estos dos últimos ciclistas, cruzaba la meta Evans y se enfundaba un maillot de líder que ya no volvería a soltar.

De hecho, la segunda etapa con final en alto le serviría para consolidar todavía más el liderato. En la jornada más larga de la carrera y camino del duro final en Roncone, el pelotón neutralizó una peligrosa fuga de 11 hombres, entre los que estaban Sergio Pardilla (MTN- Qhubeka) y Antonio Piedra (Caja Rural – Seguros RGA). Ya en las duras y espectaculares rampas del puerto final, el australiano apenas encontró oposición en Domenico Pozzovivo (Ag2r – La Mondiale) al que pudo descolgar en los metros finales para cruzar la meta en primer lugar, consolidar su liderato y ratificar las fantásticas sensaciones. Tercero llegó, a nueve segundos, Mikel Landa (Astana) que manaba un importante aviso de lo que iba a ocurrir en la última jornada de la carrera.

Centrándonos ya en esta última etapa, podemos decir que ha seguido el guion de prácticamente toda la carrera. Una fuga numerosa, cazada antes de la resolución final de la etapa. Ya en el puerto final, un torrente de ataques y palos entre los favoritos y un grupo de gente a la que poder tener controlados que conseguía hacerse con una ventaja que les permitía jugarse la etapa. Mikel Landa y Louis Meintjes (MTN – Qhubeka) abrían hueco y se posicionaban como favoritos a hacerse con el triunfo parcial mientras los favoritos marcaban las distancias para no hacer peligrar sus puestos en la general. Al final, en el último kilómetro, un gran ataque del vasco dejaba sentado al menudo campeón sudafricano, cuya primera victoria de gran nivel todavía va a tener que esperar. Evans consolidaba su victoria al cruzar la meta quinto, haciendo gala de una tremenda regularidad. Pozzovivo y Niemiec le acompañarían en el podio. Landa, por su parte, se descolgó del tren de Astana en la CRE, perdiendo 1’32”, tiempo que le habría valido para entrar en el podio como segundo clasificado de la prueba, toda una lástima.

Foto © BMC Racing Team

Foto © BMC Racing Team

A modo de conclusión, podemos decir que se empiezan a ver las cartas de los favoritos al Giro de Italia, quedado aun Romandía para que algunos se muestren. Evans demuestra que la edad aún no le pesa. Mikel Landa confirma que para algunos exciclistas de Euskaltel la desaparición del equipo les ha obligado a buscarse las habichuelas y demostrar todo su potencial. Louis Meintjes se confirma como valor en alza para triunfar en Europa, le veremos en la Vuelta casi seguro. Por último, Igor Antón (Movistar) merece una mención especial. Tras coquetear con el podio durante toda la carrera, una mala etapa final le apeó del top ten en la que parecía que podía ser la carrera de su resurrección. No va por mal camino, veremos qué tal en la Corsa Rosa dentro de dos semanas.