De Ronde van Vlaanderen, como todo Monumento, es una carrera de difícil pronóstico. Entre las cinco grandes, el rey del muro de pavé presenta la situación táctica más compleja y, con ello, la oportunidad de que segundos espadas y outsiders puedan beneficiarse de la duda de los favoritos al triunfo en Oudenaarde. Visto claro la superioridad de Fabian Cancellara, indiscutible a día de hoy, dos jóvenes que además de mostrar todavía proyección contemplan notorios resultados en primavera ocupan nuestras dos plazas al podio.
Peter Sagan y Sep Vanmarcke, Sep Vanmarcke y Peter Sagan. Dos jóvenes valores, dos líderes de sus respectivas estructuras con un objetivo común, alzar su primer Monumento. Peter Sagan, por derecho propio, se ha convertido en el tercer gran nombre del pavé. Después de los dos grandes de la última década, Fabian Cancellara y Tom Boonen, el eslovaco representa el relevo generacional, un testigo que avanza a pasos agigantados y que, además, cada vez es más inteligente en carrera. Lo demostró el viernes pasado en Harelbeke cuando, tras enganchar con el corte definitivo, eliminó a su principal amenaza, John Degenkolb, para conseguir una gran victorias en Harelbeke después de dominar las embestidas de Stijn Vandenbergh y Niki Terpstra. Lo volvió a demostrar en la primera etapa de La Panne cuando seleccionó el grupo con un ataque con su compañero Oscar Gatto a rueda a quien no pudo regalarle la victoria pero que si que dejó en una posición envidiable para adjudicarse la general final.
Peter Sagan es el rival más fuerte que se puede encontrar Fabian Cancellara. Su rapidez y potencia en las distancias cortas son el principal obstáculo que encontrarán sus rivales en De Ronde van Vlaanderen donde todavía se recuerda la maniobra del suizo en el Paterberg. Pero a día de hoy, eso para el de la Cannondale, está olvidado. Serán de nuevo las distancias largas y un ataque sostenido los puntos que el deberá mostrar su crecimiento si quiere optar a un triunfo donde su debilidad, de nuevo, estará marcada por la soledad. Y es que es Oscar Gatto el único corredor que apunta a poder estar a su vera en los momentos decisivos.
La victoria en Harelbeke, un respaldo para Sagan. Foto © Cannondale Pro
Sep Vanmarcke representa la esperanza de Belkin Pro Cycling para regresar al triunfo en un Monumento. Lo hará en una primavera regular, sin triunfo pero regular. Cuarto en el Omloop, tercero en la Kuurne, quinto en Harelbeke y cuarto en Wevelgem. Resultados que demuestra el crecimiento y solidez de un corredor que ya demostró en el Paterberg, en Harelbeke, una mentalidad ganadora que le hizo enfilar y seleccionar el pelotón de favoritos. Él, al contrario que Peter Sagan, deberá buscar romper la carrera para ganar opciones ya que, como demostró en la anterior Paris – Roubaix, al sprint es superable a pesar de una sustancial mejora que le llevó el pasado domingo a ser cuarto en Wevelgem.