A principios de la presente temporada, el pelotón recibía la relativamente sorprendente, aunque también lógica, noticia de que Marianne Vos no debutaría en carretera en 2014 hasta el 23 de abril, con motivo de la disputa de la Flecha Valona. La experiencia del pasado año, en el que sufrió algunos problemas físicos provocados, presumiblemente, por el exceso de competición, le hizo tomar la sabia decisión de descansar tras la temporada de ciclocross, en lugar de enlazar directamente con las carreras de las ruedas finas como acostumbraba en campañas previas.
Es evidente que la carrera deportiva de la neerlandesa ha llegado a un punto en el que, tras haberlo ganado casi todo, está en el momento de comenzar a elegir cuidadosamente los objetivos para no quemarse y prolongar su superlativo nivel lo más posible. Sus pinitos con el MTB y el objetivo olímpico de disputar la prueba de cross country en Rio 2016 también restan algo de tiempo a la carretera, dejando vía libre a sus otrora rivales en un escenario más abierto que de costumbre y ciertamente interesante.
Con 5 victorias en la general de la Copa del Mundo –2007, 2009, 2010, 2012 y 2013–, el dominio de Vos en el gran trofeo anual queda patente. Incluso en un año como 2013 en el que la de Rabobank – Liv tuvo que hincar la rodilla en algunas carreras por etapas montañosas como el Giro Rosa y la Emakumeen Bira, los recorridos favorables a sus condiciones de las carreras de un día no se le resistieron. No obstante, será muy difícil que lo repita en 2014 al perderse las tres primeras pruebas: Ronde van Drenthe, Trofeo Alfredo Binda y De Ronde van Vlaanderen.
Es, por tanto, la gran oportunidad para otras corredoras. Seguramente el primer nombre a mencionar sea Emma Johansson, La sueca del Orica – AIS, segunda en la pasada edición, así como en 2009 y 2010, es quien mejor reúne la fiabilidad, regularidad y condiciones para estar delante en todas las pruebas. Y aunque, sorprendentemente, no arrancase con buen pie en Drenthe, lo más probable es que las próximas carreras sirvan para enderezar su rumbo en la general. Algo similar puede decirse de Ellen van Dijk (Boels – Dolmans), quien va poco a poco entonándose tras un inicio de año más tranquilo que el pasado.

Pieters (montaña), Slappendel (sprint), Armitstead (general) y De Jong (jóvenes), primeras líderes de la CdM 2014 | Foto © Cor Vos
Precisamente en Boels – Dolmans se encuentra la que podría ser la sorpresa de esta Copa del Mundo 2014: Lizzie Armitstead. En una forma arrolladora, la primera líder de la competición encara este domingo en Italia un test importante. Las características relativamente favorables a las escaladoras del Trofeo Binda no son ideales para ella, pero, de salir bien parada, habrá dado un paso fundamental para plantearse aspirar al entorchado final. Eso sí, la británica necesita mantener una consistencia a lo largo de la temporada que hasta este año no ha sido capaz de demostrar.
Rabobank – Liv, por su parte, no contarán con Vos en las primeras batallas, pero sí con otras dos bazas muy válidas que ya están dejando su huella desde el principio. La joven y talentosa Anna van der Breggen acecha de cerca el liderato de Armitstead tras su segunda plaza en Drenthe y es capaz de brillar en cualquier tipo de clásica. Y, si no es ella, cuentan también con Annemiek van Vleuten, quien ya sabe lo que es llevarse la Copa (en 2011) y figura como 5ª clasificada provisional en vísperas de Binda.
Fuera de estos nombres, se antoja difícil pensar en otras aspirantes. Evelyn Stevens (Specialized – lululemon) puede conseguir muchos puntos en las pruebas más montañosas, pero las más llanas penalizan sus opciones. En su equipo, quizá tengan más opciones globales Tiffany Cromwell o incluso Chantal Blaak. En una situación muy similar a la de Stevens se sitúa Elisa Longo Borghini (Hitec Products) y la eterna desventaja de su casi inexistente punta de velocidad. Al fin y al cabo, la Copa del Mundo casi siempre ha terminado siendo feudo de corredoras con un sprint competente.