El corredor neoprofesional Alexis Gougeard (Ag2r – La Mondiale) ha conseguido la victoria en la 15ª edición de la Classic Loire Atlantique con un ataque en solitario rematando así la fuga del día que llegó a tener en sus inicios hasta 17 integrantes. Kenneth Vanbilsen (Tosport Vlaanderen – Baloise) ha sido segundo y Wesley Kreder (Wanty – Groupe Gobert) tercero. Con este triunfo el equipo Ag2r – La Mondiale alcanza el registro de victorias de 2013 confirmando un evidente cambio de tendencia, por fin.
La victoria se cimentó con un bonito pulso de más de 160 km entre los fugados y el pelotón. El primer gran corte de la jornada contaba con un total de 21 corredores que no llegaron a tener más de 40 segundos debido al trabajo de Caja Rural – Seguros RGA e Itera – Katusha. Al paso de la segunda vuelta la ventaja era de 35 segundos. Mucha pelea en la parte delantera para los diferentes sprints intermedios y el GPM, con poca fe de cara a la hipotética victoria.
Con algo más de 100 km para la línea de meta se configuraba la definitiva selección donde se iba a jugar la victoria. Julien Fouchard y Romain Zingle (Cofidis), Arnaud Courteille (FDJ.fr), Kevin Reza (Team Europcar), Arnaud Gérard (Bretagne – Séché Environnement), Alexis Gougeard (Ag2r – La Mondiale), Sander Helven y Kenneth Vanbilsen (Topsport Vlaanderen – Baloise), Wesley Kreder (Wanty – Groupe Gobert), Julien Duval (Roubaix – Lille Metropole), Flavien Dassonville (Big Mat – Auber 93) y Tom Dernies (Wallonie Bruxelles) rápidamente cambiaron el foco hacia miras mucho más altas y en menos de 20 km consiguieron 2 minutos con el pelotón.
Con dos vueltas para el final la ventaja era de menos de dos minutos, sin embargo suficiente para jugarse delante la victoria. El ataque definitivo tendría lugar a 10 km de meta, protagonizado por un Gougeard muy activo en toda la jornada, a esas alturas ya ganador del GPM. La agónica persecución del valiente corredor francés se decidía por metros. Kenneth Vanbilsen y Wesley Kreder se destacaban sobre el resto de fugados en esta persecución y a pesar de que estuvieron cerca de materializarlo Gougeard administró bien su ventaja merced quizá a su atributos como contrarrelojista en el campo amateur y acabó levantando los brazos consiguiendo así su primera victoria como profesional.