La de hoy en el Tour de Vendée se puede considerar a todas luces una doble victoria. Por un lado está la de Nacer Bouhanni (FDJ.fr) en la carrera en sí, haciéndose con un sprint para el que era el gran favorito. Por otro, hay que destacar la actuación de Samuel Dumoulin (AG2R La Mondiale). Segundo en la llegada, los puntos otorgados por ese puesto le han servido para desbancar del liderato de la Copa de Francia a Bryan Coquard (Europcar) en la última oportunidad. De esta forma, el menudo velocista francés se hace con la general de dicha clasificación por segundo año consecutivo.
La carrera, muy rápida en su inicio, ha complicado los intentos de fuga debido a la gran velocidad. Casi 49 kilómetros se cubrieron en una primera hora que, pese a las numerosas tentativas, vio como el pelotón no conseguía desgranarse. Finalmente, tres corredores lograron destacarse: Francesco Reda (Androni Giocattoli – Venezuela), Pierre-Luc Perichon (Bretagne- Séché Environnement) y Paven Kochetkov (Rusvelo). Una fuga que en torno al ecuador de la carrera iba a conseguir su ventaja máxima, en torno a los 7 minutos.
A partir de ese momento, la diferencia comenzaba a disminuir lentamente bajo el empuje de un pelotón que buscaba la llegada masiva. A 50 del final apenas sobrepasaba los 4 minutos y la tendencia no se iba a revertir. Entrando en el circuito final en La Roche-sur-Yon casi los tenían a la vista. Alcanzada la fuga, lo intentó Wesley Kreder (Vacansoleil – DCM), en búsqueda de revivir los laureles de su victoria de la edición anterior. Acompañado de Julian Kern (AG2R La Mondiale), resistieron en cabeza unos kilómetros, para sucumbir finalmente ante un pelotón comandado por Europcar y FDJ. En el sprint, Nacer Bouhanni se impuso sin problemas.