Si ayer comentábamos que le había costado más de dos años a Jens Keukeleire (Orica GreenEdge) volver a sumar una victoria, en esta ocasión apenas ha dejado pasar veinticuatro horas para volver a levantar los brazos. En un final parecido al de las dos etapas anteriores, Keukeleire ha vuelto a mostrarse como el más rápido en el final de Ojo Guareña. Justo detrás suya ha entrado el líder, Anthony Roux (FDJ) que conservará una jornada el primer puesto en la clasificación general.
En esta ocasión la fuga tardó en formarse algo más que en días atrás. Un primer intento con gente como Giovanni Visconti (Movistar) o Luca Paolini (Katusha) lo intentó de salida, pero el que finalmente lo consiguió fue el cuarteto formado por Amets Txurruka (Caja Rural), Janez Brajkovic (Astana), Anthony Ravard (AG2R – La Mondiale) y Zakkari Dempster (NetApp – Endura). Los Continentales españoles, Burgos BH y Euskadi intentaron meter a algún integrante en la fuga sin éxito. Jon Larrinaga (Euskadi) estuvo persiguiendo en solitario durante varios kilómetros, pero cuando la diferencia se fue por encima del minuto y medio lo dio por imposible.
Los cuatro fugados hicieron camino juntos, pero la dureza de un terreno rompepiernas hizo que tanto Ravard como Dempster se descolgaran ante el impetú de los otros dos fugados. Brajkovic y Txurruka llegaron a tener alrededor de tres minutos de diferencia respecto a un pelotón del que FDJ tiraba con comodidad hasta que a falta de veinte kilómetros, en el primer paso por meta, los hombres de Movistar decidieron endurecer y de paso reducir de un plumazo toda la ventaja de unos fugados que fueron atrapados a trece kilómetros de la conclusión.
Tras la neutralización, empezaron una serie de ataques que dieron comienzo con Haritz Orbe (Euskadi) y que en algunos momentos llegó a tener en cabeza una decena de corredores con tres Movistar entre ellos. Esto hizo que el entendimiento no fuese bueno delante y todo el pelotón entrase compacto al último kilómetro con los FDJ en cabeza. Los hombres de Roux llevaron en una inmejorable posición a su lider durante toda la ascensión final, pero a la hora del remate final nuevamente Keukeleire fue el más fuerte.