La segunda victoria consecutiva de Fabian Cancellara en el Gran Premio de Harelbeke era una noticia esperada, sobre todo desde la renuncia de Boonen, Flecha o Gilbert en favor de la Gante-Wevelgem. La manera de conseguir la victoria, que tampoco es sorprendente en absoluto, nos deja un panorama terrorífico para Flandes y Roubaix. ¿Cómo se puede luchar contra el suizo en las carreras de piedras? No hay sitio para ningún tipo de estrategia, porque las piernas de Cancellara controlan e intimidan todo lo que sucede sobre el asfalto -y el empedrado-.
Hoy Cancellara empezó a encarrilar su victoria cuando su compañero Stuart O’Grady se coló en la escapada del día. Aunque al final el suizo posiblemente se las hubiera apañado igualmente para decidir la carrera de alguna forma, la contribución del australiano iba a ser de una relevancia sensible. Por el otro lado, Garmin – Cervélo, que contaba con los otros dos hombres de más peso en la carrera (Hushovd y Haussler), se posicionó como el opositor al dominio de Cancellara: primero colaron a Sep Vanmarcke (cuarto final, y sólo 22 años) en la fuga y después, tras endurecer la carrera en el Taaienberg, filtraron a su líder germano-australiano en un corte que abrió distancias con el pelotón.
Quedaban 50 kilómetros para meta y el corte de Haussler se produjo poco después de que Cancellara, como en Flandes y Roubaix en 2010, cambiase de bicicleta y perdiese contacto con el pelotón. El suizo se encontraba un pelotón fracturado a su llegada, con Haussler por delante con Roelandts y Terpstra como acompañantes más peligrosos. El grupo fue alejándose del pelotón y acercándose a Vanmarcke y al grupo de O’Grady, mientras la distancia a meta se reducía. La situación se convertía en un peligro real para el suizo, con el Oude Kwaremont en el horizonte.
Claro que Espartaco, el amo y señor del adoquín, no iba a permitir que la carrera se le fuese de las manos. Mientras un grupo con Tankink, Gusev o Ivanov se iba por delante, el campeón del mundo contrarreloj lanzaba un ataque demoledor que sólo Simon Spilak intentaba seguir, con mucho optimismo y poco éxito. Enseguida alcanzó al primer grupo y, en solitario, siguió tirando hacia adelante, para capturar al grupo de Haussler, que a su vez tomaba la cabeza de carrera. Apenas con un par de ayudas de los Katusha, Cancellara acercó los dos grupos tanto que O’Grady pudo descolgarse y dar el relevo final para que el dorsal uno llegase a cabeza de carrera.
Y una vez que tomó la cabeza, todos, ciclistas y espectadores, estábamos esperando el movimiento de Fabian. Quedaban poco más de 15 kilómetros para la meta de Harelbeke cuando Bram Tankink atacó aprovechando un tramo llano y la indecisión del grupo. Lógicamente, nadie quería liberar a Cancellara del trabajo de captura, como corresponde al máximo favorito en una carrera de estas condiciones. El suizo lo vio, comprendió, asintió y saltó hacia el holandés, al que alcanzó de forma instantánea y, en una maniobra muy parecida a la que hizo camino de Roubaix hace un año, no se detuvo al coger a Tankink y arrancó derecho hacia la victoria final.
Por supuesto, no hubo historia. El grupo, razonablemente numeroso, se jugó quién acompañaría al suizo en los otros dos escalones del podio, con premio para Roelandts y un reaparecido Vladimir Gusev. Cancellara había entrado en meta un minuto antes. Hoy no estaban Boonen, Flecha y Gilbert, pero es que da igual: la superioridad del suizo parece no admitir discusión. Resuelve cuando quiere y como le da la gana, como si corriese solo. A ocho días del Tour de Flandes, cualquier cosa que no sea un doblete del de Berna en De Ronde y Roubaix parecerá una sorpresa. No hay ningún dato que hable más claro sobre la grandeza de Fabian Cancellara.
Clasificación de la prueba:
1. Fabian Cancellara (Leopard – Trek)
2. Jürgen Roelandts (Omega Pharma – Lotto) a 1’00”
3. Vladimir Gusev (Katusha) m.t.
4. Sep Vanmarcke (Garmin – Cervélo) m.t.
5. Bram Tankink (Rabobank) m.t.
6. William Bonnet (FdJ) a 1’01”
7. Heinrich Haussler (Garmin – Cervélo) a 1’06”
8. Sébastien Hinault (Ag2r) m.t.
9. Stuart O’Grady (Leopard – Trek) m.t.
10. Sergei Ivanov (Katusha) m.t.